¿Hermanas?

***Gabriela***

Otra noche sola en casa, otra noche en la que no puedo dormir. Aun siento el sabor de sus labios impregnado invasivamente en los míos. Me toco los labios con los dedos de forma lenta y suave y recuerdo la delicia de haber probado los labios de Luke completamente en contra de mi voluntad.

¡No puede ser!

Siento que me volveré loca si esto sigue. Luke él… es demasiado, no sé cómo lidiar con eso, nunca tuve que hacerlo, nunca me habia sentido atraída por un chico, siempre lo más importante para mí, fueron mis estudios, mi carrera, mi trabajo, pero ahora que tengo que ver un poco más la realidad, esta me ha jugado sucio.

Me ha dado un duro golpe porque ahora tengo que enfrentarme a estos sentimientos, ese temblor que me recorre cada vez que siento su aliento tan cerca de mí, y me hace estremecerme. No sé cómo lidiar con ese olor que me hipnotiza.

¿Qué me está pasando?

Quisiera creer que solo me tiene atrapada bajo sus encantos de niño bonito.

¡Papacito!

Pero no es solo eso, hay mucho mas allí, hay una extraña sensación, una que jamás espere sentir, y es que me da como cosquillas en el estómago, quizás a eso se refieren cuando hablan de mariposas en el estómago, pero… no lo sé, Luke, él… es muy extraño, no se absolutamente nada de él.

Por un lado parece dulce, pero por el otro es un completo patán. Por un lado es un bombón irresistible que se aprovecha de su atractivo físico, y por el otro es un hombre caballeroso y amable.

¿Quién eres Luke?

Quiero saber más de él, pero como hacerlo, acercarme es peligroso, es arriesgarme a caer en sus encantos, es arriesgarme a ser desestabilizada por esa carita tan… ¿Qué voy a hacer?

¡Creo que tengo que despedirte querido!

¡Si! Debería despedirlo, si no lo hago seria problemático, ya me dio un beso y… sigo chillando como colegiala emocionada en mi cabeza, de verdad no puedo creer que me besara. ¿Qué rayos ve en mí?

¡Mañana no tengo nada importante, necesito despejarme!

Tomo uno de mis pinceles, levanto un lienzo, coloco algo de música, y dejo que mi imaginación vuele a son de firestone de Kygo. La música combinado con un baile que se suscita desde lo más profundo de mi cuerpo, un pincel y un lienzo son el ingrediente perfecto para despejar mi mente.

Puedo sentir como mi cuerpo se mueve lentamente al principio de la canción, pinceladas perfectas generadas entre mis dedos. El ritmo de la música cambia, todo se hace más emocionante, un poco más movido. Ya me sumergí en ese mar de sensaciones, ya no puedo parar mi cuerpo al son de esta música que hace que me mueva de la manera más relajada y rítmica posible.

Detengo mis pinceladas, el ritmo cambia de nuevo, me alejo del lienzo, y mi cuerpo se adapta a la nueva tonalidad, de nuevo viene ese chispazo de corriente que me recorre de la cabeza hasta los pies, unos de mis mejores bailes, una de mis mejores noches, una de mis mejores pinturas.

Basta un poco de música para que pueda olvidar lo que me agobia, pero esta noche, me estremecí mientras bailaba y sentí cada hebra de mi ser estremecerse por el recuerdo de esos labios carnosos.

La canción cambio, está sonando way down we go, mi corazón late al ritmo de la batería, mi cabeza y mi cuerpo se mueven al ritmo lento de la tonada que se suscita y se mete dentro de mí, el ritmo se hace más volátil, lo siento, lo disfruto, lo bailo y lo expreso. Mi arte, mi expresión.

Pienso en él, no puedo evitarlo. Lo conozco hace tan solo unos días, pero quiero saber más sobre él, cada tonalidad ahora me recuerda su rostro, maldición, ¿Por qué tenías que ser tan…? ¿Qué me hiciste Luke?

¡Creo que me hiciste brujería desgraciado loco!

Quiero sacarlo de mi cabeza pero no puedo, ¿Por qué no puedo? Quizá porque realmente no quiero sacarlo, simplemente quiero apreciarlo, es el primer hombre en el que me intereso, más aun, el primero que se interesa por mí.

¿En serio lo hace?

No lo sé, con él todo es impredecible, con él es difícil saber realmente lo que piensa o siente, es demasiado misterioso.

Mi velada termina con rude, de magic. Una canción relajante, me gusta su ritmo, me gusta su letra, no sé por qué pero me gusta, es especial. Estoy agotada y ya no quiero seguir pincelando, ya no más, es hora de dormir, son las cuatro am.

¡Creo que no iré hoy a la oficina!

Si, mejor me quedare durmiendo, tratare de descansar, hace mucho que no lo hago, solo trabajo y trabajo, además, ahora esta Luke.