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A las 11 de la noche de aquel día mientras Silvia terminaba de Leer un libro sobre psicología infantil (No era para Dennys aunque por su manera tan infantil de comportarse estaba pensando seriamente en si le serviría para el) cuando sonó su móvil. Era el.

Ella suspiro un poco mientras lo tomaba en sus manos y luego tomo una actitud seria para así contestar

-¿Qué sucede?-

-Hola cariño- Esta vez su voz había cambiado, se escuchaba triste

-Hola-

-Quiero pedirte disculpas por mi actitud, no sé qué me sucedió. Yo simplemente.. No sé qué decirte, me siento muy avergonzado-

-Dennys no me gusto ese comportamiento que tomaste cuando te comente aquello, te repetí en reiteradas ocasiones que te calmaras y no me hiciste caso-

-Lo se mi amor y tienes toda la razón. Eso fue algo muy inmaduro de mi parte por favor discúlpame Silvia.. No quiero perderte por una actitud estúpida que tome Silvia de veras te amo.

Y allí estaba ese pequeño golpe en el corazón, le gustaba escucharlo decir eso. Pero a pesar de todo no podía dejar de pensar en las dudas que le habían quedado.

-También te amo..- Dijo entre una pequeña sonrisa – Pero por favor no vuelvas a comportarte de esa manera-

-Te prometo que no volverá a pasar. No volveré a hacerlo-

-Está bien querido, te creo- Dijo con una pequeña sonrisa de alivio.

-¿Mañana iremos al cumpleaños de Andrea verdad?-

-Por supuesto, no me lo perdería por nada-

-Perfecto. Mañana pasare por ti a las 4pm. Te amo-

-También te amo. Adiós – Finalizo la llamada

Aquella noche a Silvia le costó un poco conciliar el sueño. Todavía quedaban muchas dudas en su cabeza acerca de lo que había visto y la conversación con Dennys. Pero creía firmemente en aquella frase "No hay mentira que dure 100 años" así que en cualquier momento averiguaría realmente porque esas fotografías estaban en su correo.

Al día siguiente ambos asistieron al cumpleaños de Andrea, habían bastantes familiares y amigos de la organización ángeles guardianes, era bueno saber que las amistades que se habían hecho en aquel lugar se mantenían a pesar del tiempo.

Todos se sentían bastante felices de ver a Silvia y Dennys junto y no solo eso, comprometidos.

Las chicas estaban a un lado observando el hermoso anillo de diamantes que él le había dado en forma de promesa mientras los hombres estaban el parte de atrás conversando mientras terminaban de hacer la barbacoa.

Silvia se alejó un poco para tomar una gaseosa y además huir de tantas preguntas que aún no podía responder, como la fecha de la boda por ejemplo.

Estaba allí solo relajándose mientras disfrutaba de la bebida cuando repentinamente sintió la mano de alguien tocar su hombro.. Era Mauro, perteneció a su grupo en Ángeles guardianes, él era uno de los más callados de la clase. Había perdido a 2 familiares en un incendio el cual fue causado porque se quedó dormido y dejo caer un cigarrillo al suelo. Estuvo sintiéndose culpable durante mucho tiempo, tanto así que estuvo más de un año asistiendo a la organización para poder recuperarse, luego de tanto tiempo por fin había logrado progresar pero aun sentía un poco de inseguridad al conversar con otras personas. A pesar de todo ella se alegraba mucho de verlo y por los pasos que estaba dando.

-Mauro, que gusto verte- Dijo mientras le abrazaba

-También me alegra verte quería amiga- Correspondió al abrazo – Supe que vas a casarte pronto con Andrew, mis sinceras felicitaciones-

-Muchas gracias amigo- Se sintió un poco nerviosa por la palabra "Casarse pronto" - ¿Cuéntame cómo has estado?-

-he estado bastante bien, últimamente he asistido mucho a la iglesia y a terapia para poder volver a socializar con más tranquilidad, sabes que me cuesta un poco y por eso quería acercarme a ti para agradecerte, muchas gracias por darme tu amistad durante ese tempo que estuviste en la organización, gracias a ti sentí que nuevamente podría volver a hablar con alguien sin ese sentir de que me estaba juzgando por lo que sucedió con mi familia-

- Me alegro mucho de tu progreso querido amigo- Dijo sonriente mientras le colocaba la mano en el hombro – Es bueno que entiendas que no eres culpable de absolutamente nada, no somos culpables de las malas jugadas del destino

-Gracias de verdad por llegar ese día y hablar conmigo, nunca nadie se había acercado a mí. Siempre pensaban que era algo.. Ya sabes extraño..

-Me parece extraño que sentándote casi todas las semanas al lado de Dennys ni siquiera te hubiese buscando conversación, con lo sociable que es- Dijo con una pequeña sonrisa mientras le ofrecía un poco de gaseosa

-En realidad déjame felicitarte, Dennys es un hombre muy amable siempre me trato de muy buena manera, es un buen compañero, no hicimos una amistad tan fuerte como la tuya y mía y por supuesto Andrea porque apenas llego una semana antes que tú, no tuvimos mucho tiempo para hacer amistad hasta tu llegada-

-¿Una semana antes?- pregunto sorprendida, él le había dicho que tenía bastante tiempo asistiendo a la organización

-Si claro. El llevo el jueves de la semana anterior a la que tú te inscribiste- Comenzó a tomar de su gaseosa

Silvia nuevamente se sintió desilusionada y al mismo tiempo preocupado, nuevamente él le había mentido esta vez sobre el tiempo que tenía asistiendo a la organización. Realmente cada vez las cosas se estaban mirando mucho más extrañas.

Continuaron conversando hasta que llegó la hora de cortar el pastel, las luces estaban apagadas y solo se veía la luz de las velas del pastel de Andrea. Ella estaba de pie en la parte de atrás mientras la observaba abrazar a sus hijos y tomarse algunas fotografías cuando repentinamente sintió que alguien coloco sus brazos alrededor de su cintura para abrazarla eso la asusto un poco debido a que estaba bastante sumergida en sus pensamientos.