Capitulo 2

Después de la clase de Diseño me concentro en llegar a tiempo a todas las demás clases que tengo en el día, las cuales avanzan sin ningún contratiempo, lo que me hace pensar que el don de Laura ya no está tan afinado como otras veces, ya que aún no he visto ni rastro de esos famosos chicos nuevos por ningun lugar del campus.

Conforme van pasando las clases tanto Laura, Isabel y yo tenemos que separarnos ya que tenemos diferentes materias, cada una estudia algo distinto y en la unica clase que estamos juntas es en la primera.

Laura estudia periodismo, Isabel estudia Diseño de interiores y yo Diseño de moda asi que aunque no nos guste debemos permanecer separadas casí todo el día por nuestras materias.

Mientras voy caminando hacía la cafetería me doy cuenta que hay un grupo de chicas muy interesadas en, (en realidad no sé en que estén tan interesadas ya que al ser tantas no me dejan ver que carajos tiene su atención), lo cual tampoco es algo que me interese tanto, por lo que decido ignorarlas y seguir mi camino. Cuando escucho el sonido de unas cuerdas de guitarra no puedo evitar girarme a mirar quién la esta tocando y no consigo verlo y por fin me doy cuenta que el centro de atención de todas ellas debe ser la persona que está tocando con tal gracia que podría encantar a cualquier oído.

Nunca había escuchado tocar a nadie en el campus y con esa pasión menos, así qué en verdad esa es una novedad en este día, me pregunto sí ¿será uno de los chicos nuevos que mencionó Lau en la mañana? la curiosidad hace que me  acerqué un poco más a el lugar donde proviene ese sonido, que al decir verdad me agrada bastante como se escucha; es muy hipnótico el sonido, Cuando escucho que una voz me habla y siento una mano grande en mi hombro lo que hace que me tensé en automático.

Al darme vuelta me encuentro con Simón un chico alto y muy atractivo que me ha estado acosando últimamente, tratando de conseguir que salga con el, pero es bien sabido por todo el Campus que el se lleva a la cama todo lo que tenga falda y la verdad es alguien que no me interesa en lo absoluto, ya que no quiero pertenecer a su lista de cosas logradas en el año.

-Ahora que quieres Simón-le digo con completo desdén ya que en realidad quiero que se vaya y me deje en paz y sobre todo que me quite las manos de encima.

-Uy disculpa, creo que moleste a la princesa mas linda que existe en este lugar- me dice como tratando de simpatizarme- Bueno hermosa ya no te enojes, sabes que todos los días hago mi lucha por intentar conseguir una cita contigo, eso es todo lo que pido en esta vida una cita-

-Pues creo que te vas a quedar con las ganas otro día mas, ya que almenos hoy no va a ser el día que se te conceda ese deseo- le digo mientras me dispongo a seguir caminando hacía la cafetería

El comienza a seguirme lo que en verdad se me hace bastante molesto ya que quiero poder conseguir mi frappé de caramelo y poder tomármelo con completa tranquilidad mientras sopeso la idea de tener que irme sola hacia el departamento ya que Isa tiene cita con su "novio", pero primero necesito deshacerme de este imbécil.

-Vamos Amelia que te cuesta, estoy muy seguro que no te arrepentirás, soy un buen partido que podría impresionante con mis multiples talentos que podrías llegar a descubrir por ti misma- claro como el de tirarte en la primera cita a cada una de las chicas con las que haz salido, me digo hacía mis adentros.

- Simón basta, de verdad no te das cuenta que no me interesas y que nunca vas a conseguir que salga contigo, llevas intentándolo por más de medio año y siempre te digo que no.

- Lo sé pero la esperanza es lo que muere al último, sé que no sales con nadie por ahora así que puedo seguir insistiendo, y pues soy un chico muy perseverante y qué siempre consigue lo que quiere.

- Dime algo, si en lugar de tener una cita contigo, nos ahorramos todo eso y nos vamos directamente a la cama, ¿dejarías de molestarme?; ¿por qué eso es lo que quieres cierto?- le digo ya muy fastidiada de no poder quitarmelo de encima y poder tomarme mi frappé.

-¡Mirá!- se comienza a acercar a mi de manera que quedo recargada sobre la pared y siento que quiero comenzar a temblar, el pánico comienza a fluir en mi interior y con toda mi fuerza me contengo para no salir corriendo- Nunca me imagine que podía ser directo contigo de lo que en verdad quiero, ahora entiendo por que no tienes novio, si te gusta pasar a lo bueno enseguida y ahorrarte toda la cursileria-

Me comienzo a reír nerviosa, en verdad quiero que se aparte de mi - Más bien, quería comprobar que eres un patán y que tu supuesto interés en mi es unicamente por que me quieres desnuda en tu cama, pero sabes que cariño, eso no va a pasar no eres lo sificientemente bueno como para siquiera aspirar  a un beso menos a que sea tuya ni por una noche en tu cama cariño- cuando le digo esa última palabra levanto mi rodilla con fuerza dandole en la entrepierna, haciendo que caiga al piso de dolor, y poniéndose rojo de coraje o de dolor mientras yo decido salir del lugar e irme al departamento a descansar.

Al salir de la cafeteria puedo escuchar como varias personas se ríen de Simón y lo escucho gritar-¡Amelia! Te arrepentirás de esto, te juró que me la vas a pagar- en verdad el cree que me voy a arrepentir de no irme a la cama con el, por favor, estoy segura que sí algún dia termino en esa situación con un chico no sera con un idiota como el.

Voy caminando ensimismada en mis pensamientos, cuando mi cuerpo choca con otro cuerpo mucho más grande que el mio, haciendo que derrame mi delicioso frappé sobre mi ropa y sobre la del chico con el que me topé -Lo que me faltaba ¡Maldición!- Exclamo furiosa, ya estoy muy cansada de este día de mierda-

-¿Te encuentras bien?- una voz cálida me pregunta, mientras levanto la mirada enojada encontrandome con un chico alto, tés morena, atlético, unos ojos color miel tan profundos que al parecer podrían ver el fondo del alma de las personas.