-Dia ya hablo con Urma y yo le platiqué a Luigi y a Nicandro, así que este fin salimos, te unes ¿Qué no? - pregunta Azar a Baldo mientras estaban en el cuarto que comparten.
-No sé, debo ver todavía como trabajo - le responde.
-Anda que será de noche y nadie te dirá nada si traes a la hija que los dueños. Ahora si, si a la chica no le da vergüenza juntarse con los que trabajamos.
Dándole la mirada que dice más que las palabras, le deja claro:
-Klarrisa no es la típica niña rica, además trabaja en el hotel si lo has olvidado y su mejor amiga se parece a nosotros.
-Entonces una vida doble de la princesa - concluye Azar.
Baldo decide no continuar con el tema y se dedica a terminar la cama.
-Ay, que buen smoothie - dice Martina sentadas las tres en el bar del hotel con la vista de la alberca y playa.
-¿Por qué estamos adentró cuando afuera hace tan lindo día? - pregunta con curiosidad Klarrisa.
-Ay, por favor no quieres, están en ese calor aquí, por lo menos aquí hay aire acondicionado - responde Joela.
Dejando a Klarrisa resignada continuar con su reunión.
-Ay Klarrisa querida - al oír que la llaman Klarrisa voltea a ver a la dueña de la voz. - ¿Sabes dónde está tu mami?
Gamelia Dometer la mejor amiga de su madre, como ella una mujer de estatus y prejuicios.
-No sé tía Gamelia dijo que hoy va a estar en el hotel.
-Si me lo dijo y a mí - dice Gamelia mirando al frente. - Bueno, la voy a seguir buscando - dicho eso se fue.
-¿Klars, vienes a la inauguración? - la pregunta Joela. - Todos estarán ahí, los que importan y los que no - expresando su desagrado facialmente por estar mezclada con las personas que no están de su mismo estatus.
-Si claro, debemos irnos a shopping - uniéndose a la conversación dice Martina.
A Klarrisa no le queda de otra que seguir sonriendo y acompañarlas.
-Hola amigo, ¿Qué haces? - desde la puerta pregunta Tulio Jimerez a su amigo de años.
-Aquí me ves trabajando - le contesta Reynaldo. - Entra.
-Pedí a Luisa unos cafés, ¿espero que no te molesta? - lo informa sentándose.
-No, para nada nos los tomamos mientras platicamos. ¿Qué hay contigo?
-Nada, apenas regrese de visitar a mi hija.
-¡A si! Ella se fue a estudiar fuera y ¿Cómo le va?
-Mejor de lo que me imaginaba. Esa feliz se adaptó bien a la ciudad y disfruta aprendiendo sobre su carrera - con felicidad y orgullo contesta Tulio.
-Óscar volvió...
-No me digas - con las cejas elevadas dice Tulio.
-Si, ayer lo traje al hotel... Gracias Luisa - se interrumpe para agradecerla cuando trajo los cafés. - Vino pasado ayer sin avisar.
-No te veo muy feliz por eso - comenta mirándolo.
-No es que no me agrada, pero sabes ya cuántas veces vino y pensamos que se queda para que el día después nos dijera que se va.
-Si te comprendo a mí también me da miedo ahora cuando la vi tan feliz ahí que decida no volver y yo que ya la extraño.
-A pesar de que Klarrisa trabaja en los veranos en el hotel y sigo teniendo la esperanza de que será él el que me sustituya.
-¿Entonces vendrás conmigo en el fin de semana? - la pregunta Baldo después de explicarle sobre la invitación de Azar.
-No se Baldó, hay una inauguración de la que no me puedo escapar - de mala gana le responde.
-Bueno, ven después - le propone ilusionado.
-No creo que el vestido que termine comprando con Joela y Martina será el indicado para salir con ustedes - con humor le explica.
-Puedes cambiarte o pregúntale a Ingrid que te presté algo.
Klarrisa no puede no reír a su propuesta, preguntándolo:
-¿Tú has visto lo que viste Ingrid?
Confundido por la pregunta, Baldo la mira todo perdido mientras intenta recordar las veces que se encontró con Ingrid que llevaba.
-Top y shorts - terminan pronunciando en el mismo tiempo Baldo y Klarrisa.
-Sí, es su estilo, diría que solo las pijamas le son completos.
Baldo hace una gesto con los labios que deja claro que está sin ideas.
-Me lo pienso y te aviso lo que logré inventar - le dice Klarrisa intentando animarlo.
-Así que no de qué hacer, ya me estoy distanciando demasiado de todo ese mundo y no quiero imaginarme que pasara si alguien se da cuenta. De otro lado, si quiero salir con Baldo y quien sabe puede ser conocer su equipo solamente que...
-No sabes cómo estar en dos lugares a la vez - la Interrumpe Ingrid agregando lo que le faltaba decir.
-Si, ¿me ayudas? - tomándola de las manos.
Ingrid pregunta, entorna los ojos preguntando:
-¿Exclusivamente para eso te estoy útil, para pedir ayuda?
-N-no. Ingrid. - la pregunta acusadora toma a Klarissa tan de sorpresa que le detiene el cerebro.
-Es broma - rompiendo a reír dice Ingrid. - Sé que no es así si lo fue no estaríamos aquí tomando el helado - agrega tomando del cuenco con la cuchara poco del helado.
-No es chistoso - dice sería Klarrisa con la voz entre triste y enojada.
-Mira, si los tuyos no van a estar presentes les puedes decir que te duele algo e irte con Baldo - enfocada en el tema propone Ingrid meseando las rodillas por tener los pies apoyadas en el borde de la silla.
-No sé si van, no obstante podría funcionar. ¿Y la ropa? No puedo con un vestido de gala irme con ellos.
-Hmm. ¿Cuándo es ese evento?
-Al sábado, en las nueve de la noche.
-Ok, déjame checar algo - le dice Ingrid mientras saca su celular. - Me la puedes traer y te la guardo en la moto, yo trabajo en el sábado y cuando sales te la puedo entregar - después de pasarse mirándolo unos minutos le dice.
-¿De verdad lo harías? - emocionada pregunta. - Únicamente que no es nada cerca uno del otro - información que la hace perder la emoción inicial.
-Para mí no es problema - contesta Ingrid.
-¿Ingrid, hablas de salirte del trabajo o que yo venga a ti?, podría pedir un taxi como sea, no tengo como a casa.