“El problema con los gatos es que siempre tienen la misma apariencia en su cara, ya sea que vean o a un asesino con un hacha”
Paula Poundstone
El lugar estaba lleno, se estaba sirviendo unos suculentos piqueos de queso y jamón, se acercaron al bar y le preguntaron que se servían, entonces Brian le dijo al Bar Tender:
—Ella toma un Sexo en New York, ¿verdad querida?
—Es cierto.
—Déjeme, yo se lo preparo.
Dio la vuelta y le dieron los instrumentos y le iba contando:
—Claro que me acuerdo que es tu favorito, recuerdo que te chiflaste con la serie y cómo se veía el coctel y tuve que aprender a hacerlo.
Ella sonrió, no se olvidaba de ella…
—Necesitamos Vodka, Cointreau, un poco de zumo de arándanos, un toque de limón, hielo—lo colocó todo en una coctelera y comenzó a agitarlo con fuerza.
Verlo hacer eso le pareció sexi, todos lo miraban con atención, se robaba las miradas, Brian siempre fue así de especial, todo un showman.
—Usamos una copa de Martini—tomaba la copa ya preparada con una rodaja de limón a un costado—y tenemos un delicioso trago fresco y vibrante.
Todos lo aplaudieron y él les hizo una reverencia y Kelly encantada le dijo:
—Todavía tienes el toque para llamar la atención.
—No estoy muerto, Kelly.
Ella sonrió y le dijo:
—De eso me doy cuenta…
—Creo que lo del gato me hizo poner los pies en la tierra…
Eso la incomodó.
—¿En serio? ¿Tanto te afectó?
—Nunca tuve una mascota y ese gato se me fue metiendo en el corazón y ahora me siento vacío.
—Y lo del contrato…
—El dinero se puede hacer, el amor viene por añadidura…
—¿Estás enamorado?
—Tonteo con alguien…—comía una nuez—no tan serio como lo tuyo con Clark, todavía no lo creo, ¿Clark?
Ella entonces le explicó:
—Clark me gustaba, no sabía cuánto hasta que…
—¿Te comenzó a coquetear el maldito?
Ella se rio y le respondió:
—Lo nuestro era una atracción… Estaba flotando y luego se hizo visible.
—Como las costillas… Flotantes.
—Algo así… sentí que debía de hacer algo, antes de…
—¿Equivocarte?
—Antes de casarme contigo y hacerte sufrir más de lo que sufriste.
—¡Qué considerada eres!—lo dijo con fingido pesar.
Entonces ella bebiendo de su coctel le dijo:
—¿Querías que fuera después? Sorprenderme en una escena con tu mejor amigo… Fue mejor así.
Colocó su mano con firmeza en la mesa y ella se sobresaltó:
—Siempre admiré tu espontaneidad, de hecho es tu mejor encanto… Actúas por impulso, lo sientes y ya—se acercó a ella de forma seductora—siempre tú…
Ella se sintió inquieta y murmuro:
—Me conoces tan bien…
—Creo que hasta sé lo que piensas…
—Sorpréndeme.
Él entonces le comentó:
—Estás cavilando en tu cabecita, ¿por qué es tan lindo conmigo si no lo merezco?
Ella bebió de su copa y entonces le respondió con una sonrisa:
—Bingo…
—No lo mereces, es cierto, pero te veo y quiero odiarte, juro que deseo odiarte con todas mis fuerzas–acercó su mano a su precioso cuello—y te veo así de bella y sería una maldad privarle al mundo de una bella rubia sexi.
—Eres, eres lindo…
—Lo sé…
Entonces comentó:
—Brian, siento que me he equivocado a lo mayúsculo contigo, no vi todo tu potencial… solo me dejé arrastrar por lo que sentía y no medí las consecuencias de mis actos.
Se acercó mucho a ella, para que percibiera el perfume que usaba porque ese aroma le encantaba a Kelly, ella lo percibió, era muy seductor, miró su anillo y recordó que era casada y comentó:
—Soy casada.
—Y yo no soy celoso…—acarició su rostro—soy muy… liberal, comprendí que amar es compartir.
Kelly rio por lo que decía y entonces comentó:
—Clark no sabe de eso…
—Clark no está aquí… Lo que no se ve no duele, te lo digo por experiencia.
Ella se apoyó en un codo y lo tomó de la corbata:
—Entonces quieres una aventura… ¿Y después?
—Más tarde… El recuerdo, me centraré en mi proyecto.