Día del testamento

Jack y Mey se quedaron hablamos toda la noche sobre la primaria, la secundaria y las cosas que hicimos, de si Mey era la reina del drama y Jack el nerd de la escuela, se burlaban de lo Distraída que soy ya saben el bullying normal entra amigos.

— Despierten dijo May, tenemos que desayunar.

— Cálmate, dijo Jack

—Cuanta energía, replique

—Hoy vendrá el hijo de tu abuela y muero de curiosidad dijo Mey

—Nada raro dijo Jack, tú siendo curiosa

Nos levantamos desayunamos y Jack dijo que si podía usar mi baño le dije  que sí.

Mientras Jack tomaba un baño, la madre de Mey llamo pidiendo que cuidaras a los gemelos, los hermanos de Mey 8 años menor que ella así que se fue a la carrera.

Justo cuando Mey salía llegaban. Dos hermosos hombres muy parecido entre si uno más viejo que otro. Los vi y supe que era el Sr Alfred pues tenía los mismos ojos que la abuela Magda. El me miró y sentí lo mismo que la primera vez que la vi a ella.

—Hola, tu amiga me dejó pasar.

y salí de sus ojos que me recordaban a la abuela —si pasen dije

—soy Alfred y este es mi hijo Axel

—Hola, dijo sin ninguna expresión en su cara, sus ojos eran parecido a los de la abuela, pero se veían vacíos eran como  tristes.

—Puedo usar tu baño? dijo Axel de manera espontánea dije —Claro el segundo Cuarto a la derecha.

—Siéntese señor Alfred

—Claro, solo dime Alfred

 — Lo intentare.

—¿Qué te pasa? escuché una voz del segundo piso

—¿Qué te pasa a ti?

—Mierda, dije salio de mi boca casi expontaneo, si era una costubre que ni la abuela logro quitarme, cuando sentia una emocion nueva las palabrota salian de mi tal cual camionero.

Recordé que Jack estaba en ese baño y cuando subí a todo galope Jack y Axel está parado uno frente al otro nunca en mi vida vi dos enemigos más naturales.

— ¿Nunca tocas antes de entrar? dijo Jack sin camisa con una toalla en la cintura

—Hasta dónde entiendo, ella vivía aquí sola, pero veo que no. Me miró y siguió hablando —wao primita tú no pierde el tiempo.

—¿Que dice idiota? replicó Jack.

—Solo que está aquí para ayudarla con su luto. y su mirada inexpresiva de repente tenía un brillo malicioso y agresivo

—Es solo mi amigo Jack y no hay porque dar te explicaciones.

—No hay razón primita no te enojes.

—No soy tu prima idiota. replique

—Hay que calmarnos dijo Alfred subiendo las escaleras, Axel baja ya mismo.

—Claro papá.

—Perdón Layla y —Jack —Jack, Axel puede ser un poco brusco a veces. Me disculpo.

— Ya veo, la sangre no hereda los modales.