Capítulo XXV: La encrucijada del destino

— ¿Cómo es posible? — decía Charles quien estaba estupefacto por lo que había visto — Mi espada fue...

— Es lo que sucede cuando los héroes se apoyan demasiado en una cosa — responde Nightmare — Tienes un poco de poder y te crees con la habilidad de cambiar al mundo, ¡pues no es así, Charles! Ahora, mira esto.

Nightmare presiona un botón y ambos son tragados por un portal que está en el suelo que les transporta a otra habitación con doce esferas, una de ellas apagadas, frente de ellas está el mural con la historia. Charles lee y observa que la espada que tiene en su poder, que ahora está mellada, es solo una de los siete objetos legendarios.

— Escucha con atención — dice Nightmare — tu espada es poderosa, pero solo es una. No tienes la experiencia suficiente ni la habilidad necesaria para controlar su majestuoso poder. Y menos contra alguien que tiene el collar de la disciplina, que, en otras palabras, desactiva cualquier objeto legendario que se encuentre en mi campo.

— Entonces... — dice Charles mientras cae de rodillas — ¿no puedo hacer nada? ¿mi trayecto hasta aquí fue inútil?

— No es así — responde Nightmare — pese a todo pronóstico en tu contra fuiste capaz de llegar a mis aposentos y si bien esperaba una batalla grandiosa, aún te falta experiencia para enfrentarme. Te concederé algo, sólo si cumples lo que te pediré.

— ¿Qué es? — pregunta Charles mirando fijamente a Nightmare.

— Muy sencillo — indica Nightmare — entrégame la espada, juntos buscaremos la espada roja del caos, me volveré gobernante de este mundo y serás mi mano derecha. Tus allegados y tú podrán vivir, ¿no es genial?

— Cómo poder confiar en alguien que falló en su palabra — dice Charles — vencí a Draug y nunca me entregaste a Jessica.

— Oh.. Draug — dice Nightmare mientras ríe — ¡no puedo creer que haya podido ser derrotada por un debilucho como tú! Le hacía falta odio.

— ¡Ella tenía odio en su corazón! — responde Charles — solo que a las personas incorrectas, ustedes la alejaron de mi lado y le hicieron creer que su hermano estaba muerto, ¡son ustedes los culpables de mis malditas desventuras!

— Sí, sí. — responde Nightmare con un tono sarcástico — ¿Pero no es así como inician las historias? ¡Un héroe intenta buscar los secretos de su pasado y es derrotado por su futuro! Ahora hay que buscarle un nombre, ¡pero será fantástico! En mi nuevo orden mundial, obligaré a todos a comprarlo. Uh.. Orden mundial...

Nightmare lanza una patada a Charles en su mejilla haciendo que éste expulse un diente.

— ¡Viste lo que ocasionas! — grita Nightmare — espera... debo calmarme... no puedo maltratar a mi futuro siervo, ¿no lo crees?

— Qué te hace pensar que estaré de tu lado — pregunta Charles mientras escupe sangre — jamás sucederá.

— Nunca digas jamás, querido. — dice Nightmare — estoy seguro que si Jessica te lo pide, estarías de su lado.

— Ella jamás se prestaría para tu plan — menciona Charles — ¡no sería parte de algo tan retorcido! Jamás trabajaría para ti.

— Ya te dije que no digas esa palabra. — dice Nightmare mientras patea de nuevo a Charles en la otra mejilla — Pero tienes razón... ella no trabaja para mi...

— Si ella no trabaja para ti — dice Charles mientras se levanta — ¿Qué te hace pensar que yo lo haré? Incluso si trabajase para ti, sería lo mismo que cuando Draug trabajaba para ti, solo debo vencerte para acabar con su trance y volvería a mi.

— ¿Vencerme? ¿A mí? — pregunta Nightmare mientras ríe — debes estar bromeando, ¡sirves como comediante! Ya viste que no puedes vencerme, ¿qué harás? ¿contarme chistes hasta morir?

Nightmare presiona otro botón y son devueltos ambos al jardín.

— Quizá tenga mi espada mellada — dice Charles mientras regenera sus heridas — pero, ¡tengo fuerza de voluntad y juro que te venceré!

Charles se acerca a gran velocidad con la intención de golpear la metálica máscara de Nightmare.

— ¿Con tus manos desnudas? — pregunta Nightmare — ¡acepto tu desafío, ven a mi!

Charles sonríe y golpea la máscara de Nightmare cuyo impacto no sólo hace que voltee su cara y caiga al piso, sino que también rompe su máscara. El efecto adverso es que Charles tiene su mano izquierda destruida.

— Uff. — dice Charles mientras regenera su mano izquierda — era fuerte la máscara.

— Maldito bastardo. — menciona Nightmare mientras escupe algo de sangre — destruiste mi máscara, me hiciste botar sangre y me rompiste un diente. Todo en un día, parece que tienes la fuerza suficiente para que la batalla sea grandiosa. Entonces te subestimé y ese fue mi error, lo reconozco.

— ¿Por qué no te quitas la capucha y me miras de frente? — pregunta Charles en un tono irónico.

— Lo haré. — dice Nightmare mientras se levanta — Sé paciente.

Nightmare se levanta, retrae su capucha hacia atrás y mira de frente a Charles que queda estupefacto ante lo que acaba de ver.

— Tenías razón en que Jessica no trabajaría para mí — responde Nightmare — pero no por la estupidez que dijiste, sino porque, ¡yo soy Jessica!

— Jess... — dice un incrédulo Charles que da unos pasos hacia atrás — ...no puede ser...

Jessica se acerca a gran velocidad y golpea con la rodilla en el estómago a Charles.

— ¿Es este el destructor... — dice Jessica entre risas para después juntar sus manos y darle un golpe en el cuello a Charles que lo tumba al piso — ...o el creador? ¿Ya? ¿Eso fue todo? ¿El poderoso Charles cae de rodillas? ¿Las aventuras de este héroe tan desafortunado llegan a su fin sólo por ver la cara de su amada?

— No puede ser... — balbucea Charles — ...Jess... No puedes ser tú...

Jessica se pone detrás de Charles y rodea sus brazos en su cuello, dándole un abrazo. Se quita un guante y pasa sus uñas delicadamente en la mejilla de Charles mientras le abraza.

— Oh mi amado Charlie — dice Jessica — ellos me hipnotizaron, me obligaron a luchar contigo.