Universo: Desconocido
Ubicación: Gran Biblioteca Espacio Tiempo
Mientras que Calista acaba de intervenir en la reunión de sus futuros enemigos, por otro lado en uno de las muchas habitaciones de la gran biblioteca espacio tiempo; se encuentra Monlix sentado en una silla junto a una gran mesa de madera, observando sorprendido cierto libro, ya que acaba de descubrir un secreto bastante importante.
—Excelente —dice Monlix en voz baja, añadiendo—. Así que el supremo creador definitivo: Tsubaki; tiene a un familiar con ese rango de supremo, jejeje.
Empezando a invocar un hechizo por medio de sus manos, pero lo cancela repentinamente, tal parece que algo acaba de impedírselo.
—No… —dice el anciano, dirigiendo su mirada hacia su derecha seriamente, añadiendo—. Si uso mi magia en este lugar, de seguro los encargados del cuidado del edificio de Tsubaki se van a dar cuenta.
Empezando a levantarse de su lugar mientras que carga el libro en una de sus manos, para enseguida invocar un portal por medio de sus manos en silencio.
Abriéndose un extraño portal de forma circular de color negro mientras que el anciano se dirige hacia este, traspasando dicho portal Monlix para aparecer enseguida en un terreno bastante oscuro y abandonado.
Tal parece que se encuentra ahora en un nuevo planeta desconocido, donde la luz solar no llega para iluminarlo, alrededor del planeta se encuentran miles de estrellas que brillan a lo lejos.
Comenzando Monlix a caminar por unos momentos, para enseguida; sentarse en el suelo con cuidado mientras que carga el extraño libro.
—Llegó la hora de observarlo, hmm, así que él se llama Carlos Alberto (*), excelente —dice en voz baja Monlix, comenzando sus ojos a brillar fuertemente de color azul mientras que el extraño libro se abre, añadiendo—. Planeta Tierra considerada como el planeta Pilar, hmm, un humano que no le gustan los problemas, ¡jajaja, veo que posee a un demonio para controlarlo!
Logrando ver Monlix que existe un demonio disfrazado de vaquero con ropas negras (*) quien le hace casi la vida imposible a Carlos Alberto.
—Qué extraño —dice Monlix, pudiendo ver que Carlos Alberto logra derrotar a su enemigo en varias ocasiones, pero simplemente el supremo creador definitivo lo encierra en un portal celda cada vez que lo derrota.
Empezando Monlix a recordar cierto evento del pasado.
—¡Esto es extraño y bastante sospechoso! —grita Monlix, viendo que el creador supremo definitivo del Sur vuelve junto con sus aliados a la “normalidad” hacia el planeta pilar mientras que su archienemigo está encarcelado, añadiendo—. ¡¿Por qué no lo asesinó como lo iba a hac…
Callándose en ese momento, ya que acaba de recordar algo.
—¡No, esperen! —grita Monlix, dirigiendo su mirada hacia el suelo mientras que su hechizo se elimina para volver el estado de sus ojos a la normalidad, ya que el libro se cierra—. ¡Ese incompetente es magnánimo con su archienemigo, pero es bien astuto, ya que si él lo asesina; dejará de existir!
Empezando a levantarse seriamente de su lugar, puesto que su mirada la dirige hacia arriba.
Logrando él ver que una estrella fugaz se da a conocer desde lejos, para seguidamente desaparecer de forma extraña.
Comenzando a dirigir su mirada hacia el suelo nuevamente, ya que recuerda algo especial.
—¡Ahora entiendo por qué este incompetente es molestado por ese insignificante demonio! —grita Monlix, comenzando a caminar por unos momentos hacia su alrededor, añadiendo—. Sí, es por eso; entonces.
Decidiendo pararse en su lugar para dirigir su mirada nuevamente hacia arriba; seriamente.
«Los rumores dicen que es imposible que un humano del planeta pilar pueda hacerlo, pero ahora con los detalles de este incompetente, solo existe una razón, una respuesta a todo el misterio del ser supremo creador definitivo: Tsubaki. Sí, es lo más probable, ya que él estuvo a punto de asesinar a su archienemigo en el pasado »,piensa Monlix, dirigiendo su mirada hacia el suelo—; «Los rumores dicen que existió un evento por el cual, el supremo creador definitivo: Tsubaki, estuvo a punto de asesinar a su archienemigo en el pasado sin ningún problema, un evento que obligó a Yahvé y a muchas más deidades a intervenir para evitar este asesinato, ya que Tsubaki le había destrozado el cuello, le había mutilado sus manos y piernas con gran facilidad, pero… ¡Ha maldita sea, realmente él se apoderó de toda la esencia maligna y benigna de todo su ser desde un principio, decidiéndose manifestar su esencia maligna por completo sin ningún problema! », comenzando Monlix a ver el suelo enojado—; «Los rumores dicen que el insignificante demonio que capturó Yahvé es solo una milésima parte del poder que posee este maldito supremo y eso nos conduce a una respuesta para poder obtener ambos poderes sin ningún problema que es…»,quedándose callado por unos momentos Monlix, para añadir—. ¡Haber nacido muerto desde un principio!
Comenzando a sentarse asustado mientras que dirige su mano derecha hacia su boca pensativamente y nervioso, ya que empieza a meditar bastante el asunto de dicho supremo, ya que sus ojos empiezan nuevamente a brillar fuertemente de color verde.
—Si realmente él nació muerto y resucitó milagrosamente, gracias a la intervención de Yahvé y los doctores. Eso quiere decir que en el momento en que él murió, su esencia o lado maligno se unió a él, ya que se consideraba como un ser muerto, alguien que no tenía un propósito en el planeta pilar, pero como resucitó se quedó con ambas esencias. Poseyéndose él de ambas mientras que Yahvé intervenía para arrebatarle a su lado maligno, pero las cosas no salieron como Yahvé esperaba y solo pudo quitarle una milésima parte de su poder maligno, predominando su lado maligno con gran facilidad que su lado benévolo. Logrando darse cuenta Yahvé del asunto, pero se percató que iba a tener un familiar de la justicia o benigno como muchos los conocen, ahora ya sé por qué Yahvé dejó a ese incompetente demonio encarcelado que no sirve para nada en una de las muchas prisiones de Lucifer —informa Monlix, dirigiendo su mirada hacia su lado derecho—. Es por eso que él pudo controlar a todos los dioses malévolos con gran facilidad en el pasado, derrotándolos y humillándolos él en poco tiempo. Ahora entiendo que Tsubaki es un ser bastante peligroso que obligadamente, yo necesitaría convertirme en un ser supremo creador definitivo para poderlo enfrentar —dirigiendo su mirada hacia el suelo enojado—. ¡Maldita sea, tiene ambas esencias y la fuerza de más de catorce dioses malévolos dentro de sí o más! Un supremo creador definitivo que el mismísimo Yahvé no quiere involucrarse, ya que tiene la confianza de su familiar del sur, aunque no le gustan los problemas.