¿Alguna vez has tenido la impresión de que te observan? Esto suele ser normal cuando estás en un encuentro social. Pero no tanto si donde te encuentras es en tu casa, solo.
Es como si unos ojos invisibles te observaran desde las esquinas más oscuras de tu hogar. Como si el lugar al que llamamos casa, hubiera dejado de ser seguro.
Desde el hueco de la escalera, hasta la cortina de la ducha, todos esos lugares alejados de nuestros ojos pueden ser un escondite para aquellos que nos observan. Pero en ocasiones, esa sensación se vuelve más cercana de lo que nos gustaría. Como si eso que aprovecha nuestra soledad, estuviera justo detrás de ti, esperando a que te des la vuelta.
Editado: 16.02.2024