«50 palabras plasmada en papel, 50 inseguridades en su ser y 50 veces que la tinta tocó el papel»
Alice se encuentra al pie de la chimenea teniendo entre sus delicadas y pequeñas manos el cuaderno donde inicialmente había creado a Josh antes de publicarlo en wattpad, su corazón llora de decepción por no haber superado a las demás escritores, por no poder lograr pasar este obtaculo.
¿Que es lo que uno quiere cuando inicia su primera historia en esa aplicación naranja? Simplemente que sus palabras llenas de amor, sentimientos y una trama original sea popular entre los lectores sin embargo hemos llegado al punto que la originalidad no es digna si no cae en lo típico, ¿Jefe por secretaria? ¿Nerd y el popular? ¿Mafiosos? ¿Boxeadores? ¿Sumisas? Hay por montones y siempre tienen mas popularidad que otras.
Hemos llegado a tal punto que cuando mencionamos Wattpad a un desconocido es capaz de burlarse por que los libros que se han publicados no son para nada educativos e incluso algo dignó de ser leido ¿Hasta a donde a llegado la juventud? La inocencia se ha ido dandole paso a la lujuria.... Y por esas razones mas que suficiente es lo que enoja a Alice, el hecho que a las historias como de ella no le dan oportunidad.
Finalmente con la poca agallas que le queda a Alice decide tirar su cuaderno a las enojadas llamas de fuego que reclaman por avivarlas con historias fracasadas, dandole un ultimo adiós al personaje que había creado en noches de insomnio con sudor y lagrimas.
—Adiós vaquero—Recita con pena sin antes de darse la vuelta dispuesta a olvidar todo lo acontecido.
El timbre de su pequeña casa suena retumbando entre las paredes color blanco, anunciándole frenéticamente la presencia de alguien al pie de su puerta ¿Sera sara? Pregunta con duda ¿o solo sera el cartero?.
Para su buena conveniencia es su amiga, la amiga que solo vive leyendo fanfics y mucho lemon, quien no ha puesto esperanza alguna al libro de Alice que suda agua bendita sin provocar algun pecado a sus lectores.
—¡Alice!—Chilla su amiga al verla que esta abre la puerta—a que no sabes.
—¿Saber que sara?—pregunta con pereza alejandose de la entrada de su hogar caminando hacia la sala donde se encuentra la cocina y comedor.
—El libro de xoxoloveer, mis fantasías con mi jefe ¡Sera publicado!
—¡Que alegré!—dice con sarcasmo, sin ánimos a seguir la charla—¿Eso es lo que me tenías que decir? Porque estoy muy ocupada con... —Sus palabras quedaron al aire al ver su laptop con la pantalla quebrada y su cuaderno quemado tan solo por unos centímetros en la delicada mesa de roble.
—¿Que sucede?—Pregunta su amiga al ver que esta se calla completamente—¡¿Que es lo que le sucedio a tu laptop y cuaderno?!
—Yo... —Traga saliva sin poder pronunciar una palabra por la impresión—Yo había dejado mi cuaderno arder en la chimenea y mi laptop en mi oficina...
—¿Estas segura?
—Muy segura—Confirma acercandose a la mesa para poder agarrar tales objetos que lo llevara a la basura—Los llevare a la basura.
Agarra entre sus brazos su laptop y libro dispuesta a botarlos pero antes de incluso dar una media vuelta un brazo la detiene.
—¿Por que lo harás?
Alice junto con sara levantan la vista de la mano que sostiene con delicadeza él brazo de la escritora al hacerlo se encuentra con un chico peculiarmente parecido a alguien que ya conocen.
—¿Por que lo harás?—Vuelve a preguntar el chico con firmeza.
—¿J... Josh?—Pregunta con un temor palpable al mencionar su nombre.
—Alice, no se por que este chico se parece a tu personaje.
—Es por que el es mi personaje—Habla con un hilo de voz, otra sorpresa mas y seguro se desmaya—¿Eres Josh?
—¿Josh Cooper, el detective de jardines de romance y misterio, al quien querías borrar y maldijiste el dia de ayer?—Pregunta retirando su mano del brazo de su creadora—Si, ese soy yo y he venido a salvar tu pasión.