Historia faltó, como ya sabía que sucedería, al parecer algunas cosas cambian con respecto a mis acciones, y otras simplemente continúan igual. La directora entró a la clase para dar el anuncio de algo que se me había pasado por alto este tiempo, ¿Por qué no me di cuenta? Dios, eso me pasa por olvidar las cosas que creo que no son importantes.
—Bueno, lo diré rápido, en unos tres meses habrá un concurso de pintura, cada uno debe traer más de cinco cuadros hechos por ustedes mismos, y él o la que gane tendrá la posibilidad de poder mostrar sus pinturas a un grupo de gente bastante importante. Los cuadros deben tener un comienzo y un final, eso quiere decir que tendrán que relacionarse entre ellos —¿Por qué demonios se me pasó eso por delante? Uno de los dibujos que hice tenía la fecha de tres meses, eso quiere decir que algo pasará allí.
—Una pregunta —Digo a diferencia de la anterior vez, tiró su cabello corto hacia atrás y esperó que la diga—. ¿Eso se hará en una exposición? ¿No?
—Sí, el ganador mostrará sus pinturas en una exposición —Responde, ahora todo tiene sentido, tengo que estar presente en aquella exposición cueste lo que cueste.
Salimos de clase y junto a Natsuki caminamos hacia la parada, en el camino como la anterior vez Hiroshi nos frena y nos pide hablar en la cafetería, suspiro y asiento. Ya sé que quiere.
Nos sentamos en una de las mesas disponibles, justamente la misma de la otra vez y espero a que él hable, cuando lo hace Natsuki se nota bastante emocionada por la idea, pero yo no lo estoy, no quiero que pase lo mismo que la anterior vez. Sí, realmente me gustaría volver a encontrarme con Takeshi, pero… estoy seguro que ni él asistirá a aquella fiesta, si es que aún me recuerda, eso espero.
—Una fiesta —Dice Hiroshi, veo que Natsuki tiene una sonrisa en su rostro, no otra vez.
—Una fiesta... —Repito suspirando, esta vez cambiaré las cosas, no es no.
-Vamos, por favor -Pidió mi mejor amiga, negué con la cabeza.
—Lo lamento, pero tengo cosas que hacer —Respondo, la verdad es que sí tenía algo que hacer, y era lograr que la historia no se repita una vez más.
Nos encontrábamos en la cafetería. Natsuki, quien estaba delante de mí junto a Hiroshi suspiro al escuchar mi respuesta. El chico de cabello rubio fue quien dio la idea como la otra vez, ya que según dijo él no quería ir solo a la fiesta de un familiar suyo, pero lamentablemente esta vez lo tendrá que hacer.
—Por favor —Pidió de nuevo, miro primero a él y luego a ella, quien tenía ambas manos unidas en forma de plegaria, niego con la cabeza.
—No quiero ser aguafiestas pero enserio tengo algo que hacer esta noche —Respondo, Hiroshi asiente, y Natsuki se mantiene unos segundos en hacer una cara para que cambie de idea, pero no lo hago, no tropezaré con la misma piedra dos veces sabiendo que esta traerá varios problemas en mi vida.
—Lo entiendo, no hay problema, nos vemos mañana —Nos sonríe a ambos y se larga del lugar, Natsuki espera a que se vaya para luego alzar el ceño.
—¿Qué tienes que hacer de importante a la noche? —Pregunta, suspiro, ¿Le mentiré? No sé si decirle o no sobre todo lo que me pasó, realmente no lo sé.
—Pues… —Intento buscar una excusa que sea aceptable—. Me quedaré en casa mirando películas, no tengo muchas ganas de fiestas a decir verdad.
—Kazuo, tú nunca tienes ganas para fiestas —Bromea, a decir verdad era real así que me reí junto a ella.
Salimos de la cafetería y esperamos al padre de Natsuki, quien se tardó más o menos unos quince minutos, todo sigue igual que antes, aunque intente cambiar las cosas. La diferencia es que ahora no iré a aquella fiesta, y Natsuki tampoco, por lo cual eso cambiará el transcurso de la historia ¿No? Tal vez si no me hubiese pasado lo del hilo esto hubiera tomado este camino, quién sabe.
Cuando veo que Natsuki se va en el auto con su padre, suspiro y camino hacia la parada en la cual me tomo el bus de regreso a casa, espero que este llegue y me subo a él. Me siento en uno de los asientos junto a la ventanilla, y observo por esta, es hora de cambiar completamente el transcurso de la historia.
Agarro mi teléfono y busco el instagram de Saori, quien obviamente aún no seguía, lo hice y le mandé un mensaje.
Yo:
Saori, hola, soy Kazuo. Seguramente no me recuerdes, ya que vine del futuro, o bueno, viajé al pasado al romper el deseo que pedí. Sé que solo creerás este mensaje si te digo que no pude leer la mitad de tu libro porque desde ahí las hojas se encontraban vacías. Logré arreglar todo, solo necesito hablar contigo, saber si tú te acuerdas a quién viste en la dirección. Alguien te mandó un mensaje con una dirección de un lugar muy importante para ti, y tenías sospechas de que sea esa persona, y al parecer por tu tono de voz sí te encontraste con ella.
Necesito ayudarte a encontrar a esa persona, te lo debo, Saori.
Suspiro y mantengo mi mirada en la ventanilla, solo es cuestión de suerte como la anterior vez. No obstante a diferencia de la otra vez, en esta Saori no se tarda en responder, vaya milagro.