3. Nueva...

Capitulo 3. 

Nueva... 

—Aurora... despierta—siento como alguien me da suaves golpecitos en la mejilla. Abro los ojos lentamente. 

Tengo mi cabeza en el hombro de James, él me sonríe y yo me separo de él. —Me quede dormida. 

Él ríe. —No me digas ¿en serio? —dijo con evidente sarcasmo.

—Ja, ja, muy gracioso. 

—Vamos—, abre la puerta y se baja del auto, se hace a un lado para que yo baje, y ¡Santos cielos! Estoy enfrente de una mansión ¿será la casa de Pau?

 — ¿Esta es la casa de tu mamá? —le pregunto viendo anonada la casa. 

— ¿Qué? No, esta es tu nueva casa—respondio sonriendo.

 — ¡¿Qué?! ¿En serio? —pregunto con evidente sorpresa.

 —Si...

 — James nos vámonos hijo, ellas deben descansar—anunció Pau saliendo de la casa.

Ellos se despiden de nosotras y se van. 

Estoy confundida ¿de donde mi madre sacó el dinero para comprar esta mansión? Porque con el dinero de la venta de nuestra vieja casa, no creo que le haya alcanzado. 

—Mamá ¿Cómo hiciste para comprar esta casa? —le pregunto a mi madre. Despues de todo ella es la única que puede aclararme la duda. 

—Yo no la compré—respondió mi madre mi madre, como si lo que acabara de decir fuese lo más normal del mundo. 

— ¿Entonces... cómo...? —no puedo formular la pregunta por lo confundida que estoy. 

—Mi jefe fue quien la compró. 

— ¿Dijiste que tu jefe fue quien compró esta casa? —estoy completamente confundida. 

—Si eso dije, es algo que he tratado de decirte, pero tú siempre que te decía algo sobre la mudanza y mi nuevo empleo, te ibas, me dejabas hablando sola o simplemente me ignorabas—Respondió, viéndome con cara de ¿o no es así? 

Pongo los ojos en blanco mentelmente—Eso no es... bueno si es cierto, pero en mi defensa yo no quería saber nada acerca de la mudanza, y ahora me llama mucho la atención que haya sido tu jefe el que compró esta mansión para nosotras—digo lo ultimo subiendo y bajando las cejas. 

—Te voy a explicar todo. A ver, Pau le mostró mi currículo a su jefe sin consultarme, él le dijo que alguien como yo, es lo que necesitaba. Ella me contó, yo le dije que no estaba en la mejor situación económica como para mudarme, Pau le informo a él que yo no podía aceptar su propuesta ya que no tenia cómo mudarme, él le dijo que no había problema que mi sueldo iba a ser el triple de lo que había dicho y que él tenia una casa la cual ya no usaba, y si yo aceptaba trabajar con él no debía preocuparme por tener una casa. Yo me negué pero Pau se empeñó en que aceptara esta oportunidad, le dije que lo pensaría y al ver que en mi antiguo empleo no tenían pensado darme el aumento que merecía, me vi en la obligación de aceptar la propuesta. 

—Wow ¿estas segura que Pau le mostró tu currículo, y no una foto tuya? —le dedico una sonrisita picara. 

Mi madre me da una mirada de desaprobación— ¿Se puede saber por que piensas eso? 

Mi madre para estar casi en los cuarenta se mantiene bien, aparenta menos edad como unos treinta y siete, eso sin contar que tiene buenas curvas. —Vamos mamá ¿te has visto en el espejo? Además alguien como tú, es lo que necesitaba el pobre hombre. —digo y pone los ojos en blanco. 

Alguien no está de buen humor.

—Él me necesita, pero profesionalmente —dijo haciendo énfasis en lo ultimo. —Vamos para que veas, nuestra nueva casa y elijas un cuarto. 

Nuestra nueva casa. Es una linda casa de dos pisos con ventanas victorianas y un jardín muy cuidado, creo que es muy grande solo para nosotras dos. 

Mi madre abre la puerta y entramos. La casa es estúpidamente lujosa, en el primer nivel hay una sala grande con sofás negros de cuero, todas las paredes son blancas con cuadros estilo vintage, la casa es estilo neoclásica pero moderna a la vez. La cocina es amplia y tiene una isla con cinco sillas al lado de adelante, la mesa de la isla es de mármol gris, y todo esta en perfecto orden; más allá del living, siendo apartado por una pared hay un comedor con ocho sillas color negro y arreglos minimalistas, la mesa es transparente y las patas negras, al igual que las sillas. Más allá del comedor, hay una puerta transparente con persianas, ésta puerta tapa el gran patio trasero, en donde esta el jardín y la piscina, sí piscina, y al lado de la escalera hay como una especie de oficina. 

El proceso de instalación ha transcurrido durante toda la tarde, mi madre y yo acomodamos todas las cosas que habían comprado ella y Pau en el súper, que era más que todo comida y algunas cosas de higiene personal, ya que la casa esta completamente equipada.