★ Bajo tus estrellas ★
★ Capítulo 2★
CHARLOTTE
Después de pensar de nuevo en todas esas cosas, miro una vez más por la ventana y ya no está. Suelto un suspiro que no sabía que estaba retenido, pero el alivio es perceptible.
Bajé las escaleras para tomar mi desayuno, como de costumbre, saludé a mi mamá quién estaba con una taza de café en su mano y en la otra sosteniendo su celular.
Antes de ir a trabajar y de dormirse, ella ocupa su celular. Son los tiempos que le quedan libre para estar en él.
Ella es la administradora y gerente, de la empresa donde mi padre trabaja. Y él es el dueño y líder de la empresa. Mi mamá es la mano derecha de mi papá, así ha sido desde hace mucho tiempo.
—Hola mamá. Buenos días —la saludé con una sonrisa de boca cerrada para luego abrazarla por detrás. Ella deja un momento su celular y su taza de café para decirme:
—¿Qué tal amaneciste? -Me pregunta mientras yo me dirijo a tomar mi desayuno: tostadas con Nutella.
Generalmente cuando no quiero preparar el desayuno por las mañanas, hago eso. Mientras coloco sobre la tostada la Nutella, le contesté a mi madre:
—Bien mamá, hasta ahora todo está bien.
—Espero que te diviertas hoy. No te preocupes por la hora, simplemente diviértete. Georgina estará en casa esperándote, nosotros estaremos en un hotel por una conferencia de trabajo pero regresaremos dentro de 3 días. ¿Si lo entiendes cierto?
—Sí mamá, no te preocupes estaré aquí esperándolos. —Le aseguré. Déjenme aclararles 3 cosas.
Uno: los puestos de su trabajo requerían mucho esfuerzo por lo que tienen que asistir a conferencias o reuniones en otros lugares y para no manejar mucho en ciertos casos se quedan en un hotel, estoy bien con eso a pesar de su trabajo ellos están para mí y me dan mi espacio y eso está bien.
Ahora bien, dos, hoy asistiré una fiesta pero creo que no será como cualquiera, la fiesta es para celebrar El día del Amor y la amistad y una de las chicas de mi clase realizará hoy en su casa una fiesta.
Por supuesto, este año es el último antes de entrar a la Universidad y las fiestas son lo de este año.
Sé que no será una fiesta cualquiera: Será a las 8 de la noche, la casa por lo que oí tiene una piscina, las bebidas estoy segura de que será con alcohol y otras cosas a las que no he tomado nunca.
Pero lo mejor, no tendré que preocuparme de la hora a llegar casa, según dijo mamá, Georgina me estará esperando. Ella es la chica que ayuda con el aseo. Es muy linda persona, y aunque ya tiene sus años sigue siendo muy bonita. Ella ha sido como una hermana mayor para mí, está desde que era una adolescente.
Una voz me saca de mi trance:
—Señorita Charlotte, ya es tarde para asistir a clases. Debe irse ya. —Dice con una sonrisa de boca cerrada. Yo asentí y tomé mis tostadas con Nutella y le doy un tierno abrazo.
Últimamente la he visto más callada, más fría, bueno ella ha sido así desde que comenzó a trabajar pero cada vez aumenta más. Yo por mi lado quiero hacerle entender que estoy para ella cuando lo necesite.
—Ya te he dicho que no me llames señorita, me siento rara. —Le digo en un susurro, la dejé y me dirijo a la puerta. Mi celular comienza a vibrar en mi bolsillo, lo saqué de este y observé la pantalla:
Alejandra, llamando
Ella es mi mejor amiga. Tomé la llamada y ella habló:
—¿Hola? ¿Quién habla? -Le digo bromeando
—Muy chistosita linda amiga, seré breve, nos saludamos después pero...
—Yo también te quiero —le digo fingiendo que me dolió que no me haya saludado bonito en el día de San Valentín. Cerré la puerta de la casa y con el celular en mi oreja comienzo a dirigirme a la acera, caminando en dirección al Instituto.
No tardo mucho en llegar cuando camino.
—Ven rápido.
—¿Ya empezaron las clases? —Pregunté preocupada mientras acelero mi paso.
—¡¿Qué?! ¡¿NO?! —disminuyo la velocidad de mi paso, al sentir alivio—, hay algo que tienes que ver en tu casillero.
—¿Qué cosa es? —pregunté con curiosidad.
—Si te lo digo, arruinaría tus expectativas —reí por lo bajo—, así que ven rápido, adiós —cuando esta por colgar dice rápido: —Feliz 14 de febrero, amiga.
Y con eso cuelga.
Oh, vaya.
Guardé mi celular en mi bolsillo y me detengo cuando observé un vehículo negro, a unos pasos de mí.
Lo he visto muchas veces antes, meterse y bajarse del auto. ¿Por qué ahora es diferente?
El vehículo comienza a avanzar, lentamente, acercándose a mí. El vidrio comienza a bajarse lentamente, dejándome ver, por segunda vez en esta mañana su rostro.
Me doy un medio pellizco, para ver si esto es una pesadilla.
No, no estás soñando.
Como quisiera que sí. ¿Por qué no me fui cuándo pude?
Veo bajarse del auto y a pasos medianos lo observo acercarse lentamente a mí, yo me quedo quieta sin romper el contacto visual fijo con esos ojos café claros.
Esos cafés claros...a los que por años he admirado.
Ahora, es mi vecino. Cuando antes fue mi mejor amigo de la infancia, y luego mi primer amor. Y el primero en ser fallido.
—Joshua... —Fue lo único que logré susurrar, después de todo lo estaba viendo después de haberle sacado el tercer dedo desde mi ventana.
Nota de la autora: Voten y comenten sus partes favoritas de los capítulos. Son de mucho apoyo, no se imaginan cuánto.
Los quiero,
Ligia M.
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Editado: 27.03.2022