Cuando nuestro amor florece

47 | Cada vez más cerca

8 de marzo de 2021

James

Me encerré en mi oficina a pensar.

Había pasado los últimos días con la cabeza en el asunto de Giselle, no podía dejar de pensar en que tenía que comunicarme con ella y conseguir que deseara encontrarse conmigo.

No pienso admitirlo frente a nadie, mucho menos frente a mi hermano o April, pero, mis sentimientos por Giselle Alderidge no han desaparecido en lo absoluto.

¿Cómo podría haberme olvidado de ella en solo unos meses cuando no he dejado de pensar en ella durante años?

He decidido que voy a enviarle un correo electrónico diciéndole un poco de todo lo que he guardado en mi corazón durante años. Sin embargo, el cargo de consciencia también me está matando porque se supone que estoy enamorado de April McCoy, pero estoy pensando en otra mujer que no es ella.

Tal vez me voy a arrepentir de esto que estoy a punto de hacer, no obstante, igual lo haré antes de que sea demasiado tarde.

Encendí mi laptop, entré a mi correo electrónico y empecé a escribir la carta que podía cambiar mi vida para siempre.

Sé que ha pasado un tiempo, tal vez mucho más de lo que me gustaría. He dudado mucho al contactarme contigo, incluso ahora que me he decidido sigo pensando en si he tomado la decisión correcta.

Han pasado trece años desde la última vez que te vi, han sido trece inviernos hostiles por tu ausencia. Todo al cambiado, al final no fui tan fuerte para luchar por nuestro amor. Fui un maldito cobarde que no pudo cumplir todas las promesas que algún día de hice.

Pero hoy he decidido tomar las riendas de mi vida e intentar hacer lo que debí haber hecho hace tanto.

No he dejado de pensar en lo que un día fuimos y en todo lo que pudimos haber sido. No he dejado de pensar en ti ni un solo día de mi vida, no ha pasado una sola noche en la que tu nombre no aparezca en mi mente, no ha pasado un solo momento en el que no recuerde lo felices que fuimos juntos. En ese momento no sabía que eras mi todo, quizás solo lo supe en cuanto te perdí.

Sé que has cumplido cada uno de tus sueños, sé que al fin eres todo lo que un día deseaste ser. Y espero que todavía sigas conservando ese corazón tan bonito y transparente que siempre te caracterizó, porque eso es lo que te hacía ser tú.

Quiero verte, sé que ya nada es igual y que tal vez ni siquiera quieras verme luego de como acabaron las cosas, pero, esta vez todo ha cambiado una vez más y solo quiero tener una última oportunidad.

No soy el mismo cobarde del que te enamoraste en el pasado, ahora soy un hombre que puede darte todo lo que mereces y amarte de la forma en que mereces. Solo quiero volver a verte, e incluso si no deseas lo mismo que yo, permíteme verte una vez más. Antes de que mi vida siga avanzando y de que me siga haciendo más viejo, quiero poder reencontrarme con el amor de mi vida y poder tener al menos una despedida apropiada para el amor que existió entre ambos.

Te pido que podamos volver a encontrarnos, tú dime el día, el lugar y la fecha que estaré dispuesto a todo.

Todavía te amo con cada mísera parte de mi ser.

Att: James Windsor

Envié el correo y limpié las lágrimas que estaban a punto de salir por mi rostro, quizá ella lea el correo pronto y me envíe una respuesta, mientras tanto tendré que esperar en medio de mi desesperación.

La puerta de mi oficina se abrió obligándome a regresar a ver.

—¡Daphne! Amiga mía, no te estaba esperando —me alegré muchísimo al notar que mi mejor amiga había venido a visitarme.

—James querido, no nos hemos visto en un tiempo...Las vacaciones con mi familia se extendieron un poco y apenas ahora que he regresado, y por supuesto no podía quedarme sin venir a visitarte —se acercó a abrazarme con fuerza—. Ay hombre, creo que no nos hemos visto en más de cinco meses.

—Y no sabes todo lo que te has perdido Daphne —solté un suspiro.

Ella era una de mis amigas más cercanas, por lo que supuse que tal vez hablar con Daphne me ayudaría un poco a despejar mi mente y tener las ideas mucho más claras.

—Bueno, para eso estoy aquí, puedes comenzar ya —me alentó con emoción, adoraba su personalidad sin duda alguna.

—Priscilla me pidió el divorcio.

—¡Qué bendición! Por Dios, estuve años rezando para que esto pasara... ¿Qué crees que la hizo tomar esa decisión?

—La verdad es que no sé que la hizo desear divorciarse de mí de pronto, pero, no me interesa buscar razones...Lo que me importa es deshacerme de ella luego de todos estos años, ya tuve suficiente soportándola, por cierto.

—En eso tienes razón, no hay necesidad de buscar explicaciones.

—Y por mi falta de tiempo, sabes que paso demasiado tiempo en el trabajo, he tenido que contratar una niñera a puertas cerradas.

—Ay James no me digas que hiciste lo que estoy comenzando a creer...—colocó su mano en su frente, fingiendo dramatismo—. ¿Te enamoraste de la niñera de tus hijos?

—Todos me dicen que era algo bastante predecible, sin embargo, juro que es una mujer muy bonita y de un gran corazón. Es demasiado buena con mis hijos, y me llena de paz el corazón, solo tengo un gran problema ahora mismo...

—Sabes que puedes comentarme lo que sea, veré como puedo ayudarte.

—Priscilla quiere que le ceda un gran porcentaje de mis bienes para divorciarse de mí, le sorprendió mucho el que nos hayamos casado con separación de bienes desde el inicio y no pudo quedarse con los brazos cruzados. Me ha amenazado con hacerle daño a Giselle si lo hago lo que ella quiere.

—¿Y es ella se volvió loca o que demonios le pasa? Es una imbécil, simplemente no puedo creer que se haya atrevido a amenazarte con eso... ¿Y qué vas a hacer al respecto?

—Bueno, a Andrew se le ocurrió buscar a Giselle y ser precavidos para que no le hiciera ningún daño, actualmente he encontrado su ubicación y le he enviado un correo para hablar con ella.




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