Cupido Le Teme Al Amor

8

Capítulo: 7

"Quiero amor mutuo"

- lo siento, pero fue un desliz de mi memoria, es algo complicado, va a sonar estúpido, -Me tengo que salir de este lío, me va a descubrir todo, ¿pero qué palabras dije? no pude contenerlo ella es igual a mí, no pude detenerme, le platiqué sobre las citas de libros que usaba para sentirme un poco más intelectual que el resto pero ella leía también, era algo interesante el hecho de hablar con alguien así, pero por ese mismo hecho estoy a punto de echar todo a la borda-

- ¿qué es? dilo, no te pongas nervioso -preguntó, tenía ese rostro en el que se podía percibir una perfecta desesperación, esperaba con ansias esa estúpida respuesta que no tenía ni las más mínima ideas de donde la iba a sacar, esperaba tal respuesta como si dependiera de una solución para sus problemas. -

- ¿crees, en las personas que ven el futuro y así mismo pueden viajar al pasado? -pregunté, aquí vamos, diré algo loco para salir de esto, pude ver esa mueca de confusión, queriéndome decir con la mirada que no tenía una jodida puta idea de lo que trataba de decirle. -es que, mientras estabas allí arriba, pude viajar al futuro y pude apreciar esta charla sobre cupido y todo eso, así que indagué un poco en tu pequeña repisa de libros y aprecié unas notas sobre frases que tenías allí, vi que esta era la más apropiada para la conversación y procedí a decírtela, así esperando ganarme tu aprobación. - cuando dije tal estupidez, ella bajo su mirada y volvió a sentarse en los cómodos muebles sin moverse ni inmutar una sola palabra, el silencio reinó una vez más, y pude ver su cara sombría de decepción, no quise decir nada al respecto, porque al igual que ella, se que todo lo que dije fue una completa barrabasada, que solo un demente diría, y en este caso creo que en eso es lo que me he convertido, al decir eso, la vergüenza me va a matar, no quiero estar aquí, no merezco ser llamado Liam London, he puesto en ridículo mi vida-

- sí, claro que más podría esperar de ti, -persistía en tener su mirada clavada en la fina y delgada tela de su bata, prosiguió dando antes un suspiro- has perdido la memoria, así que dices cualquier estupidez. -terminó diciendo, Me bajó los ánimos, por un momento pensé que me pediría que me largara-

- ¡espera! ¿Porque me tratas así? – no quería ver esa expresión en su cara, es imposible de creer lo que diré, pero prefiero verla hablarme con sarcasmo y vulgar, a ver este tipo de comportamiento sobrio que no nos lleva a ningún lado. Si, está bien, dije algo estúpido, pero no es para que me trate como tal, solo quería encontrar una salida para esto tan incómodo. –

Nataly

- ¡porque hablas así! – exclamé en un tono un tanto alterado, sin ocultar mi molestia por su reclamo. -cómo quieres que alguien te tome enserio si sales con eso. -El pretende que lo trate normal, y dice cualquier estupidez que se le venga en mente, en serio me habla del futuro, ¡que irónico!, claro, ahora su mente está en un momento complicado, pero yo no soy tolerante a eso, así que no pude detener mis palabras cortantes hacia él

-bien, no tiene caso discutir, tu eres la dueña de las reglas aquí, así que me puedes tratar como quieras, no habrá problemas con eso, debo ser comprensible como lo eres tú - dijo bajando un poco la mirada, en señal de resignación, ¡Dios! Por todo lo que me toca que pasar por hacerle un favor a el-

- claro, trata de recordar, porque mañana te iras a casa. -Le dije con una mirada decisiva no puedo tener más tiempo a un desconocido en casa, no sé de lo que pueda ser capaz, o de lo que yo pueda a llegar a ser capaz-

- ¡que! No me hagas esto, no me acuerdo de nada, dame una semana, ¿sí? – no puedo negar que mi corazón me traiciono por un momento mientras el suplico quedarse, pero debía pensar en esto mejor, no está bien tenerlo en casa. -

- no puedo. -dije, negándome rotundamente a su propuesta, debía ser dura de corazón para este tipo de cosas, pero ¡maldita sea! No soporto sus suplicas, además si es así me tocaría aguantarme sus cosas de cupido, el tener un hombre en casa podría poner en riesgo mi relación con samuel, miré el 50% de probabilidad que hay, en que samuel llegue a darse cuenta de que vivo con un hombre, y de solo pensarlo un frio recorre por todo mi cuerpo logrando erizar cada uno de sus vellos. Es mucho tiempo, además, esta no es una casa hogar-

- ¿qué es lo que te impide tal cosa? – volvió a interrogarme, no sé, si decirle porque lo hago, pero me vería ante sus ojos como una gran egoísta, ahora la pregunta es ¿Por qué mierda me importa que el piense mal de mi-

- mañana viene un "amigo" y no quiero que estés merodeando por la casa. Ya sabes es algo... -no terminé de decirle lo que tenía planeado y grabado en la cabeza porque esa mirada me detuvo, ¿era decepción? ¿qué razones tendría el para sentir decepción de mí? Él no me conoce, no sabe de lo que soy capaz, ¿entonces porque pareciera como si esperara más de mí? Samuel no lo puede ver, estaré perdida si se da cuenta de que no fui a la cita por estar con este chico en casa, pensaría lo peor y eso no está bien para que mis sentimientos hacia el sean correspondido-

Liam

- pero ¿por un amigo no me ayudaras? – dije, mientras seguía haciendo esas caras de lamentación, para que desistiera de su decisión, y al parecer lo estaba logrando, ella me veía con otros ojos, aunque pareciera lamentable, cosa que no me gusta ser ante los ojos de nadie, se que sacaré buen provecho de esto, soy descarado lo sé, no me lo recuerden, siempre lo he tenido claro, pero aun así no logro cambiar-

- ¡No es cualquier amigo! - lo dijimos al unísono, ¿qué estaba pasando aquí? Ella me miró de una forma que no podría describir su expresión, no era sombría tampoco estaba feliz, no sé qué era, pero lo descubriría. -




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.