Capítulo 21: Una ventana.

Son las 3:43 am, aún no reconcilio el sueño... Todo lo que pasó hace algunas horas, toda esa adrenalina acumulada en cortas secuencias, me está volviendo loco. Claro, también el acto más cruel de la noche, haber partido las piernas a un anciano maniático... Me preguntó que estará haciendo Rose sin mi presencia, abra traído a aquel muchacho a casa... Lo más seguro es que sí... Lo mejor ahora mismo será no pensar en eso.

Odio estar despierto por las madrugadas, los recuerdos y pensamientos de mierdas tienden aparecer. Estar así, en la plena oscuridad se siente tan solitario, que pareciera que la vida me estuviese vacilando con MIS MALDITOS TRAUMAS DE MIERDA.

CARAJO.

Debo calmarme, no puedo dormir... Necesito pensar en otra cosa." Una leve idea se repite en mi cabeza "Kyle y Amy" 

Ambos se fueron a dormir hace un par de horas, se despirieron de mí como personas cordiales, sin antes, traerme una almohada y una manta para poder dormir en este sofa.

Finalmente decido levantarme del sofá, termino sentado sobre este, lo positivo de dormir aquí es que cubre el tamaño de mi cuerpo por completo, no es tan incómodo como parece. Esta almohada es algo plana, bueno, que decir... No me pierdo de mucho, he dormido en peores lugares.

La única ventana que tiene este lugar, se encuentra abierta, no me había percatado de eso. Con razón hacía bastante frío, más de lo normal. Tomó un leve respiro y me paro del sofá con la idea en mente de cerrarlo, estoy descalzo pues no pienso ponerme las zapatillas para volver a quitarmelas al regresar aquí. Me acerco a la ventana con cuidado, ya que el estrecho lugar, es un peligro total. Intento no tocar ni el estante que está a mi derecha y ni el escritorio que está a mi izquierda, llevan muchas cosas encima, un movimiento en falso podría causar la destrucción de esta sala.

Llegó a la ventana a duras penas, y me reposo sobre los marcos de metal. El ambiente es tan fresco y a la vez acogedor. Mientras veo por las vacias calles de Óleo, me hago una pregunta tan sólida y específica.

¿Cómo Kyle llegó a vivir justamente aquí?... Parece tener dinero el hombre, pero vive en un zona peligrosa y poca llamativa. Imagino que debe ser una larga historia, pues no estoy al tanto de su vida desde hace 7 años, pero podría sacar posibles conclusiones pero todo sería tan incierto.

Es curioso como las decisiones que tomamos, siguen un camino tan diferente a lo que alguna vez creíamos ser. Ahora que lo recuerdo tras pensar esto, es que yo me arriesge aquella vez al decirle todo lo que pensaba y sentía a Rose, hubiese sido tan fácil quedarme callado y dejar pasar toda esta historia que hemos forjado juntos. Di... digamos que fue la primera vez que pude contra mi cobardía. Lamentablemente sigo siendo un cobarde.

Puedo sentir como alguien abre una puerta de este pequeño departamento.

-¿Tom?.-Amy se acerca desde la oscuridad hacía mi.

Verla tan desordenada me causa algo de gracia, creo que nunca la he visto de tal manera.

-Aja.-Vuelvo mi atención a las desoladas calles.

-Creí que estaba soñando.-Tienes los ojos entre cerrados, parece que aún no sale de su trance nocturno.-Verte parado ahí me ha dejado un poco con la piel de gallina.

-No te lo niego, también me asustaría de verme parado justo aquí.-Siento que se está comportando un poquito más tontilla de lo normal.-¿A qué se debe de que te hayas levantando a esta hora?

-Queria ir al baño, pero me has dejado media desconcentrada.-Se sienta en el sofá dónde hace un rato me levanté.-¿Porqué sigues despierto?

-He dormido por la tarde, y recién lo recuerdo.-Me rascó un poco la cabeza, pues si estoy menso.-Igual y sabes que no necesito dormir tanto como para sentirme con muchas energías.-Es raro comentarle esto, está confianza es algo del pasado.

-No lo dudo.-Tiene una pijama muy suelta, y su cabello es un desastre.-¿No te sienta mal ir como un murciélago viendo por la ventana?... Hace mucho frío, Tom.

-Tienes razón, pero ¿Qué que puedo hacer mientras tanto?.-Levanto un poco los hombros.-Me distraigo con lo que veo.

-Pero algo mejor que eso, sería poder conversar conmigo, reconectar todos esos años sin vernos. Que se yo...-Su tono es medio sarcástico.-Sientante conmigo y conversemos un poco.

Hago caso a su invitación, cierro las ventanas y vuelvo al sofá. Me siento a lado de ella y me acomodó un poco más al asiento, sé que será una charla algo larga.

-Fue triste no tenerte los siguientes días de haber terminado.-Me toma por sorpresa este comentario.-Lo siento si soy algo directa, pero tengo que tirar todo esto de encima.-Se ríe para aliviar un poco la tensión.

-Lo mismo digo.-¿Me veo en la capacidad de conversar como una persona madura?...Es posible.-Sonará estúpido lo que diré, intenté buscarte un par de veces después de eso. Me abstuve de hacerlo, porque sabía que de alguna u otra forma volveríamos a lo mismo de siempre.-Giro a verla al rostro y veo que no le gustó mucho lo que dije.

-¿Crees que yo he sido el problema todo este tiempo?.-Malinterpreto mal las cosas.

-No, no... Yo era realmente el problema. No me veía capaz de estar en una relación.-Y creo que nunca lo estaré.-No quería que terminará así, en serio, te amaba. Pero nos estábamos haciendo mucho daño.-Su rostro se entristece e intenta desviar su mirada a la mía.-Y lo siento por ser un imbécil casi la mayoría del tiempo.

-Éramos unos chiquillos Tom, no sabíamos manejar nuestras emociones... Sin embargo tienes razón, usualmente después de discutir, caía en una tristeza inmensa, y me sentía insuficiente...-Pobre, ahora entiendo lo egoísta que fuí.-No te quiero dar lastima, pero realmente necesitaba conversarlo contigo. Al menos verte junto a mi... Me alivia el saber que estamos bien después de todo.

-Eso no justifica mi comportamiento de mierda, lo lamento Amy...-Reposa su mano sobre la mía, pero no siento ese típico cosquilleo de hace mucho.-No soy mucho de ir contando lo que pienso, pero esto lo amerita, nos estamos confesando al parecer.-Ella sonríe.