El Ermitaño

Hablando claro

 

 En un momento dado, Eduardo y Marianne tienen un rato a solas. Mamá, quiero pedirte por favor que no invites reporteros, la vida de mi futura esposa corre peligro, ya han atentado contra su vida en varias ocasiones, no quiero correr  ningún riesgo. Marianne con preocupación pregunta. ¿Quién quiere matarla?, ¡por Dios!. Tiene enemigos, porque ella rescata niños de manos de maleantes que comercian con ellos y de pedófilos.

 

  ¿Y dónde están los niños que rescata?. Tiene una hacienda donde refugia a los niños rescatados que son huérfanos o no saben de donde provienen, a otros los entrega a sus padres.  Es algo que hace en secreto, en nuestro país tiene que andar disfrazada para no ser identificada.  Marianne se queda pensativa y luego dice. Es admirable lo que hace tu novia, ¿cuántos niños tiene en el refugio?. Pregunta. Tenemos 14 niños, eran 15, pero Junior quiza se quede a vivir con su padre.

 

 ¿A Junior también lo rescató?. Sí mamá,  es una historia muy triste, es un niño valiente que ha salido adelante, gracias a Dios pudimos dar con su padre,  él andaba buscando a su hijo como loco y ahora están recuperando su relación, así que ahora nos quedan 14 niños. Marianne se queda pensativa. Mi esposo y yo hemos planeado adoptar una niña y un niño, ¿será posible que podamos adoptarlos del refugio? 

 

 Sería genial, la encargada de la administración del refugio es Violeta y es también la psicóloga de los niños, le hablaré sobre tus planes,  y cuando tengas ocasión hablas con ella. Marianne abraza a su hijo. Gracias por venir a presentarme a tu novia, tenía que ser una gran mujer para entrar en tu corazón,  y después de este encuentro se que vamos a estar más unidos como familia y saldrán cosas muy lindas….y también me gustaría colaborar para la manutención del refugio.

 

 En ese momento llega Bella y Junior. Los andábamos buscando. Junior tira de la mano de Eduardo y Bella toma de la mano a su suegra. ¡Vamos, necesitamos a la pianista, aquellos hombres están cantando a capela!. Se reúnen con el grupo y Marianna se sienta al piano, Violeta quiere cantar está vez y pide una melodía, luego de acoplar su voz a la nota adecuada, canta como los angeles, arrancando aplausos de los presentes. 

 

 Marco la oye con admiración. ¡Esa es mi tia!. Grita Junior, al terminar todos aplauden. Cantas muy bien, deberías ensayar una canción para el día de la boda. Le dice Marianne. Marco se acerca a Violeta y la felicita. Me toca a mi. Dice Ranier, quién ya hace un buen dueto con la experta pianista que conoce su tono de voz, y canta una de su repertorio. El grupo pasa una hermosa velada, Junior se queda dormido en un sofá y Marco lo lleva en brazos a su alcoba, Violeta lo acompaña y abre la puerta, ella le quita los zapatos y Marco lo arropa y le da un beso en la frente.

 

 Salen sigilosamente para no despertarlo, en el pasillo Marco le da un abrazo y la besa con ternura. Cada día estoy más enamorado de ti. Pasa sus dedos por los labios de ella y la vuelve a besar, esta vez con pasión, la toma de la mano y caminando por el pasillo le dice. ¿Quieres ser mi novia?. Ella lo mira y le dice. Sii, quiero ser tu novia. Bajan las escaleras y Marco la toma de la mano.

 

 Bella los ve muy juntos y le dice a Eduardo en voz baja. Esos dos están enamorados, a él se le caía la baba viéndola cantar.  Eduardo sonríe y responde. Hacen una linda pareja, me alegro por ellos, incluido Junior. Bella asiente con la cabeza. Seguro que van a ser felices, son excelentes seres humanos, serán una bella familia. 

 

 Marianne coloca música y se sienta a hablar en medio de todos.  El conde viene con una bandeja llena de copas y la pone en la mesita del centro, cada quién toma una copa y Marianne brinda. ¡Porque esta amistad perdure en el tiempo!.  El conde levanta la copa y agrega. ¡Y que siempre pasemos momentos agradables juntos, como estos!.  De la cocina viene Salim con una gran bandeja llena de pasabocas. Esperen, yo también quiero brindar, ¡por nuestra Amistad!. 

 

 Alza la copa y brinda con todos chocando las copas. Ya es muy tarde cuando Marianne recuerda. Vamos a dormir, mañana tenemos que ensayar, buenas noches. Cada uno se retira a sus habitaciones. En la alcoba Marianne habla con su esposo. Mi amor, tengo una buena noticia que darte, la novia de mi hijo tiene un refugio de niños huérfanos, podemos adoptar nuestra pareja de hijos, tienen niños desde 6 años hasta 10, grandecitos como los queremos. 

 

 Es una gran noticia, ¿cuándo vamos a ir?. Después de la boda nos vamos con Violeta y los demás, ella es la que administra el refugio, además es la psicóloga de los pequeños. Me parece muy bien esposa linda. Marianne termina de limpiar su cara del maquillaje y se acuesta al lado de su esposo. En la alcoba Eduardo y Bella están hablando del mismo tema. Mi amor, le conté a mamá que tienes un refugio de niños huérfanos, y me dijo que ella y su esposo quieren adoptar una parejita de niños. 

 

 ¡Es muy lindo!, esos niños necesitan unos padres, sería feliz viéndolos encontrar familias amorosas. Tenemos que observar cómo se comportan con Junior, así sabemos si serán buenos padres. De niño fui muy amado, mi madre trabajaba como actriz y muchas veces me llevaba con ella, no quería pasar mucho tiempo alejada de mi.  Eduardo se queda pensativo. Mi amor, me gustaría que adoptaramos a Anita, ¿te gustaria ser la mamá de Ana?.



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En el texto hay: persecucion, secuestros, atentados

Editado: 03.09.2024

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