Aventuras de un héroe desafortunado

Capítulo XI: Resurrección

- ¿Qué dicen? - pregunta Danna con incredulidad - no fuimos los causantes de la explosión de la fábrica.

- No es lo que los testigos dicen - dice el Inspector George Ross - preguntamos a unos vagabundos que rondaban la área. Son muy receptivos cuando se trata de vender a otra persona a cambio de privilegios en el Imperio.

- Sigh. - piensa Charles - Esto está mal. ¿Qué puedo hacer? Si esas armas que portan son tan peligrosas como se mostró en la transmisión no podré hacer nada. No sé hasta que nivel llegará mis poderes de regeneración, pero estoy seguro que no podré salvar a las chicas.

- No lo piensen mucho. Si se entregan lo tomaremos en cuenta - señala Ross - serán arrestados y llevados al Tribunal Imperial donde serán juzgados por las acusaciones impuestas. Si son culpables es evidente que serán ejecutados, pero no será algo público sino privado. Aunque quizá el Tribunal Imperial sea misericordioso y les deje vivir... pudriéndose en la cárcel. Aunque, pensándolo bien, es demasiado protocolo. Es mejor que mueran ahora mismo.

Ross ordena a sus subordinados a apuntar al trío que no tienen posibilidades de salir con éxito.

- Pero... ¿no se supone que somos Clase B? - pregunta Jessica - según la transmisión no deberíamos ser afectados.

- Sí. - dice Ross - Pero hemos solicitado al Tribunal Imperial desactivar el dispositivo de seguridad hasta acabar con los culpables. De esa manera evitamos errores.

- No lo permitiré. - dice Charles - Ese no es el ideal de justicia. ¿Acusar a inocentes? Es inaudito.

- Qué aburrido. - menciona Ross mientras apunta a Charles - Nadie puede probar que son inocentes, así que lo que digas no me interesa. Es más, seré yo el que le dispare a los tres. Subordinados, no intervengan bajo ninguna circunstancia.

Ross dispara. En ese mismo instante Charles baja la mano y se activa la espada legendaria que, una vez que la punta toca el suelo, emana un vapor ardiente que empuja lejos a la Policía Superior Especial, incluyendo a Ross y permite al trío escapar.

- ¿Dónde están? - pregunta Ross - ¿por qué no los atacaron?

- Señor - responde uno de los subordinados - usted nos ordenó no intervenir. Aunque pudiésemos buscarlos, el vapor que se ha emanado es demasiado caliente y ha cubierto gran parte de la zona. Nuestras manos se han quemado. Sugiero que nos retiremos hasta que el vapor se disipe,  mientras debemos dar explicaciones a la población de que es una maniobra de prueba. No podemos permitir que se sepa la humillación recibida.

- Tienes razón - indica Ross - Ésta humillación es inaceptable, en los años de existencia de la Policía Superior Especial nadie ha podido escapar. Si se conoce la información le perderán respeto a nuestra honorable institución. Muchachos, con profundo pesar, ordeno que nos retiremos.

La Policía Superior Especial se retira del lugar. El trío es capaz de llegar a un alcantarillado donde pueden descansar momentáneamente. Danna y Jessica notan que Charles ha perdido un brazo.

- ¿Podrás regenerar el brazo? - pregunta Danna.

- Eso intento. - dice Charles que está cansado - pero fue destruido completamente y mi cansancio producto de usar la espada me impide una regeneración a alta velocidad.

- De acuerdo - Danna venda la herida - estamos en un alcantarillado, quiere decir que si no tapamos tu herida podrás contagiarte de tétanos. Debemos huir de acá.

- ¿Y nuestras cosas? - pregunta Jessica - ¡no podemos irnos sin ellas!

Danna agarra a Jessica de la camisa

- ¿Estás viendo a lo que nos enfrentamos? - dice Danna - ¡somos fugitivos!

- Suficiente ambas - dice Charles - podemos ir por acá y llegar al sistema de aguas residuales de la siguiente ciudad que está conectada a través de una puerta a la estación de trenes. Allí podremos alejarnos de la PSE, al menos temporalmente.

Mientras caminan, Jessica sufre un colapso y cae, teniendo que ser cargada por Charles y Danna. Mientras tanto, en la base subterránea.

- Señor - dice Kalin - Charles ahora es un fugitivo del Imperio y ha escapado.

- Se ha desviado de su camino - indica el líder - de seguir así, nos prestará poca atención. He perdido muchos soldados como para que eso suceda, por lo tanto deberá pagar una compensación. Ha de perder algo que ama. ¡Kalin! ¡Vypra! acompáñenme.

Los tres van a lo que parece unas catacumbas. Luego de caminar por un largo rato, llegan a una cripta donde reposa un viejo ataúd.

- Kalin, conoces la historia, ¿no? - pregunta el líder - explícale a Vypra.

Con gusto, maestro - dice Kalin volteándose hacia Vypra - hace cinco años, nuestro líder, con su magnifico poder, logró hacer lo impensable: crear una entidad de pura maldad. Hoy, esa entidad que reposa en ese ataúd será liberado para que te acompañe y juntos le recuerden a ese patético héroe la posición en la que está.

El líder rompe las cadenas del ataúd, liberando así a la entidad que inmediatamente despierta. Luego, le ordena tanto a la entidad como a Vypra que vayan a por Charles. En otro lado, Charles, Danna y Jessica (que aún sigue inconsciente) llegan hacia la estación subterránea de trenes de la otra ciudad.



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En el texto hay: tragedia, aventura, sobrenatural

Editado: 19.02.2020

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