"Es mi novio", no esto no puede estar pasando, no no no. Él es mío, sigue siendo mío igual que siempre. Él no está con ella, él no la pudo haber elegido.
Eso fue lo que pensé cuando la realidad me golpeó en la cara. Sentí un vacío en mi pecho que no creí que pudiera existir. Yo no merecía eso, no merecía que me causará tanto dolor, no merecía ese sufrimiento. Pero parece que a él no le importó nunca lo que pasó entre nosotros.
El dolor fue tan intenso en un primer momento que no pude ni siquiera llorar, quedé en shock, eso no podía estarme pasando a mi. Pasaron unos minutos y dejé de sentir dolor, fue como una especie de anestesia deje todo sentimiento fue como si estuviera vacía, totalmente vacía.
Creo que merecen saber esto, todos deben saberlo porque necesito que alguien sepa que esto fue real, que mi amor por él perdure por siempre, creo que será difícil expresarles todo lo que sentí pero sé que descansare cuando acabe de escribir esto.
Nuestra historia empezó hace 1 año, el día después de su cumpleaños, ese 6 de abril que me pareció mágico, un largo día, sábado, había estado trabajando todo el día en el restaurante de un amigo de mi papá, en ese entonces tomaba turnos de mesera para sacar un poco de ganancias propias, eran fechas especiales y de verdad estaba agotada, iba a quedarme en casa de mi tía para un almuerzo familiar que haríamos el día siguiente, David estaba ahí, como no, no tenía muchos amigos que digamos y bueno era un chico sensible, falto de carácter, demasiado delgado, introvertido y siempre había estado a la sombra de sus hermanos.
Creí que sería un día cualquiera, estábamos en su habitación los cuatro, mi prima menor: Lina, mi primo mayor: Alejandro, David y yo. Hablábamos de pendejadas, nada es demasiado serio cuando apenas tienes 17 años, soy menor que David por 5 meses, él acababa de cumplir los 18 y creía que se comería el mundo, se desaparecido la noche de su cumpleaños y a la mañana siguiente llegó borracho, durmió toda la tarde hasta que yo llegue, a las 7 pm.
Pasaron las horas y a las 10pm Alejandro perdió su lucha contra morfeo, y a Lina la llamaron sus padres para volver al apartamento a pocas calles de la casa donde estábamos, es gracioso porque toda mi familia vive a pocas calles a excepción mía que vivo un poco más lejos, en el centro de la ciudad. Entonces, por fin, David y yo quedamos solos y seguimos contándonos cosas sin sentido, no recuerdo esa conversación pero jamás olvidaré uno de sus comentarios:
-Si no hubiera techo podríamos ver las estrellas, ven, mira las estrellas conmigo- también recuerdo que me reí y le dije que no, no quería. Pero a él no le importó mi negativa, me atrajo hacia si y aunque me resistí él era mucho más fuerte que yo así que ganó en el forcejeo y me beso.
Oh por Dios mi primer beso, con el chico que me había gustado desde que tuve memoria. Fue increíble, tan dulce, y tan inesperado. Sus labios eran tan suaves, y su lengua jugueteo tiernamente con la mía. Lastimosamente terminó y él se levantó como si hubiese hecho algo malo. Se sentó en la cama y me dio la espalda, entonces me di cuenta que tal vez se había arrepentido, seguí su ejemplo, me senté a su lado y espere, no dijo nada, así que me recoste en su hombro, pasaron varios minutos hasta que él me miró y no se de donde saque suficientes fuerzas para avalanzarme hacia sus labios, fue increíble, mejor que el primero y cuando acabó nos miramos y sonreímos, mis gafas habían desaparecido en algún lugar de su cama e hicimos bromas torpes mientras las buscábamos.
Me sentí tan especial, feliz y confundida. Pero había algo más, miedo, miedo de que él pudiera decirle a alguien lo que pasó, miedo de que no le hubiese gustado besarme, miedo de que todo fuera solo un sueño. Pensé que aún era muy temprano pero parecía que todos ya querían irse a dormir, escuchamos las voces de nuestros padres, nos miramos y supimos que teníamos que hacer, me ayudó a bajar del camarote como un príncipe azul bajando a su damisela del carruaje y me arrinconó contra la pared para volver a besarme, de solo mirarlo me temblaban las rodilla, pero me siento tan orgullosa de lo que hice mientras me besaba, me zafe de él y salí de la habitación dejándolo ahí solo, triste y con un anhelo de ser amado.
Se lo que estarán pensando, fui cruel, y no lo negare, tal vez debí haberle correspondido el beso aunque de haberlo hecho nuestra familia se hubiera dado cuenta porque cuando salí de la habitación me di de bruces contra mi tía.
Todos nos fuimos a dormir sin más pero en mi mente no podía dejar ir el recuerdo de la pequeña travesura que había llevado a cabo ese día, me acoste y dormí feliz, tan feliz que hoy me parece irreal.