17 | No...

Grace

Ya habiamos regresado a Nueva York a nuestra casa y ahora estabamos en camino a recoger las armas que Damian le habia hecho a su amigo Mathew. Seon nos dijo que estaría vigilando desde allá y buscando información sobre Ivannov, tenia a mucha gente trabajando para ella y los mando a varios paises a buscarlo, mientras tanto nosotros estabamos llegando a la residencia Golder.

Era similar a la de Damián, una mansión, reja grande color negra custodiada por guardias, una fuente en el centro y amplio espacio con arbustos perfectamente cortados y jardineros regandolos.

Bajamos y un guardia nos adentro a la casa, al llegar a la sala vi a un pequeño de 3 años jugando con sus carritos y haciendo un ejercito con sus soldados.

Tan pequeños pero sus estrategias para jugar a las guerras son increibles.

El niño nos miro y me observo con los ojos muy abiertos, estaba sorprendido al verme.

-Tio, ¿quien es ella?- me observo desde abajo mientras con su mano tenia un carrito

-Ella es tu tia Grace, Liam- mire a Damian sorprendida y el niño me abrazo una pierna, baje la mirada y tenia un hermosa sonrisa y sus ojitos brillantes

-Liam, deja a Grace tranquila hijo- habló el que supongo que es Mathew -Perdón por eso, soy Mathew, el amigo de tu prometido- me saludo con un apretón de manos y tomamos asiento

El pequeño se quedo con su padre y le preguntaba que estaba haciendo aqui, si fuera pequeña yo haría lo mismo

-Están aqui para hablar de un encargo campeón-

-¿Y puede ir a jugar conmigo?-

-No puede moverse tanto- dijo Damián, haciendo que tanto el padre como el hijo fruncieran el ceño

-¿Porque?- pregunto el pequeño

-Porque tiene a tu primito aqui- acaricio mi vientre y Mathew sonrio sorprendido

-Enhorabuena- dijo -cuando quieran pueden preguntarnos a mi y a mi mujer sus dudas-

-¿Pero donde esta el bebé, papá?-

-En su vientre hijo- el pequeño se acerco y puso su manita en mi estómago y se quedo asi unos segundos hasta que habló -Hola bebé, soy tu primo Liam, ¿quieres jugar conmigo?- procedio a subirse en el sillón y poner su oreja en mi vientre para ver si decia algo, lo unico que podiamos hacer era reir.

-Aún esta muy pequeño y no puede hablar por el momento- le dije a Liam -pero cuando nazca serás el primero en conocerlo- asintió y me tomo de la mano hacia una habitación que era de juegos y tenia una pantalla para ver peliculas, los chicos se quedaron hablando de negocios hasta que el cerro la puerta

-¿Quieres ver una pelicula conmigo tia?-

-Claro corazón-

Le ayude a poner una pues no sabia como se manejaban los controles remoto, pusimos Aladdin en versión live action y nos sentamos en un sofá que estaba ahi, al final de la pelicula alguien abrió la puerta, era una mujer de ojos oscuros, cabello castaño y tez aperlada.

-Mamá- el pequeño salto de felicidad al verla y le dio un abrazo que ella no dudo en corresponder

-Hola cariño, tu papá me dijo que estabas aqui con tu tía- me observo y se dirigio a mi con el pequeño agarrando su mano

-Hola, soy Grace Lilhwood- salude cortesmente

-Mucho gusto, soy Samantha Golder- respondió de la misma forma -por cierto, felicidades por tu embarazo, me lo acaba de decir Damian, si necesitas ayuda puedes decirme- asenti y el pequeño queria que vieramos otra pelicula, asentimos pero Samantha se ofrecio a que fueramos por palomitas y seguir viendo una pelicula, al regresar el quiso ver El rey león, igual en live action, y el se fue al suelo a ver más de cerca la pelicula mientras nosotras estabamos en el sofa platicando para conocernos un poco mejor.

Me parecio una chica agradable, tiene estudios de fotografias y le va muy bien, trabaja desde casa y solo va si es necesario, no sale de casa frecuentemente como antes por el accidente que tuvo y la entiendo, es dificil y más si todavía tienes un hijo.

De repente acabo la pelicula y el pequeño se encontraba dormido con su bracito apoyando su cabeza, ella lo llevo a el sofa y le puso una almohada que estaba en uno de los sillones individuales, nos fuimos al patio trasero y seguimos platicando tranquilamente mientras nuestras parejas hablaban del trato de las armas.

Me dijo sobre como manejarlas y que hacer en casos de emergencia, me dijo que cuando lo conoció tampoco tenia idea de como hacer esto, hasta que poco a poco se iba enseñando y fue como pan comido.

Su ama de llaves nos llamo y ella estaba unos pasos más adelante que yo, nos fuimos en silencio hasta que senti que alguien me sujeto fuerte de la cintura

-Ahh- grite alarmada y Samantha volteo y saco una pistola que traia atras de su espalda, Mathew y Damian no tardaron en aparecer y ellos estaban sorprendidos a la vez que enojados, iba a alejarme hasta que senti un arma en mi cabeza, solo me quede quita y aterrorizada

-Sueltala- grito Damián muy cabreado

-Baja el arma o ella lo paga- escuchamos una voz proveniente del otro lado del patio y ahi estaba el.

Eduardo Ivannov.

Todos estabamos con los ojos muy abiertos y varios guardias habian llegado pero Mathew les dijo que se detuvieran.

-Intenten dar un paso y ella pasará a mejor vida- se acerco y tomo mi menton con aires de grandeza -vaya, vaya, vaya, si que tienes buen gusto Damiansito-

-Dejala en paz- se iba a acercar pero entre Mathew y Samantha lo retenian para que no diera un paso

-¿Tanto enojo haces por tu mujer? Ya veremos si que haces cuando la vuelvas a ver, ¡Ahora!- el tipo que me tenia me llevo hacia atrás mientras que otros se colaban y apuntaban hacia Damian y los Golder. Forcejé para salir pero me pusieron un trapo en la boca y me movia más rápido pero estaba cayendo inconsciente rápidamente, lo último que pude ver fue a Damián gritando histérico e intentando correr hacia mi pero los Golder seguían agarrandolo pues no querian que me pasara algo ni a mi bebé.