{ U N I C O }

"Castigo."
 

Despertó muy asustada ya que a solo unos metros de ella se lograban escuchar unos gritos y disparos, la chica no sabía que pensar. No recordaba nada, no sabia si los gritos eran de ella. O, ¿Era ella la autora de los disparos?
No podía ver nada, pero lo único que pudo hacer fue caminar unos pasos, alejándose cada vez mas de aquellos gritos. Camino unos pasos mas y ya no escucho nada, solo unos murmullos incomprensibles. Al no entender nada de lo que estaba pasando, corrió con la intención de salir de ese lugar. No llego muy lejos, solo se escuchaban los murmullos, donde cada vez que se acercaba se lograban entender mas. Camino un poco mas e intento oír lo que aquellas voces decían. Como seguía sin entender nada les grito, les pidió ayuda. No entendía, ¿Que estaba pasando? ¿Quienes eran estas personas? ¿Quien era ella?.

Camino otros minutos, hasta llegar a un lugar donde solo había una luz tenue. 
Aun asustada camino viendo a sus alrededores, no vio nada que la ayudara a entender lo que estaba pasando. Regreso su vista hacia el frente, no se veía grande, pero era una luz hasta el fondo, una muy brillante. Como única esperanza corrió hacia ella. 
Cuanto mas se acercaba la luz se hacia mas grande, hasta hacerse notar otras luces de otros colores, como formando una foto.
Aun con todo lo que había corrido, no se había cansado. Solo necesitaba llegar a ese lugar, quiera irse de ese lugar, quería saber quien era, ¡Quería escapar!.
Corrió hasta quedar a un par de metros. Y lo que vio hizo que se le helara la sangre; era ella en cada uno de aquellos recuadros brillantes. Era ella viviendo cada momento; era ella con sus padres; era ella cuando se graduó; era ella con su novio; eran ellos cuando robaron su primer banco; eran ellos cuando causaron un tiroteo; era ella cuando murió.
Con todo lo anterior logro recordar quien era, pero fue tanta información que cayo desmayada. Sintió como si cayera en un agujero negro, uno muy profundo.

Pasaron unos minutos y abrió los ojos. No tardó mucho en darse cuenta de que era un campo soleado, unas nubes perfectas se posaban ahí. 
Se puso de pie. Aunque quería disfrutar de este lugar, quería saber dónde esta el, el hombre que ama. Quería disfrutar, si. Pero quiera hacerlo con el.
Camino unos metros buscando, sin éxito. Un poco mas asustada grito su nombre, una y otra vez, hasta quedar sin voz. Cuando pensó que ya no tenia sentido seguir buscando, una voz muy conocida llego a sus oídos.

-¡Amor, por aquí!.

Siguió la voz hasta encontrarla. Era el. El amor de su vida, parado a unos metros de ella.
Cada vez que ella se acercaba, el cielo se hacía mas obscuro, como si viniera una tormenta.

-Cariño. Pense que no te encontraría nunca.

Cuando apenas iba a tocar su bello rostro, se desvaneció.

-¿Que ocurre? ¡Dime que esta pasando!.

Intento aferrarse a el, pero era tarde. Ya no había un "El".

La chica no sabia que hacer, dio algunas vueltas asustada, para ver si había otra persona que le pudiera ayudar.

-¡Sígueme, bebé!

Escuchaba su voz, pero no lo veía por ningún lado. Solo se sentía una ventisca fuerte, que venia acompañada por algunos empalagos.

No sabia que estaba pasando, necesitaba respuestas, ¡Lo necesitaba a el!.

¿Por qué se desvaneció? ¿Era acaso algún tipo de castigo? ¿Su castigo por todo lo que había hecho? ¿Su castigo era no estar con el?
¡Quería estar con el!
Estaba muy cansada, pero ella no paraba de llorar donde antes estaba "El".
No logro aguantar nada mas y se durmió, rezando para que fuera solo una pesadilla.

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Despertó muy asustada ya que a solo unos metros de ella se lograban escuchar unos gritos y disparos, la chica no sabía que pensar. No recordaba nada, no sabia si los gritos eran de ella. O, ¿Era ella la autora de los disparos?...