Capítulo VI: I got you

Siempre me ha gustado el espacio que tenemos Tiare y yo en nuestra habitación, es de las más espaciosas y la que tiene más ventanas, una ventana da al tocador de Tiare y otra está al frente de mi escritorio donde hago tareas y me relajo demasiado, mi tocador es más pequeño y no necesito una ventana porque mi espejo tiene luz así que tener la ventana no es muy necesario que digamos.

Es domingo por la noche por lo que empiezo mi rutina pongo el álbum lover de Taylor Swift y comienzo a quitarme el barniz color negro y me pinto las uñas color rojo, después saco mis plumones, cintas decoradas y todos los materiales para hacer mi bullet journal y organizar mi semana.

– vengo para ver si me prestas un plumón. –interrumpe Alan mis intentos de dibujos en mi bullet.

–viniste al lugar indicado, cariño–respondo y señalo un bote de platico donde tengo los plumones gruesos especiales para carteles y como los carteles no son tan usados en mi carrera se quedan para carteles de marchas.

–olvido que eres la morra de los plumones. – dice Alan viendo el montón de plumones de colores.

–Es un don– digo siguiendo con mi actividad– ¿harás una maqueta?

–no, le estoy ayudando a Roberto a hacer una lámina de las hormonas o algo así, es enorme.

–como siempre dejando todo al último.

–Como buen mexicano– dice y sale de mi habitación.

Mi rutina del domingo termina y voy a la cocina por un vaso de agua, desde la cocina observo tres cuerpos en el piso, los cuales son Ben, Alan y Robert.

–Sigo sin poder creer que te hayas olvidado de esto Rob. – comenta Jocelyn viéndolos trabajar mientras come de su cereal. – ni siquiera entiendo que es esto.

–Jocelyn llevo todo el día haciendo esto– comenta Rob sin alterarse y escribiendo a la vez. – y son rutas metabólicas.

–Las cosas que me ahorro por no ser ingeniero–comenta Jocelyn con aburrimiento–bueno, ojala acaben pronto, buenas noches.

Decido no interrumpirlos y me dirijo al baño a lavarme la cara, seguido de eso me voy a la habitación, me pongo mis cremas y me cambio de ropa y así empieza otra semana de clases más específicamente iniciando la primera semana de septiembre.

E: Buenos días, Andy.

Andy: Buenos días, profesor.

E: ¿A qué hora sales hoy?

Andy: A las 3:00 pm ¿Por qué?

E: ¿Te gustaría venir a comer a mi casa?

Andy: Depende de la comida 😜

E: La cocina no es mi fuerte, pero puedo encargar comida de algún restaurante o…

Andy: o podemos cocinar los dos ;)

E: Lo que tú quieras.

Andy: OK, solo tengo un pequeño problema y es que no sé dónde es su casa profesor.

E: salgo a las 2:00 de mi clase en la otra universidad ¿te molesta si paso por ti a las 3:30?

Andy: Si te parece bien te veo en algún lugar y de ahí nos vamos.

E: perfecto, te veo en la calle Madero esquina con Matamoros.

Andy: excelente <3

E: Me encanta que nos entendamos, Lic, Gamez.

Andy: A mí también me encanta, profesor, nos vemos más tarde, que tenga bonito día J

Lo primero que pensé es en donde carajos quedan esas dos calles, demonios, lo tendrá que buscar en el maps del teléfono. Continúo escuchando a la maestra que está explicando porque es importante tomar decisiones en una empresa y que básicamente no se te cierre el mundo.

Salgo de la clase a las 12:00 pm, mi siguiente clase comenzaba a las 1:30 pm, así que mis amigas y yo nos dirigimos a almorzar a la cafetería, íbamos hablando del horrible cabello de la maestra porque básicamente parece un espantapájaros.

–Tengo ganas de boneless– comenta Gloria mientras esperamos nuestro turno para pedir comida.

–Yo quiero una michelada– digo recordando el sabor fresco de la bebida– deberíamos ir el miércoles.

–sí, de hecho hay 2x1 en boneless. – Agrega Gloria con una sonrisa–deberíamos decirle a las demás.

Llega nuestro turno, mientras que Gloria pide una sincronizada, yo pido una chilaquiles verdes con asada, simplemente delicioso.

Las clases se terminan y como siempre mis amigas y yo nos quedamos a chismear en recepción del edificio.

– ¿y por qué no vamos a comer ahorita? –Comenta Lu de repente – podemos ir al sushi o por otra cosa.

Oh oh.

¡Inventa algo rápido y creíble!

–si estará bien ir, ahí también venden micheladas, Andrea–comenta Gloria, carajo, carajo– ¿entonces?

–No puedo ir hoy–respondo rápidamente y tres pares de ojos me ven con sorpresa, nunca me niego a ir a comer con ellas– es que tengo cosas que hacer.

–Puedes cancelarles a tus roomies– dice Luisa con fastidio– vives con ellos.

–Sí, pero Jocelyn quiere que la acompañe al tianguis a comprar unas blusas– respondo lo primero que se me viene a la mente y tratando de que no se me note la mentra. – de hecho me tengo que encontrar con ella en centro a las 4:00 así que iré a hacer tiempo en la biblioteca.

–bueno, lo dejamos para el miércoles y vamos por las alitas– dice Xiomara.

– ¡claro! Si otro día– digo caminando ya hacia la biblioteca– ¡las veo mañana!

Xiomara

Presente

Vemos como Andrea se va corriendo a la biblioteca, demasiado extraño. Presiento que esta con alguien y sé que en algún momento nos lo dirá solamente que aún no debe estar preparada y está bien cada cosa a su tiempo.