Bajo las luces de noviembre (próximamente)

Capitulo 1

Gia

Todo me da vueltas, el piso tiembla y las paredes se mueven, me siento eufórica y con ganas de saltar, pero al mismo tiempo me siento vacía como si algo me faltara, como si las drogas y el alcohol no fueran suficiente para este mal

Ni siquiera recuerdo cómo llegué aquí a... ¿Dónde estoy? Ni siquiera se dónde estoy, patética lo se, solo se que estoy en un pasillo largo con una luz muy tenue con gente besándose y fumando dios sabe que

¡Así ya lo recuerdo! Estoy en casa de un amigo de Francisco, el me vende las drogas, ¿Cómo llegué? aquí Fácil, había tenido un día de mierda — como siempre — y para completar, al llegar a casa no tenía mi marihuana, así que llame a Francisco y me dijo que estaría aquí

Llegué me la vendió y decidí quedarme para pasarla bien un rato, pero como siempre todo se salió de control

La música, el alcohol y las drogas por todo lados me envolvió en sus garras y no me dejó salir

No se cuanto tiempo tengo aquí solo se que es mucho rato

Tal vez dirán que no vale la pena hundirme en esto, pero es que no entienden mi vida es una completa mierda, me pasó las 24 horas del día sola, mis padres me llaman una vez a la semana y solo hablamos 5 minutos y solo para decirme que no vendrán en un par de meses, no tengo amigos, no tengo más familia no tengo nada, por eso digo que todo el dinero del mundo es nada cuando no tienes con quien compartir

En la secundaria me hacen bullying, estoy con una maldita depresión todo el tiempo y para echarle más sal a la herida soy adicta, o bueno creo que eso ya lo deje claro, lo lamento cuando estoy drogada tiendo a decir muchas veces lo mismo

Pero en fin como todo lo bueno que me produce el alcohol y las drogas se acaba, termina dejándome una fuerte palpitación en la cien, tanto que ciento que en cualquier momento me estallará la cabeza y sin recordar nada de lo que hice la noche pasada

Justo como ahora, estoy en una cama con un chico, desnuda y no tengo ni puta idea de como llegué o como era su nombre solo recuerdo lo bien que me lo hizo por el leve ardor en mi entre pierna, no lo voy a negar es muy atractivo, su cabello color miel se ve sedoso, su piel ligeramente bronceada y con músculos me deja saber que hace ejercicio o práctica algún deporte, no recuerdo el color de sus ojos así que no puedo decirles de que color son y se quedarán con las ganas por qué yo a este galán no lo vuelvo a ver en mi vida

Me levanto con mucho cuidado de la cama tratando de no hacer ruido y no despertarlo

Busco por todas partes mi vestido y tacones, hasta que doy con ellos, mi vestido — o bueno lo que queda de el — está tirado en una esquina en el piso, lo agarro y hago un mojin al verlo roto por la parte de arriba

Pienso y algo hace clik en mi cabeza, tomo la camisa negra de el, que estaba enrollada debajo de la cama

Me pongo el vestido como falda y encima la camisa, tomo mis tacones y salgo de hay no sin antes dejarle una pequeña nota disculpame por llevarme su camisa, pero era eso o irme desnuda

Bajo las escaleras esquivando los vasos rojos y cuerpos de adolescentes medio muertos

Llego a la puerta principal, la abro y salgo menos mal que siempre traigo un poco de dinero debajo de la suelas de mi zapato, extraño lo se pero muy eficiente siempre me saca de apuros, por que mi casa queda en el quinto coño y más allá

Salgo del patio y llegó a la vía principal, para ponerme a esperar a que pase un taxi se preguntarán ¿No es mejor llamar a uno? Pues no tengo mi celular lo deje en mi casa

La verdad el taxi no tardó mucho  en llegar, así que me monte le di la dirección y me fui a mi casa 




 

[...]




 

Dándole las gracias y pagándole baje del taxi, camine cruzando mi gran patio hasta la puerta principal, abrí con una copia que había bajo un matero y abrí

La hermosa y enorme soledad me recibió como una vieja amiga, ya que ni siquiera tenia alguien que me cocinará estoy totalmente sola, más sola que el uno

Me quito los tacones y lo dejo hay tirados, arrastrando mis pies subo las escaleras en forma de caracol hasta mi cuarto

Llego a mi habitación, abro la puerta y como si fuera la próxima vez la repaso, siempre lo hago, es como un ritual que me recuerda lo sola que estoy si, si ya se que es canso que repita siempre que estoy sola, pero es lo único que mi subconsciente me grita y repite cien veces en un segundo

Es como esa pequeña mancha que por qué la laves para que se quite no lo hace, horrible ejemplo pero así lo entiendo yo

Veo mi cama matrimonial con la mesita de noche pegada a la ventana de cortinas negras, el armario color crema al frente de mi cama, a lado de este la puerta del baño, una enorme biblioteca pegada al lado de la puerta principal de mi cuarto ya no hay más nada todo son colores neutros y oscuros

Cierro la puerta y mientras avanzo hacia la cama me desnudo, levanto las sábanas y como me trajo mi madre al mundo me acuesto a dormir

Mi barriga ruge por algo de comida pero estoy tan cansada que simplemente lo ignoro y me duermo, pero sin poder evitarlo las lágrimas ruedan por mis mejillas

Cierro con fuerza mis ojos negando los recuerdos que llegan a mi cabeza, ignorando esas voces que me dicen que no valgo nada, que me dicen que mi existencia es una maldita miseria que ni siquiera mis padres me quieren solo soy un estorbo

El silencio y la soledad solo hace que se escuchen con más fuerza convenciéndome de que tienen razón


 

Ethan

— ¡Joder Ethan Miller despierta! — escucho la voz de mi mejor amigo Luis entrando de un portazo, me remuevo en la cama — ¡Ah no! ¡Arriba! — abre las cortinas de par en par haciendo que mi cabeza duela

— ¡Coño Luis! — grito cuando quita la sabana mis manos van instintivamente hacia mis partes — por qué si Recuerdo más o menos todo lo que pasó anoche — el me mira con diversión




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