Capítulo 4

-Calma, calma, soy yo- Susurra Stefan.

- No deberías estar acá- Le espetó mientras abro de nuevo el libro en cualquier otra página.

- Es un lugar público…-Dice Stefan y yo me levanto para retirarme y él toma de mi brazo y me dice -Solo bromeo,  siéntate,  necesitamos hablar de algo serio.

- No quiero,  estoy muy ocupada- le digo tomando de nuevo el libro.

-Si quieres, sólo tienes miedo- Hace una pausa -Necesitas ayuda y quiero ayudarte, déjame hacerlo- Me indica Estefan.

- No quiero nada que venga de ti, sólo aléjate de mi y de Wesley con eso ayudas mucho, gracias- Le digo en todo de orden y me alejo de la biblioteca.

A unas cuadras de la Universidad,  siento que alguien me toma de la cintura y pasa una de sus manos a mi boca, cuando despierto estoy en un habitación pequeña que parecer ser una jaula, tiene una cama con una única sábana, una luz grande que está deteriorada dando sus últimas iluminaciones, y en vez de 4 paredes, son 4 grandes vidrios oscuros, me acerco para mirar a través de ellos y hay un espacio demasiado grande afuera con muchas máquinas que no sabría explicarme que función tienen, pero el lugar es tranquilo y solo.

Ya llevo muchas horas aquí,  he gritado y golpeado esos grandes muros de vidrio y nadie parece ayudarme. No tengo ni mi teléfono,  ni mis documentos ni las cosas de la Universidad, al parecer estoy secuestrada y justo cuando he terminado con Wesley, yo debería estar con él, en estos momentos.

-Hola señorita Bessler- Dice un tipo uniformado y con lentes oscuros.

-¿Qué hora es? – Le preguntó.

-Ammm,  por el tiempo no se preocupe, su patrocinador si debería preocuparse- Me espeta con una sonrisa de medio lado. -Aliméntese señorita Bessler, está noche es el segundo round- Deja un plato hondo, con un poco de arroz, un huevo frito y algunos plátanos, en un orificio con apertura ancha de mi jaula y se retira a pasó firme.

En una esquina hay una cámara viéndome e intento gritarle por un par de horas más, al rato llega otro tipo con el mismo atuendo, me acerca un frasco con agua, me obliga tomarla a prisa y se lleva el frasco, minutos después,  llegan dos hombres más,  diferentes, entran a la jaula, me quitan la ropa, se ríen entre sí de mis marcas y me colocan un traje, me tapan los ojos y me sacan de la jaula, caminan a prisa, todo es silencioso, muy silencioso, me quitan la venda, se ríen entre sí de nuevo y cierran la habitación, me volteó y hay un tipo bastante grande, pasado de tragos sin zapatos, sentado en un sillón que me señala que debo acercarme a él,  me aferró a la puerta, implorando ayuda, y siento que toman de mi cabeza y la golpean contra la puerta, al otro día, a la madrugada estoy tirada a unas cuadras de la Universidad con algunos billetes de estos tipos, con mi ropa y mis cosas de vuelta.

Llegó a mi apartamento y Rosy me grita.

-Bessler, 17 horas desaparecidas, ¿Estabas con Wesley? -Pregunta Rosy muy enojada.

-Si estaba con él- Le gritó y corro a mi habitación.

Mi móvil suena y es Wesley, le contestó.

-¿Quiénes eran esos tipos Dornes?- Le reclamo.

-¿Por qué crees que yo sé algo?- Indica Wesley.

- Porque Rosy  te llamo y le asegurase que yo estaba contigo- Le espeto muy segura porque lo conozco bien.

-Okey, okey sí,  esos tipos los conozco, les debo un dinero y le estoy pagando contigo- Me indica.

-¿Eso es todo? ESO ES TODO! ¿Qué crees que soy?- Le preguntó con mucho enojo.

-Chiquita, es tu castigo por romper conmigo, yo le debo dinero a ellos, tú me debes cariño a mi, entonces, las deudas se saldan; es todo- Hace una pausa, mientras escucho su respiración- Vete acostumbrando o sino, la muy fácil  vuelve conmigo y portate bien y le digo a ellos que pagaré esa deuda de otra forma, ¿Qué dices mi vida?- Lo dice con voz de consuelo.

-Muerete Wesley Dornes- Le esfumó y cuelgo la llamada.

A la mañana siguiente, Wesley me espera en la entrada de la Universidad, Rosy me convence para seguir con ella pero Wesley me toma del brazo y súplica hablar conmigo, parece muy arrepentido y me quedo con él.

-¿Qué quieres Wesley?- Le digo con lo poco de dignidad que me queda.

-Vuelve conmigo, chiquita- Me súplica- Por favor.

- ¿Por qué haría de hacerlo?-Hago una pausa mirando fijo sus ojos-lo que haces conmigo es asqueroso, dices amarme pero me entregas a otros tipos… ¿Esa es tu forma de amar?- Sigo fija en su mirada.

Danna y Mary pasan por nuestros lados y me dan un gran empujón, Wesley me sostiene fuerte, me suelta y las enfrenta.

-Ustedes dos, van a dejar quieta a mi novia, dejarán de molestarlas,  que les quede claro!!- Les indica Wesley.

-¿Qué sucede si hago lo contrario?- Danna lo enfrenta.

Wesley toma de su brazo izquierdo y lo aprieta con mucho esfuerzo, Danna se queja y Mary pide que suelte a su amiga en señal de súplica, Wesley la suelta y fulmina con una mirada a Mary.

Mary, toma a Danna, me ofrece disculpas, obliga a Danna a hacer lo mismo, ella obedece y se alejan de nosotros.

Los amigos de Dornes se acercan y nos felicitan, me abrazan todos, y me desean lo mejor con Wesley, a lo que él me mira con esa mirada tan tierna para que le perdone, y le sonrió,  él me abraza fuerte y da suaves besos en mi cuello, susurrando cuánto me quiere, mi cuerpo descansa sobre el suyo, y es nada más lo que necesitaba .