------Narrador------
Jia sin rodeos le expresa brevemente a Alam sobre la situación en la que se encuentra su padre, las palabras de ella son como un puñal para su corazón así que él al escucharla se aleja de ambas para que no lo vean llorar.
—Tranquilo, ya viene una ambulancia en camino. —Habla Heydar, con la mano en el hombro de su amigo la cual aprieta dándole su apoyo.
—Debo ir a verlo. —Murmura Alam limpiando sus lágrimas.
—Él está por aquí, sígueme. —Dice Heydar mientras dirige a su amigo al lugar donde se encuentra su padre.
Al ir avanzando hacia la bodega Alam observa algunos cuerpos muertos, él ruega en su interior que ninguno de esto sea de su padre, los policías están en el lugar esposando a los delincuentes que quedaron con vida, estos están siendo llevados hacia las patrullas, Alam busca a su padre con la mirada, a lo lejos lo encuentra y su corazón se rompe en pedazos al verlo tirado en el suelo lleno de sangre, él corre a donde su progenitor el cual se encuentra acostado a los pies de Jamir.
—Alam, él te ha estado llamando. —Dice en voz baja Jamir.
—Padre ya estoy aquí, tú vas a sobrevivir, aguanta un poco más. —Alam se arrodilla y acaricia el cabello blanco de Sunam Admadi.
—Alam, ¿eres tú?, ¡hijo mío!, perdóname, por haber sido un mal padre. —Comenta con esfuerzo el anciano.
—No hables por favor. —Susurra Alam con la voz quebrada.
—Dime, que me perdonas, no puedo irme, sin antes recibir tu perdón. —Admadi escupe mucha sangre y respira con mucha dificultad.
—Padre, yo te perdono, mi madre también te perdona, te amo padre. —Sunam Admadi levanta su mano, Alam la toma y la lleva a su rostro.
—Hijo, te amo. —Admadi cierra sus ojos y su mano pierde la fuerza como su cuerpo pierde la vida. Alam llora a su lado, Jazmín le había dado su espacio para que hablara con su padre, pero al verlo tan mal llega y se arrodilla a su lado, ella también llora la muerte de su suegro y no deja de darle gracias por haberla ayudado.
—Jazmín, hija debemos irnos, tú debes comer y descansar por el bien de mi nieto.
—Si madre, —Jazmín limpia su rostro, luego se levanta con la ayuda de Heydar, él la abraza, y luego Adel se acerca al lugar corriendo y se lanza sobre Jazmín muy feliz de volverla a ver.
—Te extrañé mucho, perdóname por haber estado alejado de ti. —Le dice el joven.
—Gracias por todo, yo sé que ustedes estuvieron cuidando de mí en todo este tiempo, mil gracias. —Ella le acaricia su cabeza y le sonríe.
—¿Por qué lloran?
—No es nada, vamos salgamos de aquí, —le dice Jazmín mientras voltea tomada de Adel hacia la salida.
—Espérenme, ¡Jazmín!, Isabella también nos ayudó, así que no seas tan duro con ella. —Le dice Heydar a Jazmín mirándola con cariño.
—Lo prometo— le responde ella a Heydar, pero la vista se le empieza a oscurecer y su cuerpo se desvanece en un instante.
—¡Jazmín!, ¡Jazmín!, ¿qué le sucede? —Jia se acerca a donde su hija la cual se encuentra recostada en unos grandes brazos, ella le toma el pulso.
—-Tranquilo Adel, ella está bien. Salgamos de este lugar, Alam, ¿en qué momento llegaste a los brazos de mi hija?, dámela, yo puedo con ella.
—Madre celosa, Jazmín pesa mucho, deja que Alam la cargue. —Habla Heydar acercándose preocupado más a Jazmín.
—Bueno, está bien, vámonos, ya llegó la ambulancia, llévala inmediatamente para que le hagan un chequeo médico.
—Sí señora, como ordene. —Dice Alam con respeto hacia su suegra—, Jamir puedes encargarte de mi padre, por favor.
—Claro que si Alam, no te preocupes, yo lo acompaño a la morgue.
—¡A la morgue! ¿Qué le pasó al señor Admadi?
—Más tarde te lo explico, —Le contesta Alam a Adel—. Muchas gracias, —agrega él a Jamir, con la mirada nublada por las lágrimas Alam le da un último adiós a su padre, luego camina con Jazmín en sus brazos fuera de la bodega. Adel a pesar de ser tan inocente se da cuenta rápidamente de lo sucedido con el padre de Alam, así que no hace más preguntas.
—Me gusta que obedezcan mis órdenes de inmediato. —Dice Jia en voz alta tratando de suavizar el ambiente. Adel está apegado a Alam muy atento a cualquier movimiento de Jazmín.
—Pobrecito Alam, no me gustaría estar en sus zapatos. —Manifiesta Heydar con burla.
—¿Qué quieres decir con eso Heydar? —Pregunta Jia acercándose más al joven.
—¡Suegra tóxica! —Jia al escucharlo le da un golpe en la cabeza, todos se ríen.
Alam sonríe, sin embargo su corazón está dividido entre la tristeza de la muerte de su padre y la felicidad de haber encontrado al amor de su vida, aunque también está asustado con la idea de ser padre, siempre soñó con tener una familia ahora él no sabe si será el mejor padre y desea con todas sus fuerzas ser diferente a la persona que lo trajo al mundo, que aun a pesar de no estar con él y de no haberlo criado él lo ama y en su corazón no guarda resentimiento, solo desea que descanse en paz.
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-------Un día antes-------
Llamada telefónica
—Jun, esta noticia me molesta y me alegra la vida, ¡mi hija está viva!, pero dime ¿cómo carajos no me lo dijiste antes?
—¡Oliver, cálmate!, debes venir y ver con tus propios ojos porque no te lo dije.
—Ahora dime¿cuál es la mala noticia?
—En estos momentos Jazmín está secuestrada.
—¿Secuestrada?, ¡Dios mío, ayúdanos! No entiendo ¿Quién puede estar haciendo todo esto?, déjame investigar y cuando llegue a China te llamo, mándame la ubicación de donde tú estás y muchas gracias por todo.
—Oliver tú eres su padre y a pesar de que has cometido muchos errores, tú tienes derecho en saber lo que sucede con tu hija.
—Gracias, no tenías porque decirme nada acerca de Jazmín, prometo recompensarte, yo vivía un infierno a causa de la desaparición de mi niña y tu hoy me has regalado una pequeña luz en medio de la oscuridad, ahora gracias a ti lo sé todo acerca de ella, si tienes más información solo llámame, prometo estar lo más pronto en China, te juro que voy a investigar quien le está causando esté mal a mi hija y la va a pagar muy caro.
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lucha por sobrevivir, infancia dificil, conoceras el verdadero amor.
Editado: 31.10.2024