-No puede ser- dijo Kassia mientras miraba su celular
-¿Qué ocurrió?- preguntó Tamara sin despegar la vista del libro de algebra superior
-Mis padres, saben que estuve en tu casa el fin de semana y quieren hablar contigo y tu familia-
-Valla, a las dos semanas conocerás a tus suegros Tamara- bromeó Halle y comenzó a reír junto a Zaida
-Eres muy suertuda- continuó Zaida
-¿De verdad lo harán?-
-Sí- respondió Kassia y su celular comenzó a sonar- no puede ser, ahora regreso- dijo y salió de la habitación para contestar a la llamada
-¿Estas nerviosa?- preguntó Zaida mientras levantaba la mirada a Tamara
-Es jueves, mañana es viernes, apenas unas horas de distancia, estoy bastante nerviosa-
-Pero aún no sabes cuándo se reunirán, o siquiera si lo harán- dijo Halle cerrando el libro de algebra lineal- ya entendí la diferencia, el algebra lineal es asquerosamente difícil-
-Venga, no puede serlo tanto, y si, Kassia acaba de decir que si nos reuniremos- dijo y tomó el libro de algebra lineal
Tamara abrió el libro en una pagina trivial y se sorprendió al ver lo que parecían ser tablas llenas de “as” con subíndices numéricos en las primeras filas y luego con un subíndice “mn” en la esquina inferior derecha, leyó un poco atrás y el libro la llama “Matriz”, de un sistema de ecuaciones lineales.
-¿Lo leerás?- preguntó a Halle
-No lo creo, es demasiado para mí-
-¿Me lo puedes prestar?-
-Quédatelo si quieres, yo no quiero ver esas cosas que no entiendo-
-No puedo quedármelo, se que fue muy caro, te lo regresare-
-Se te olvida que venimos de familias ricas- dijo Zaida- en mi caso casi cuatro generaciones-
-Y en mi familia casi ocho- dijo Halle- deberías de dejarte de preocupar por algo tan vulgar como el dinero y preocuparte más por las pequeñas cosas de la vida, como conocer a tus suegros- bromeó nuevamente
-Venga, ni siquiera estamos saliendo, solo somos amigas y puede que solo sean sus padres preocupándose por su hija-
-Si, puede que solo sea eso- dijo Kassia regresando a lado de Tamara- el sábado, mi padre invita a tu familia a cenar-
-Valla… en dos días-
-Venga, son dos días para prepararse- dijo Zaida intentando animar a Tamara
Y los dos días pasaron en un parpadeo, Tamara ahora vestía un vestido negro de noche que se ajustaba a su cuerpo, su madre vestía un vestido rojo largo abierto de la pierna que dejaba su espalda descubierta y se sostenía a la nuca con dos tirantes unidos que a su vez sostenían su busto.
-Madre, pareces muy tranquila-
-Vladimir dijo que tenía todo arreglado, y una sorpresa- dijo la mujer mientras manejaba golpeando el volante con los dedos rítmicamente
-¿Por qué el no viene hoy?-
-Si vendrá, solo que tuvo una reunión de emergencia con algo relacionado a un consejo de guerra o algo parecido-
-Dios… yo estoy muy nerviosa-
-Estas preparada para el ataque de un asaltante armado, pero no para una plática con los padres de tu amiga, valla, pensé que te había criado mejor-
-Y lo hiciste, no me dan miedo sus padres… sino lo que puedan hacer-
-¿Cómo por ejemplo?-
-No lo sé… eso es lo que me da miedo-
-El miedo mata más que las guerras, lo peor que pueda pasar es que no te dejen ver a Kassia, pero tú eres inteligente y la podrás ver las veces que quieras-
-¿Y si la sacan de la escuela?-
-No creo que lo hagan, es la única escuela privada de alto nivel de por acá-
-Madre, son ricos, millonarios, la pueden enviar fácilmente a otro estado o país-
-No te preocupes, no pasara, ten fe-
Tamara inhalo profundamente y luego exhalo con calma, miró las luces de la carretera iluminándole en pequeñas líneas cuando pasaba a lado de ellas, las casas iluminadas también le llamaban la atención, todo era bonito de noche, hasta el cielo iluminado con algunas estrellas y la luna, poco tiempo paso y llegaron al restaurante, uno bastante lujoso en el que un hombre bien vestido tomó el auto de Ada y lo llevó al estacionamiento, luego dieron sus nombres a una linda recepcionista que las acompañó hasta una mesa donde ya estaban los padres de Kassia y claro, Kassia.
-Buenas noches señorita Ada- dijo el hombre y se puso de pie para estrechar la mano de la madre de Tamara
El hombre vestía un traje azul marino que se ajustaba perfectamente a su figura, la mujer a su lado vestía un vestido negro que parecía ser muy costoso, a su vez, Kassia tenía un vestido gris que se adaptaba a su figura haciéndola ver aún más linda para los ojos de Tamara.
-Buenas noches Tamara, nos alegramos de conocerte- dijo la mujer y se levantó para estrechar la mano de Tamara
-Me siento igual señora del Monte- dijo Tamara estrechando firmemente la mano de aquella mujer
El hombre se levantó y ayudó a Tamara y a su madre a sentarse a la mesa.
-¿Y tu padre Tamara?- preguntó la mujer
-Murió en la guerra de Irak, era soldado para los estados unidos-
-Lamentamos mucho tu perdida- dijo el hombre- no sabía que el ya no estaba-
-No muchas personas lo saben- dijo la madre de Tamara- pero vamos al punto, ¿Cuál es el asunto que quieren tratar?-
-Verán, queremos mucho a nuestra hija, sin embargo, no nos gusta que vaya a pasar los fines de semana en casa de desconocidos- dijo el hombre
-Tampoco que salga de la escuela sin permiso nuestro- completo la madre
-Además, escuchamos que Tamara estuvo en la correccional-
Tamara sintió una gran carcajada saliendo de sus pulmones, pero la contuvo antes de dejarla salir.
-También que su abuelo es buscado por los estados unidos- dijo la mujer
Quien ahora sintió la carcajada fue la madre de Tamara y se tomó el estómago para intentar aguantarla.
-Dios… yo escuche que usted diseña cámaras- dijo Tamara mirando al padre de Kassia- y que usted no está en casa la mayor parte del día- dijo mirando ahora a la madre de Kassia- el problema es, ¿Qué tanto de eso es verdad?-