Casada Con Mi Jefe. Saga: New York City N° 1

Capítulo 10

No puede ser.

El beso que me dio Alexander ayer afuera de la guardería es hoy la portada de la sección de sociedades del The New York Times.

"¿Nuestro mujeriego reformado?".

Ese era el pie de la foto, en ella se ve a Alexander tomándome de la cintura y besándonos  junto al auto, pero lo peor es el artículo.

"El día de hoy, la ciudad de New York se levantó con el rumor confirmado del compromiso del presidente de Publicity Harrison y una de sus empleadas, la diseñadora Paige Evans.

Según declaraciones de fuentes cercanas al empresario, la relación ya lleva cierto tiempo y su boda se planea para este próximo sábado, donde las revistas Vanity y Sociedades serán las encargadas de cubrir el evento, el cual se realizara en la mansión Harrison y está siendo coordinada por la conocida organizadora Edith Baxter.

Pero hay unas preguntas en toda esta historia de cenicienta, según nuestros informantes la relación ya lleva un aproximado de siete meses, pero en estos meses anteriores a nuestro amado mujeriego se le ha visto seguir con sus viejas costumbre.

Hace un poco más de tres meses fue fotografiado junto a la modelo americana, Alisson Keller en la gala Decor, con la cual había fuertes rumores sobre una relación ya establecida. Y ahora con la aparición de la señorita Evans en la vida del empresario, la pregunta de todos es ¿Que pasara con la señorita Keller?

Ni señorita Evans ni Alexander Ambrosetti, han dado declaraciones sobre su relación y todas las demás preguntas. Nuestros reporteros han logrado conseguir la respuesta a una de ellas, tal parece que la señorita Evans convive de maravilla con los mejores amigos de nuestro tirano.

El día de ayer, durante el almuerzo, fueron captados en el restaurante El Grazie, junto con los empresarios, Nicolás Dolce e Ehan Hilton. La reunión parecía ser de índole social, y como todos saben, los empresarios poseen una amistad de varios años.

A pesar de la linda historia, toda la ciudad se pregunta. ¿Por qué la velocidad con la boda? ¿Estará la señorita Evans esperando al futuro heredero del imperio Harrison—Ambrosetti?

Ahora debemos esperar la boda más comentada de este año, y con ella determinar si la señorita Evans estará a la altura del dueño del imperio Harrison. No cualquier mujer podría cazar a Alexander Ambrosetti"

Para terminar el artículo había una foto del almuerzo en la cual se nos ve riendo a todos. Deje el periódico sobre el escritorio y me cubrí la cara con las manos.

¿Enserio está escrito en el diario que todos dudan que este a la altura de Alexander?  De eso estaba muy consiente pero no era necesario que todo el país se enterara.

Esto es demasiado para procesar en poco tiempo; estoy segura que me convertiré en la cornuda de la sociedad. Puedo imaginar los titulares. “Pueblerina es engañada por Magnate” o tal vez uno más amarillista “el multimillonario engaña a su empleada”

Mis padres tenían razón… ¡soy un fracaso completo! Si algo de esa farsa salía a la luz, ella perdería a Mely para siempre. Era un fracaso.

Meditando sobre su desdicha, recordó la llamada con su hermano el día anterior donde prácticamente trataba de convencerla de invitar a sus padres ya que él está reacio a no decirles.

—Paige a pesar de lo que ha pasado ellos merecen estar el día de tu boda— Refuto tratando de convencerme.

—Lo sé. Pero ellos no me hablan Jason, y si tú les dices, mamá sabrá que la has desobedecido— le dije tratando de convencerlo pero sabía que era un  argumento débil.

—Eso no importa, eres su hija y ellos merecen estar ahí.

—Si lo merecen, pero no lo desean; si no ¿Por qué no contestan alguno de mis mensajes? ¿A caso no les interesa saber cómo estoy? Si tan poco les importo dudó que les duela perderse mi boda.

—Escucha me Paige, sé que no es el mejor momento pero yo puedo alegar a tu favor, aunque mamá no lo exprese sé que te extraña... papá se arrepiente de muchas cosas pero sabes que su orgullo…

—Jason, Por favor no quiero discutir, eres el único que quiero en mi boda. Has sido el único que no me ha dado la espalda y quiero que seas tú el que me entregue— dije esto último en voz baja.

— ¡Oh! Enana, para mí sería un honor— exclamo conmovido— pero… me preocupa estar usurpando el lugar de papa— me dijo con la vos teñida de preocupación.

—Lo se Jason, pero él dejo la elección en mis manos. En el momento que cruce esa puerta… yo deje de ser su hija y así como ellos se olvidaron de mi yo tengo que seguir adelante, no puedo quedarme estancada esperando por el día en que mis padres se preocupen por mí.

Jason se quedó un momento en silencio analizando mis palabras.

—Está bien Paige, iré…

—¡Si! ¡Gracias, gracias, gracias…!— lo interrumpí.

—Pero tengo un par de dudas  ¿La boda será por el civil o por la iglesia?

—Solo por el civil, será una boda sencilla— hizo una mueca al darse cuenta de la mentira que estaba diciendo— así que no tienes por qué preocuparte.



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En el texto hay: matrimonio, romance, amor

Editado: 10.01.2020

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