Camila

CAPITULO 13

CAMILA

Ya ha pasado un mes desde que salí por primera a Emanuel y realmente no me arrepiento de haber salido con él, desde aquel día salimos todos los días en las noches después de terminar su trabajo en el restaurante. Durante todo este tiempo juntos no me presionado u insinuado tener sexo con él, normalmente solo nos tomamos de las manos y nos damos besos realmente hoy en día no sé qué somos lo único que se s que cada vez que estoy con él me siento bien y protegida.

Todos los días tengo la necesidad de verlo y hablarle para saber cómo está su día, pero a pesar de sentirme así de bien, hay veces en que un miedo me atrapa al saber que tengo estos sentimientos hacia él, a veces pienso que él no siente lo mismo, pero cuando estoy con él y nos vemos a los ojos siento que solo él y yo estamos en este universo.

-¿entonces es cierto?_llega a mi Raul asustatadome un poco

- ¿De qué me hablas? _ le pregunto confundida

- De lo enamorada que estas_ se sienta enfrente de mí_ y por lo que veo lo estas y eso me hace muy feliz

-realmente no sé si lo estoy, pero cada vez que estoy con el me siento bastante bien

- Cami yo realmente no lo conozco, pero mientras tenga buenas intenciones y te trate bien tiene toda mi confianza

- Creme que lo hace

- eso es lo único que quería oír

- pero dime, solo has venido por chismoso o por algo mas

-en realidad vine por el chisme, pero de paso vine a dejarte el borrador del nuevo contrato de los empleados

-gracias 

-es un placer, revisalo y me dices si algo no te parece o quieres agregar mas clausulas 

-perfecto, los reviso y te aviso cualquier cosa 

-okey_ se levnta de la silla y se acomoda su traje_ ahora me voy que tengo unos clientes que atender te veo luego 

-suerte 

Camino hacía el y le doy un fuerte abrazo para después irse y dejándome viendo los contratos.

Raul a parte de ser uno de mis mejores amigos es mi hermano al igual que Sergio, Rosario y Tania, nos conocimos cuando todos teníamos trece años y desde entonces se volvieron mi familia, esa que no encontraba en mi casa. 

Cada uno de ellos me cuidan y los cuido, siempre se fugaron en mi y no en mi apellido o clase social que tengo, se que ellos me quieren tal y como soy y yo los quiero de igual manera. 

Mi día de trabajo termino y era momento de estar con Emanuel, realmente siempre esperaba esta hora del día, normalmente nos vemos en su departamento. 

Salgo de la agencia y voy directo al restaurante para recogerlo, creo que el único que sabe de esta relación es el señor Manuel, al cual le he pedido que no le diga a nadie de la casa.

Cuando llegó al restaurante veo que Emanuel ya ha terminado y está esperándome, cuando nos ve camina hacia la camioneta y entra 

-hola princesa_ me saluda con un beso en los labios 

-hola_ lo saludo con una pequeña sonrisa 

-Manuel, que tal está_ saluda a Manuel 

-muy bien, ¿Y usted?

-cansado pero bien 

-¿Los llevo a él departamento?_ pregunta Manuel 

-por favor_ contestamos ambos. 

Durante el camino no decimos nada, solo nos tomamos de la mano y nos recargamos uno en el otro, relamente había extrañado estar con el durante todo el día, estar a su lado me siento segura. 

Al llegar a él edificio del departamento, le digo a Manuel que regresé a casa ya que Emanuele irá a dejar a la casa, al subir y entrar dejamos nuestras cosas en la entrada. 

-te prepararé de cenar princesa_ dice emanuel con una sonrisa 

-me parece perfecto cariños, si quieres yo te ayudo 

-no princesita, tus dotes culinarios no soy muy agradables 

-esta bien, si quieres en lo que tú preparas lago yo acomodo la mesa 

-eso está mejor linda 

El se va a la cosina y yo al comedor para acomodar la mesa de una manera linda, antes solía pensar que cocinaba bastante bien ya que Laura me había enseñado pero tal parece que me han mentido, ya que Emanuel que es un experto me ha dicho que mi sansón no es del todo bueno.

Rapidente la cena ya estaba lista, Emanuel decidido preparar un salmón el cual estuvo deliciosos, durante la cena platicamos un poco de nuestro día, relamente lo único que quiero es que el se sienta relajado ya que su trabajo es muy estresante. 

Una vez terminada la cena me puso a recoger los platos y ayudarle a lavar los platos ya que el me ha hecho la cena. 

-Sabes que te extrañe mucho verdad_ Emanuel me abraza por atrás cuando termino de lavar los platos 

-yo tambien_  digo mientras me aferró a él 

-eres alguien especial para mí_ dice besándome el cuello 

-tu te has convertido en alguien importante y vital en mi vida_ me doy la vuelta para verlo y besarlo 

-te deseo_ dice entre mis labios 

-yo tbien te deseo 

Lo beso con amor e intencidad, el me toma de la cintura y me encamina a su recamara, al llegar a ella nos sepamos y veo sus labios inchasos y despeinado. 

-te voy a ser tocar el cielo princesita_ me promete para después besarme de nuevo 

Con sus manos recorre todo mi cuerpo y este responde a sus carísias, ambos nos quitamos nuestras ropa dejándonos en ropa interior. 

Emanuel me acuerda sobre la cama mientras besa y masaje mis senos, yo por mi parte masajeo su pene sobre su ropa, lo único que se logra escuchar en aquella habitación son los gemidos que ambos tenemos. 

-eres una perfección_ Emanuel me mira a los ojos mientras me dice aquello 

Siento como sus manos hacen a un lado mis bragas y sus dedos entran en mi terior regalando me una sensación increíble, los mueve de adentro hacia arriba sacándome gemidos. 

-te necesito en mi Emanuel_ digo en forma de súplica. 

-lo que pida mi princesa 

Se separa un poco de mi para quitarse su ropa interior, para así liberar a su creciente erección, yo por mi parte me quito las bragas y el sostén para volver a ponerme en posición y abrir un poco mis piernas para así invitarlo a entrar en mi. 



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En el texto hay: pasado, familia, romance

Editado: 03.04.2024

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