Capítulo 10

— luz, vamos, tenemos que ir a buscarlo 

—co..corre « dijo casi in audible, su voz temblaba» 

— he? Luz, que sucede? 

Un frío recorrió todo mi cuerpo, un sentimiento de miedo, desesperación y angustia se instaló en mi pecho.

— Eli, debemos huir AHORA 

En ese instante luz tomo total control de mi cuerpo y corriendo a todo velocidad en la detección contraria de donde provenía ese exquisito aroma nos alejamos lo más que pudimos, llegamos a un pequeño claro y el aroma ya casi no se sentía así que decidimos descansar un poco, volví a mi forma humana, estaba realmente confundida 

—luz, que sucede? Por que huimos de nuestro mate? 

— aún no es tiempo Eli, además no entiendo pero realmente me da mucho miedo 

—miedo? Pero es nuestro mate, el no nos hará daño, debemos volver « dije dando media vuelta pero Luz me hizo detenerme en seco»

—luz, que diablos estas haciendo? 

— lo...lo siento Eli, pero no te voy a dejar, es muy peligroso.

—pe...pero luz, es nuestro mate, el no nos hará daño 

— Eli por favor, sólo debemos mantenernos alejadas, sólo por un tiempo, te lo Juro 

—y cuanto tiempo es eso?, sabes lo.miserable que fue mi vida, el podría ayudarnos.

— Eli, entiende por favor, te lo ruego debemos escondernos de el.

El tiempo pasó sin que nos diéramos cuenta, luz sólo quería salir de allí y alejarnos lo más posible y yo sólo quería saber el por qué he intentar convencerla de volver a buscar a nuestro mate 

— por favor luz, sólo quiero entender, que es lo que está pasando, ¿por que no podemos ir con el? 

— Eli, entiende, las respuestas que quieres yo no las tengo ni te las puedo dar aún, ahora sólo deberi........«se quedó callada» 

— luz? Que pasa? 

— diablos, me descuide, corre, hay que irnos RAPIDO 

— pe...pero...

— por favor, sólo hazlo « su voz temblaba y se podía notar su miedo, enseguida entendí el porque, el aroma ahora era bastante fuerte, mucho más que antes» 

Estaba dispuesta a salir corriendo cuando un gran peso callo sobre mi dejándome completamente inmóvil, era un lobo enorme, tres veces más grande que un alfa normal, tenía Sus patas apoyadas en mi espalda precionandome contra el suelo impidiendo cualquier movimiento.

En un intento fallido de fuga logre quedar boca arriba viéndolo directamente, su pelaje negro, tan negro como la misma noche y sus ojos amarillos que me indicaban que quien controlaba en ese momento era lu lobo, estos se posaron sobre los míos y poco a poco acercó su nariz a mi cuello mandando una especie de descargas eléctricas por mi cuerpo, al sacar su cabeza de mi cuello sus colmillos crecieron y apuntaban directamente a mi cuello, estaba dispuesto a matarme sin ningún remordimiento.

Un sudor frío subió por mi cuerpo y al mismo tiempo un dolor, irá, agonía y sufrimiento se enfrentaron en mi pecho dándome un sentimiento de pesades que recorría toda mi alma.

— luz.... tengo miedo...