Capítulo 11: ¿Destino o coincidencia?

Narra Keyla.

Era viernes, estaba dispuesta a ir a la universidad pero mi madre no mejoraba así que decidí quedarme a cuidarla. Mi madre no quiso que faltará ya que debía estar al tanto de mis estudio pero por esta ocasión no.

-Hija tienes que ir, no es necesario que me cuides, estaré bien– negué con mi cabeza.

-Iré a traer tus medicamentos– me retiré dejándole un beso en su frente. Llegue a la cocina en donde estaban sus medicamentos.

Debia decirle a Eun Ha Woon que no iría a clases por la salud de mi madre y que se lo dijera al tutor. Le mandé un mensaje por lo que ella respondió que está bien y espera que mi madre mejore.

Llegue a la habitación de mi madre y la cuide como se debía pero mi madre insistía en que vaya a la universidad.

-No madre me quedaré a cuidarte no insista por favor– trato de levantarse pero yo la eché en su cama, no quería que hiciera más fuerza ya que perjudicaría su salud.

-Hija lo siento– la mire confundida– por mi culpa perderás un día de clases. Alce su rostro y la mire fijamente con una sonrisa sincera.

-Madre, tú me has cuidado nueve meses en tu barriguita y 18 años, así que ahora yo te cuidare madre– mi madre se conmovió por mis palabras y dejó de insistir y sentirse culpable– ahora descansa iré a preparara la cena.

Asi paso el día viernes cuidando a mi madre, por lo que me resigné en que podría encontrar mi diario. Talvez no me conozca la persona que lo haya cogido o si ya lo tiró al Río Han, así que lo olvidé.

Era sábado y no tenía clases, mi madre mejoró, mi amiga Vanne me llamó para saber cómo iban las cosas aquí así que le conté todo. Solo hice que ella más se preocupara pero le tranquilice diciendo que todo ya mejoró. Hablamos toda la mañana.

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Llego lunes, tendría que ir temprano para llevar mis tareas que no presente el viernes, las tareas de hoy le pregunté a mi amiga para hacerlo y no perder notas. Estaba al día con mis estudios, llegue y me fui a mi mesa luego llegó el chico nuevo pero me miraba como si supiera algo.

Se sentó a mi lado ya que era su lugar y empezaron las clases, durante las clases el chico me veía como si me conociera perfectamente, eso hacia que me pusiera nerviosa pero no le tome importancia.

Las clases finalizaron y decidimos ir a la parada de bus con mi amiga, ella se fue y yo opte caminar, tenía que despejar mi mente. Iba caminando por las calles de Seoul hasta encontrarme con una librería, me llamó la atención y entre en ella, había muchos libros así que no desaprovecharía esa oportunidad para comprar un nuevo libro.

Era una de romance que se llamaba Hola extrano, me gustas, la buscaba por toda la sección de romanticismo hasta que la encontré, iba a cogerla pero alguien también iba a cogerlo. Voltee para ver quién era, me sorprendí al verlo, era el chico extraño, el chico del Río Han. 

Al parecer teníamos el mismo gustó porque los dos estábamos con nuestras manos alzadas a esa misma dirección donde se encontraba nuestro libro favorito.

Nos miramos fijamente, sus ojos eran marrones y tenía un brillo único en sus ojos que nunca en mi vida los había visto. No creía en eso del destino pero en esta ocasión mi forma de pensar cambio, nose si era el

¿Destino o coincidencia? H