“El más pequeño de los gatitos, es una verdadera obra de arte y como tal, hay que cuidarlos”
Abigail ahora dormía allí algunas veces y Míster Fritz tenía compañía con Ash, ese fue el nombre que se escogió en redes y hacían todo un alboroto el departamento, persiguiéndose mutuamente.
“Vuelve acá oscuridad”
“Atrápame si puedes, viejo”
Los cojines que adornaban el departamento estaban en el piso y Brian al salir vio todo el relajo:
—Son solo dos gatos y parece que hubiese cien…
Abigail salió con una taza de chocolate y miró todo:
—Es normal, así es cuando se tiene mascotas.
Ash tiró un jarrón:
—¡Ese jarrón me lo dio mi madre!
—Cálmate, Ash no seas malcriado.
“Si él puede tirar algo, yo también”
Míster Fritz tiró un portarretrato de Brian al suelo:
—¿Tú también?
“Oye men, cuidado con el colerín”
—Escucha me piden presentar a un gato vivo, pero puedo presentar a un garo disecado.
La joven comenzó a limpiar y le dijo:
—Ellos son como niños, les encanta jugar y no se miden.
Él sacó un periódico:
—Les daré las últimas noticias de un porrazo en el trasero.
La joven le explicó:
—Ellos no aprenden así
Tomó a Ash de arriba del cuello y lo llevó al desastre y le dijo:
—Eso no, eso no se hace.
“Ya entendí, mena”
Salió corriendo y se metió debajo de la mesa.
—Ya comprendí…
Fue detrás de Míster Fritz que se dio cuenta de la intención y corrió de su amo:
—¡Detente ahí gato!
Corrió a la habitación de Brian y se escondió en el armario:
—¡Sal de dónde estés!
Abigail lo tomó del brazo:
—Tenle paciencia.
Se sentaron a tomar un chocolate caliente mirando por el gran ventanal que allí tenían.
—Es una buena vista…
—La tenía mejor… Concuerdo es una buena vista.
—¿Cuándo te toca ir a presentar a Míster Fritz?
—La semana que viene, espero que Cats y Dogs, le guste cómo está.
—Sé que le gustará, lo tienes bien a pesar de todo.
Ella lo besó en la boca y él le dijo:
—Ya deseo que termine esto, en verdad… Ha sido el contrato más complicado que he tenido.
Ash se acercó a ellos y se subió a su dueña y se recostó en su regazo, ella sonrió conmovida:
—Mi negrito…
—Bola de pelos terrorista—lo acarició él.
Míster Fritz asomó la cabeza y los vio sentados mirando por el ventanal, su amo estaba en modo pasivo y se acercó con cautela y Brian lo miró:
—Ahora vuelves como si nada.
“Paz, men, paz”
Se subió y se recostó en medio de los dos:
—Reclama su lugar.
—Un golpe es que le voy a dar por alocado.
El gato lo miró con su cara de enojón y él le dijo:
—No me intimidas.
Terminó acariciando al gato que ronroneó, ellos rieron de verlo tan alegre.
Kelly daba vueltas por la sala de la casa de su padre y su esposo le decía:
—Ya tengo una propuesta para Cats y Dogs.
—Déjame ver…
Ella tomó los bocetos y no le gustó:
—No tienen pasión.
—El que tiene que decirlo es el señor Cats y Dogs, no tú.
—Conozco como piensan esos sujetos, les gusta que les den don por su lado.
—Pues, es lo que hay.
—Esfuérzate por conseguir ese contrato.
Clark le dijo a su esposa:
—Sin el gato nada de lo que hagamos funcionará, no conozco al animal, no he tratado con él…
—¿Eso qué mierda tiene que ver?
Clark le explicó a su impaciente esposa:
—¿Cómo puedo presentar algo decente sin conocer al prospecto?
Entonces ella le dijo molesta:
—¿Quieres al maldito gato?
—Más o menos o tener un gato para ver cómo son.
Ella se cruzó de brazos y le dijo a su esposo: