Aveces los seres humanos somos tan extraños hasta el punto de que no queremos que se acaben los días,pues para mi hoy era uno de esos días,el cual quiero que se repita una y otra ves.
Mañana antes de las siete de la mañana Lucas debe tomar un avión para viajar a Italia y volver dentro de dos semanas,hoy era mi último día con el hasta que el regrese,pueda que las personas me llamen exagerada por que solo son dos semanas,pero sin el yo siento que son dos mil años.
Me eh acostumbrado tanto a su presencia, a que este conmigo la mayoría del tiempo, a su vos, a su manera tan única de hablar, me eh acostumbrado tanto,pero tanto a él, que pasar mínimo dos semanas sin el se me hacen una eternidad.
Otra razón por la que no quiero que se vaya es por que sé que se sentirá solo y no quiero que llegue a el ese sentimiento de soledad de nuevo, haré lo que sea necesario para que la felicidad no se vaya de su rostro.
Aveces es necesario sufrir un poco para darnos cuenta lo dolorosamente bonita que es la vida,pero aveces unos sufrimos más que otros y pienso que es demasiado por lo que Luck a pasado.
-¡Ela! -El grito hizo que diera un leve brinco en mi lugar,volteé con cara de asesina al reconocer su peculiar voz y ahí estaba el con una sonrisa de lado y con cara de inocencia y que yo que tengo tiempo de conocerlo se que esa cara no le queda ni de mentira.
-¡Neal cuantas veces te eh dicho que me vas a matar con tus gritos!-Le recordé.
El venía hacia mi negando levemente con la cabeza,acto que me hizo girar los ojos en forma de irritación por que ya me tenia harta el y los sustos que me daba, antes de que llegara a mi lado me di la vuelta para empezar a caminar pero sentí unas grandes manos que me sujetaban por los hombros,impidiendo mi paso.
Sí era el.
Me volví para quedar cara a cara con el, su mirada demostraba diversión.
No me cansaré de decir lo idiota que llega a ser.
-Venga ya deja de gritar que me vas a dejar sordo.- Habla el que cada que me llama grita. -¿Quieres ir a los columpios? Di que sí,di que sí.
Comenzó a sacudirme levemente por los hombros,si quedó mareada juro que su bonita cara quedara manchada de sangre, luego de unos segundos me soltó,me miraba con cara de gato con botas mientras esperaba una respuesta de mi parte, gire los ojos. Lo tomé de la mano y empecé a correr en dirección a los columpios.
-Aveces me asustas belle.
-¿No eras tú el que quieria venir a los dichos columpios? -Pregunte entre jadeos aún sabiendo la respuesta.
Silencio.
No respondió, solo podía escuchar nuestras respiraciones agitadas gracias a que íbamos corriendo,tengo tanto tiempo de no correr, llegamos a los dichosos columpios lo primero que hice fue soltar la mano de Lucas y poner mi mano derecha sobre mi pecho respirando profundo para intentar normalizar mi respiración.
El como todo un niño pequeño Lucas se subió al columpio como si tal no hubiese corrido.
Yo también quiero esa resistencia.
Yo me quedé tratando de normalizar mi respiración mientras observaba como el se divertía como todo un niño pequeño. Quisiera que esa sonrisa nunca se borrara de su lindo rostro, se ve aún más hermoso con ella.
El sol ya se estaba escondiendo, el cielo está teñido de color naranja y un poco de rosado, una combinación extraña pero única y hermosa.
Los domingos para mi no eran los mejores días de la semana, pero en esta si que lo son, me estaba divirtiendo de una manera tan extraña que me hace tan feliz.
Quite todo pensamiento de mi cabeza, por el momento solo quiero disfrutar lo último que queda de este domingo, camine la poco de distancia que me quedaba para llegar al columpio, al llegar rápidamente me senté en uno que estaba al lado de Luck.
Comencé a mecerme de atrás hacia adelante mientras mantenía mis pies elevados.
-¿Te cuento un chisme? - Le pregunte a Lucas, el mencionado me miro con cara de confusión y de diversión al mismo tiempo.
-Eso no se pregunta Evans.- Comentó Lucas.
Era de esperarse.
-No se por que no te había contado esto antes...bueno si se pero se me olvida. ¿Me entiendes?
-Si Ela te entiendo.-Hizo un ademán con la mano que acababa de soltar de la cadena para sostenerse.
-Pues resulta que mi madre me contó hace unos cuantos años, siete u ocho para ser más específica de que yo había nacido antes de tiempo.
-No pues si se nota, al parecer tu cerebro no se termino de formar bien.
-Vos naciste a los nueve meses incluso te pasaste de tiempo, naciste a lo natural y tal parece que tu cerebro no funciona completamente. -Le guiñe un ojo, el rodo los ojos.
Estallamos en carcajadas, me seguía meciendo pero lo hacia con bastante intensidad que ya empezaba a marearme, no quiero terminar con dolor de estómago así que cuando me mesia hacia adelante me lanse al suelo. Para mi suerte caí de pies.
En tu otra vida fuistes gata.
Me senté en el pasto, frente a Luck quien aún estaba en los columpios, el me miraba atentamente esperando que dijera algo.
-¿Entonces? -Escuche preguntar a Lucas.
-Entonces resulta que como ella nunca fue al ginecólogo durante el embarazo, vos sabes por falta de dinero y esas cosas, nunca se dio cuenta de que sexo era yo hasta el día en que yo nací.
-Hice una pausa y tomé una bocanada de aire. - tampoco sabía cuánto tiempo llevaba de embarazo, con decirte que ni siquiera mi propio supuesto padre sabe que nací antes de tiempo.
-Tu mamá seguro y sufrió bastante en el embarazo.
-Sí y antes de que yo naciera ella iba a tener un hijo varón, el sueño de mi padre se iba a hacer realidad, resulta que gracias al maltrato de mi padre hacia a ella, perdió al bebe.
-¿Ves como eres un propósito? Con algún fin veniste a este mundo Ela, todo lo que tuvo que soportar tu madre para que tu nacieras, eso ya lo había planeado Dios a la perfección.
-Ni lo dudes Neal, me dijo también que en su momento sufrió pero cuando se dio cuenta de que estaba embarazada de mi su alma se alegro, no fue mucho tiempo después, yo fui como aquella vela que alumbraba su vida en ese momento.