Capítulo 144. [Canción]

[Escucha Afterlife - Hailee Steinfeld]

ADVERTENCIA.

Este capítulo podría contener escenas de índole sexual leve o moderado.

Enero 2028.

El instituto de La orden había recibido tres cartas, una de Yohan, otra de Killian y una más de Mireya, pero la líder del grupo estaba muy ocupada con otros asuntos por lo que al recibir a Yurim en su estudio le pidió encargarse de la primera carta, posteriormente le pidió a Charles abrir la carta de Killian mientras ella se encargaba de la carta de Mireya.

Durante la lectura de la carta de Mireya, Scott entró al estudio con el informe anual de los acontecimientos del instituto de California, pero al verla cansada le sugirió tomarse un descanso. Injae sonrió en cuanto lo vio entrar.

— ¿Estás libre para salir?

Scott asintió extrañado y al poco rato salieron rumbo a una empresa de bienes raíces. Al llegar, Injae le explicó que quería vender algunas propiedades de los Brizz entre ellos el departamento porque quería restaurar el viejo instituto de Inglaterra y mejorar el nuevo.

— ¿Quieres tener dos institutos en un mismo sitio? —Preguntó dudoso—. ¿No es algo avaricioso para los pocos cazadores que tenemos aquí?

—Quizá, pero no lo será por mucho porque quiero tener más cazadores en el grupo. —La declaración dejó sorprendido al pelirrojo—. La mayoría de los que hay han estado allí antes que yo y sé que no soy de su agrado, por eso quiero unos nuevos a quien adiestrar para que pueda confiar en ellos y viceversa.

—Que lista.

—Y hay algo más… —Vaciló frunciendo su boca—. No desmantelaré la Orca XYZ.

Yurim había leído la carta de Yohan donde mencionaba que Stella se encontraba bien y estaba mejorando rápido ya que empezaba a aceptar de nuevo la sangre animal; Yurim se encontraba en la sala dudando sobre si debía responderle o pedirle a alguien más que se encargara, pero por las muecas que hacía mientras lo discutía en su mente, Marco la vio confundido y se acercó.

— ¿Pensando qué responder?

—Ah… sí, bueno, no. Creo que no debería ser yo quien lo haga, no pienso que sea bueno entablar una cercanía con Yohan luego de lo que pasó con Skyler.

—Yo no veo el problema, es solo una carta no una propuesta de matrimonio.

—Lo sé, lo sé. —Extendió sus manos y asintió cansada—. Es solo que… temo acercarme a él y que mis sentimientos por él vuelvan.

Marco arrugó su ceño, se cruzó de brazos y se recargó en el posa brazos del sofá.

— ¿Por? Yo creo que Yohan es buen sujeto y además, ambos son oscuros y extraños —bromeó jocoso y ella lo vio entrecerrando sus ojos en desacuerdo, él se rio un momento antes de ponerse serio—. Bueno, ya. ¿Por qué no quieres enamorarte de Yohan?

Yurim se quedó callada bajando su mirada a su anillo viendo como inconscientemente ya estaba jugando con él y se dio cuenta de lo poco que le prestaba atención, pero sabía de alguien que siempre lo notó.

—Por respeto a la memoria de Félix —confesó arrugando su boca después—. Y ahora también por Skyler aunque ella haya dicho otra cosa, pero es más por Félix ya que no sería justo estar con la persona por la que él murió sabiendo lo que sentía por mí.

Marco respiró hondo sintiendo una sensación de dolor que seguía sin sanar cada que escuchaba el nombre de su amigo fallecido, así que entendía en cierto modo lo que sentía Yurim, sin embargo, también sabía lo que él hubiera querido.

—Félix se ha ido, Yurim, él ya no va a volver. —La miró a los ojos y se tragó el nudo en su garganta al decir esas palabras—. Es justo por eso porque debes hacerlo. Félix no murió por Yohan, sino por ti, todo siempre fue por ti porque te amaba más que a su propia vida y quería que fueras feliz aun si eso significaba que él no fuera parte de eso, así que no hagas que su sacrificio sea en vano.

Marco le regaló una sonrisa para animarla, le jugó el cabello y luego la dejó pensando; Yurim echó un vistazo a la carta y entonces fue a su cuarto en busca de algo para lo que escribir.

Cuando la salida de Scott e Injae acabó, ambos regresaron al instituto directo al estudio donde Charles los esperaba desde que los vio bajar del auto. El chico le regresó la carta de Killian y ella lo vio extrañada al preguntarle si había respondido.

—Quizá sea mejor que usted lo haga, creo que es algo personal. —Se encogió de hombros—. En la carta dice que ha dejado la manada para convertirse en un lobo omega.

Injae tomó la carta para leerla en voz alta luego de que el chico se fuera.

«Hola, chicos.

Fui a California para visitarlos y ahí la tía de Injae me dio la dirección del nuevo instituto. Quería decirles que quizá esta sea la última carta que envíe por un tiempo ya que estaré moviéndome mucho sin rumbo fijo porque he decidido dejar la manada.

Les agradezco por habérmela encontrado, mientras estuve allí aprendí muchas cosas sobre mi especie y ahora sé usar mis habilidades, así que no se preocupen por mí ya que también aprendí cosas de humanos. Toda mi vida la pasé encerrado sin saber más allá de cuatro paredes y ahora que se presentó la oportunidad de salir a conocer lo que hay más allá, estoy listo para aprovecharla.

No fui el único que se ha ido, me uní a otros chicos que la dejaron y luego yo los dejé a ellos para seguir mi propio camino y poder descubrir cual es mi lugar en este mundo, los quiero mucho a todos, espero verlos pronto para el cumpleaños de Injae y Scott.

Por cierto, Injae, sé que es algo tarde, pero ¿podrías felicitar a Mireya por su cumpleaños de mi parte?

Nos vemos pronto, Killian.»

Scott e Injae respiraron hondo y en silencio aceptaron la decisión que tomó Killian, luego de que Injae guardara la carta vio a lado la de Mireya y sonrió jocosa.