Quitarse a Yui de encima fue difícil. Tenía que hablar de tantas cosas a la vez y confundirla para que dijera de manera inconsciente cuál era su objetivo.
Reyik no dejo de disculparse en su nombre y aunque no tenían relación, le prometió que el examen lo pasaría con las calificaciones más altas. Christine quería que dejara de sentirse culpable pero el chico sentía que aún debía disculparse.
— Yuu, ven a comer... — pidió Ryusui. Ese día llegó temprano y Christine lo recibió emocionada, a veces sentía que no podía leer sus emociones o que la hacía sentir de esa manera porque tenía que estar mucho tiempo rodeada de los niños.
En sus conversaciones cotidianas, le dijo que su teléfono se cayó y lo llevo a reparar, después le comunico que Anya ya empezaba a dar sus primeros pasos y Yuu quería aprender a usar palillos. Escucharla hablar también era algo que le encantaba. Después de la cena podían platicar pero sentía que ella estaba agotada así que sus noches se iban mientras la observaba dormir.
— Joiichiro, ¿este es el nuevo guion? — pregunto al ver unos cuadernillos.
— Si, el director te quiere en esta serie. Trata de una matrimonio de 15 años, tres hijos en común; todo cambia cuando la esposa decide dar clases particulares en una escuela de apoyo y uno de sus estudiantes se enamora de ella así que intenta conquistarla...
La historia le parecía familiar.
— ¿Y cómo acaba?
— Ni idea, la mangaka está trabajando en los episodios finales pero estará listo un mes antes de que empiece a grabar este mini drama... lo leí y me parece que quiero que ella se quede con el estudiante — menciono de la nada mientras servía té
— ¿Porque? — quiso saber mientras hojeaba los cuadernillos.
— Bueno, según la historia, ella estaba cansada de tener que estar en casa donde no era reconocida aunque trabaja como profesora siente que su papel en el mundo está atascado después de ser esposa y madre. Un cambio de aires no estaría mal aunque ella no vea futuro en su nueva relación — explicó al momento que sacaba su celular del bolsillo — ¿quieres leerlo? Está disponible en la App...
Ryusui ya no escuchaba. Le recordó mucho a la forma en que Reyik apareció cerca de Christine. Busco la historia y comenzó a leerla. Sin darse cuenta comenzó a compararlo con la realidad y termino lanzando el teléfono de lo irritado que estaba.
Llamo a casa pero nadie contestó.
Salió rápidamente de la agencia y le pidió a Joiichiro las llaves de su auto. Este se las entrego como si nada y lo vio irse. Pensó que había ocurrido algo con su esposa o sus hijos.
En casa
— ¿Christine? ¿Dónde estás? — pregunto apenas abrió la puerta
— En el baño... — respondió una voz con eco.
La casa está en silencio. Yuu dormía en su cama y Anya estaba en la cuna. Abrió la puerta y vio a Christine dentro de la bañera.
— Te llame, ¿porque no contestaste el celular? — pregunto con el corazón en la garganta.
— Te dije anoche, mi teléfono murió y está en el taller. Ryusui, ¿dormiste mal? Espera, ¿porque estás aquí? ¿No dijiste que revisarías un nuevo guion?
— ¿Ehh? — se dio cuenta que se sintió desesperado. Si la perdía, ¿qué sería de él? — Bañémonos... — contesto y se quitó la ropa para entrar en la bañera — espera, a ti no te gusta bañarte a esta hora...
— Yuu arrojó su comida a la pared y a mí porque no lo deje servirse jugo. ¿No lo viste? Esta sucia la cocina.
Ryusui no contesto y la abrazo. Christine se sentía confundida ya que no quería hacer nada en el baño. Ella durmió bastante mal. Después de unos minutos se cambiaron. Le sirvió a Ryusui un trozo de tarta que Dove le envío el día anterior y se puso a limpiar lo que Yuu ensució. Ryu estaba ciego, el desastre era tan grande que no lo vio.
No fue eso. Algunas historias ficticias estaban basadas en hechos reales propios o historias contadas por extraños. Incluso los guionistas lo dicen a veces: basado en hechos reales y con el permiso de los participantes.
— Christine, Tengamos otro hijo...— le dijo de la nada, hizo que Christine se paralizará mientras le daba la espalda
— Creo que eso es imposible... — respondió y termino de limpiar — Ryu, ¿te sientes bien?
— Bueno...también quisiera que Anya fuera una hermana mayor. Además, ¿qué tal si vas a la Galería Bayo y tomas el puesto de directora visual? Conozco a alguien que...
— Detente y dime qué pasa... — le dijo interrumpiéndolo mientras se sentaba frente a él. — Estás muy raro. No quiero trabajar en otra galería...
— Bueno...ya sabes...— Ryusui no tenía escapatoria. Decidió decirle todo para que ella se burlara de su reciente inseguridad.
Comenzó a decirle que el nuevo guion era sobre una profesora que tenía un affair con un estudiante. Confesó que su cabeza se llenó de imágenes y pensamientos raros pues siempre que iba al taller encontraba a Reyik Whitelies allí, lo que le parecía molesto. No podía evitar desconfiar de él y cualquier otro hombre.
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malas decisiones, conflictos matrimoniales, detrás de la fama
Editado: 09.11.2023