Y es que ya no puedo llamarte vida, por que cariño, para mi ya estás muerto.
Y no puedo llamarte mío, por que ya volaste hasta otros brazos.
Y no puedo llamarte amor mio, por que ya no eres ese amor que me llena y satisface.
Y tampoco mi amor, por que no soy la dueña de ese amor...
Y entre más te pienso más se que ya solo eres olvido, veo tus ojos pero no tu mirada, recuerdo tus labios pero no su sabor.
Se va apagando el fuego de nuestro amor, mi alma se enfría y ahora entiendo todo, necesitaba el frío de tu cuerpo para saber que para mi ya moriste, necesitaba olvidar tu olor y sabor para saber que fue hace mucho, necesitaba tener el alma asi... fría, inerte e insensible para que mi propia pureza y fuerza me calentara y me reviviera.