Capitulo 47

Estoy muy pero que muy enfadada, alguien me a traicionado y pero siendo sincera no creo que haya sido mi población, después de todo lo que han pasado por eso estupidos no creo que tiraran a mis hijos de carnada, Ethan puede pero mis hijos imposible, aunque tengo una larga idea de que la gente que vino para la ceremonia de coronación tiene algo que ver, averiguare quien pudo ser y colgare su cabeza en mi puerta como advertencia.

Entro al castillo y mi mal humor se nota desde lejos, nunca pero nunca me puse tan agresiva como me puse hoy, normalmente me divierto, mató algunos y el resto los envió de vuelta a su territorio pero esta vez no pude, se me fue demasiado la cabeza, ver a mis hijos ahí fue horrible, vale despertaron su lado de dios pero yo no quise que despertara así de la misma forma que yo hice, es algo doloroso y lo recuerdas toda la vida como sintiéndote culpable de lo que le pudo haber pasado a esa persona por el cambio de tu gran poder. Mis pequeños bebés que mal lo pudieron haber pasado viendo a su padre en esa situación, no se lo deseo a nadie en este mundo, esto que a pasado necesito borrarlo de su memoria seriamente sino nunca despertarán de la gran caída de sentimientos.

-¿Dónde están?- Digo algo nerviosa.

-Hija relájate.- Viene mi madre corriendo.- Después de llegar aquí y ver la situación se desplomaron, sabes cómo es eso, están en su habitación descansando, los deberías dejar sin molestarlos.

-Quiero saber quien pudo hacerle eso a mis hijos, una cosa es que se metan conmigo pero que se metan con ellos es pasarse demasiado, sabes que si nos hubieran hecho lo mismo a nosotros habrías hecho todo lo que yo hice.- le digo a mi madre señalando la puerta.

-Claro que lo hubiera hecho mi querida niña- Toca mi costado.- Pero soy más de maldecir y verlos sufrir lentamente como madre te entiendo mi amor, por eso te apoyare para averiguar quién fue el desgraciado que le hizo eso a mis nietos.

Abrazo a mi madre sin querer soltarla, aunque sea mi madre también ha sido mi amiga, es la que más nos entiende a mí como a mi hermana mayor, siempre hemos estado pegadas a ella pero desde que somos madres hemos necesitado sus consejos cien por cien. Fue la que nos dio los valores necesarios para llegar a donde estamos. Mi hermano siempre ha estado más pegado de mi padre pero cuando ha necesitado de mi madre ella siempre estuvo hay para él, por esa razón todos adoramos a mi madre.

-Pequeña- Viene mi padre hacía mi.- Conseguiremos descubrir quien fue, ellos estaban solos con Ethan en la habitación de juegos y no creo que él fue quien lo hizo, asique quítatelo de la cabeza.

-Papa en ningún momento pensé que era Ethan, al fin de cuentas puede haber sido malo conmigo pero son sus hijos y los lobos sienten las pérdidas de sus seres queridos padre.

-Descubriremos quién fue y le haremos pagar por todo te lo prometo. Ahora ve a lavarte y descansar, fue un día muy duro.

Asiento con la cabeza y me doy la vuelta para dirigirme hacia las escaleras. Las subo lentamente, estoy demasiado desganada, no me siento lo suficientemente bien, necesito una ducha urgente y tumbarme en la cama sin ninguna objeción. Entro a mi habitación, mientras me voy dirigiendo hacia el baño voy desnudando y dejando mi ropa tirada por toda mi habitación. Entró directamente hacia la ducha y pongo el agua lo más caliente posible y la mayor presión, quiero que limpie toda esta mierda de encima de mi y olvidar algo este día.

-Amor tu piel está demasiado roja no deberías poner el agua a esa temperatura aunque puedan aguantarla puedes dañar esta suave piel.- Dice Luca abrazándome por la espalda.

-Necesito esto para olvidar este maldito día, sabes cómo me sentí al ver a mis hijos, la impotencia de que les pudieran hacer daño.- Es hay cuando explotó y mis lágrimas comienzan a salir.- Esta presión que siento en el pecho no se va ni aun sabiendo que están bien, Ethan protege a nuestra hija, prefirió que se llevaran su vida antes que la de nuestra pequeña, esto que siento me duelo.

-Cariño, yo tambien me senti impotente cuando vi la situación casi nos peleamos tu padre y yo por no dejarme ir hacia ti, me dolió no poder ayudarte, se que aveces quieres protegernos a todos pero debes entender que también debes darnos la virtud de estar contigo en cualquier momento. Soy uno de los grandes demonios y sabes que ni millones de legiones podrían hacerme ni un rasguño, no tengas ningún miedo mi pequeña mariposa.- Me da la vuelta para mirarlo a la cara.- Siendo sincero estoy muy agradecido de que Ethan haya protegido a la niña aunque no sea mi hija sabes que la trato como si fuera parte de mi y me hubiera dolido si hubiera pasado algo peor. El infierno se había levantado desde lo más hondo.

Aunque no lo parezca Luca siempre me a apoyado, cuando llegué por primera vez al inframundo casi nos matamos, él no aceptaba que yo fuera la auténtica heredera, pensaba que solo era una falsa, hasta que se demostró quien era superior a quien, al fin de cuentas los demonios sintieron a que le pertenecía el trono, cuando vio el panorama decidió marcharse para no generar más conflicto.

PUM!! PUM!!

Los golpes en la puerta cada vez son más fuertes y con más ganas, algo está pasando y no me gusta nada. Salgo de la ducha rápidamente, me rodeo con una toalla y me dirijo rápidamente a la puerta.

-¿Qué está pasando?¿por qué tocas con tantas ansias la puerta?- Le digo a mi hermana con algo de enfado, supuestamente necesitaba descansar porque estoy reventada y ahora viene esta a molestarme.

-Sabemos quien entrego a tus hijos y a Ethan a esos alas blancas.- Me puse a temblar sin razón alguna, las ganas de muerte vuelven aparecer por mi sangre.

-Vamos.- Digo apunto de salir de mi habitación hasta que siento una mano que me coje del brazo.

-Esperate, vístete y luego bajas, ellos ya están bien relájate.- Dice Luca tocándome la mejilla.- Quien haya sido sabe que no se puede escapar si no, no solo sufrirá él o ella sino también toda su estirpe.