Hoy era el gran día, iba a bailar con Miguel, y mañana iría a cenar con el, el problema es que ahora tenía que conseguir dos vestidos, ya que había tenido que vender el vestido negro para conseguir dinero. (y según yo no podía ponerme el mismo vestido 2 veces) Así que fui a comprar.
***
Estaba esperando a que Miguel viniera a recogerme, ya que habíamos quedado en eso.
El vestido que llevaba puesto era bastante sencillo, y de color verde oscuro, revisé mi celular para ver la hora, cuando vi que llegaba Miguel.
Bajó de una limusina, lo cual me sorprendió bastante, llevaba un traje negro, y debía admitir que se veía super sexy con traje.
-Hola- dijo
-Hola- respondí con una sonrisa.
-Te ves hermosa-
Yo me sonrojé y le di las gracias.
Me abrió la puerta de atrás para que yo subiera, y después el se subió por el otro lado. El viaje fue un poco incómodo, ya que no sabíamos que decir, pero finalmente llegamos a la preparatoria.
El me abrió la puerta y bajé.
-Señorita, hemos llegado a su destino- dijo seriamente.
Yo me reí, y acto seguido el también lo hizo. Entramos al salón de baile, y estaba lleno de estudiantes.
-Voy a buscar bebidas- dije, y el asintió.
Estaba muy nerviosa, iba a bailar con el chico que me gustaba, con el que pensé que no me invitaría nunca.
Estaba regresando con las bebidas, y buscando a Miguel con la mirada, cuando lo vi bailando con alguien más, tenía el cabello negro, y enseguida supe quien era.
Elisa y Miguel bailaban demasiado cerca, y ella tenía su boca pegada al oído de Miguel. Tuve el impulso de ir hacia ellos y decirles todo lo que pensaba, pero después pensé que era mejor ignorarlo e irme a otro lado.
No iba a dejar que eso me arruinara la noche, no era para tanto que tu pareja, la persona que te había invitado a bailar estuviera con otra ¿verdad?.
Salí al patio y me bebí los dos vasos, ahí no había nadie, solo estaba yo. Estuve allí sentada sin hacer nada durante unos 10 minutos, cuando llegó Miguel.
-Te busqué por todos lados, pensé que fuiste a por bebidas, y que después bailaríamos- dijo confundido.
-Si fui a por las bebidas- dije, y le mostré los vasos vacíos.
-Pero te vi disfrutando y no quise interrumpir- dije eso y agaché la mirada.
-No es lo que piensas, ella me obligó, ya sabes como es-
Yo sonreí recordando que me había tocado bailar con la escoba.
-Tu eres la única que me interesa, solo tu Vria Habans-
Dijo eso y se acercó a mi, estaba tan cerca que podría haberlo besado, el miraba mis labios, y yo miraba los suyos, sentía que mi respiración se agitaba, en cuanto rozó sus labios con los míos escuchamos unas voces.
-Creo que interrumpimos algo-
Nos separamos apresurada mente, y vimos a Adelia y a David tomados de la mano.
-Y creo que ustedes venían aquí a hacer otra cosa que hablar- dijo Miguel
Ellos rieron.
-Nos descubriste amigo- dijo David.
-Creo que es mejor que nos vayamos- susurró Miguel en mi oído, a lo que yo asentí, y lo tomé de la mano, a lo que el se tensó, pero después pude sentir que se relajaba y sonreía.