2 - Una gran noche buena.

Viernes 24 de Diciembre.

Gran castillo de Arendelle.

8:00 de la noche.

La profunda oscuridad de las tinieblas se había apoderado completamente de todo el inmenso y nevado reino de Arendelle, provocando con este simple hecho que la brillante luz de la luna fuera lo único que pudiera alumbrar al menos un poco la bella región, aunque a su vez dando la combinación perfecta para formar y brindar un gran ambiente lleno totalmente de magia.

En el tiempo actual, la fría temperatura había descendido notoriamente en toda la inmensa zona durante el transcurso del largo día, ocasionado que en este preciso momento la mayoría de las personas tuvieran que refugiarse completamente dentro de sus respectivos hogares, aunque al mismo tiempo sin impedir en los más mínimo que todos ellos pudieran celebrar la tan esperada noche buena, tratándose de una celebración que a pesar de las frías circunstancias jamás en la historia del reino sería cancelada.

Por otra parte, en las instalaciones del enorme castillo se estaba llevando a cabo ahora mismo la gran celebración para la respectiva família real de Arendelle, aunque a su vez también incluyendo a los numerosos y fieles trabajadores del magnífico reino, ya que la hermosa espíritu del hielo había organizado toda esta impresionante fiesta para poder celebrar con todos sus buenos ayudantes.

Natsu: Díganme, ¿cuánto apuestan a que puedo tomarme una botella de vino entera de un solo trago?.

Comentó el espíritu del fuego con una gran mirada traviesa, el cual a su vez se encontraba junto con tres jóvenes más.

Kristoff: En serio te puedes tomar una botella entera?.

Mencionó el pelirubio con un claro semblante dudoso, ya que realmente no sabía si creer las palabras dichas por su querido amigo de intenso cabello rosado.

Gaara: No creo que seas capaz de eso.

Habló el pelirrojo al mirar directamente al poseedor del elemento fuego a los ojos, provocando con esta sola acción que el pelirosa comenzará reír de una manera muy intensa, para después este mismo empezar a caminar lentamente hasta la enorme mesa repleta de exquisitos alimentos y refrescantes bebidas.

Natsu: Ahora sólo observen.

Pronunció el actual consejero real antes de tomar una gran botella repleta de vino, de la cual no dudo ni un solo segundo en comenzar a tomar rápidamente de ella, dejando a sus dos compañeros totalmente sorprendidos por ver como el pelirosa se bebía el vino sin ninguna sola medida.

Kristoff: O por dios...en verdad lo está logrando.

Decía el joven pelirubio con una enorme impresión al estar apreciando como el espíritu del fuego acababa rápidamente con el líquido color morado oscuro de la gran botella de vidrio.

Gaara: Pobre, lo van a asesinar.

Dijo el hombre de ojeras negras con una muy leve sonrisa en su mirada.

Kristoff: Porque dices eso?.

Gaara: Sólo observaba quién está detrás de él.

Al escuchar estas simples palabras, Kristoff realizó de una forma inmediata lo que su compañero de cabello rojo le pidió, de esta manera pudiendo ver como la hermosa peliazul se encontraba justo a un costado de su esposo con una mirada llena de total seriedad, además de estar también completamente cruzada de brazos.

Natsu: Terminé.

Comentó el pelirosa con un enorme orgullo al momento de alzar la botella totalmente vacía, aunque a su vez recibiendo una reacción muy diferente a la que él esperaba por parte de sus dos queridos amigos, ya que estos mismos simplemente se dedicaron en desviar sus respectivas miradas con un completo nerviosismo.

Natsu: Maldición.

Fue lo último que pudo decir antes de recibir un descomunal golpe en la cabeza por parte de su bella esposa de cabello azul, ocasionado con esta inesperada acción que Natsu cayera completamente inconsciente al frío suelo del castillo, aunque al mismo tiempo dejando a los dos jóvenes restantes con una mirada llena de total miedo por ver cómo su compañero había sido noqueado con una suma facilidad.

Mientras tanto, tres jóvenes más pertenecientes a la gran familia real de Arendelle apreciaban esta alocada escena con una sonrisa divertida en sus miradas, ya que era verdaderamente divertido ver como Juvia se molestaba con su esposo a causa de sus pequeñas travesuras, aunque a su vez sabiendo perfectamente que los dos espíritus se amaban de una forma muy incondicional.

Sasuke: Ese tonto, se comporta como un niño pequeño.

Dijo el pelinegro mientras continuaba burlándose por la tragedia de su amigo de cabello rosado.

Elsa: Sasuke...sabes muy bien que un rey no debe de burlarse de las personas.

Trató la pelirubia de reincorporar inmediatamente su compostura real, acción que le estaba resultando prácticamente imposible debido a lo gracioso que se veía el joven espíritu del elemento fuego.

Anna: Pues al parecer tú tampoco puedes aguantarte la risa hermana.

Descubrió la princesa al notar como la reina de Arendelle parecía estarse aguantando las grandes ganas de reír.

Elsa: Eso no es cierto.

Se defendió la portadora del hielo al momento de mirar a su querida hermana pelirroja con un semblante serio en su hermosa mirada, provocando con esto que la princesa simplemente comenzará a reír de nuevo con una suma diversión.

Sasuke: Tranquila, a Natsu no le importa en lo más mínimo si te ríes de él.

Habló el actual rey de Arendelle para después solo abrazar cariñosamente a su esposa por la zona de la cintura, provocando a su vez que Elsa simplemente se dedicara en disfrutar el cariñosos contacto.

Anna: Se ven muy bien los dos juntos, no hay ninguna duda de que fueron hechos el uno para el otro.

Comentó la hermosa princesa con una bonita sonrisa en su mirada, aunque al mismo tiempo logrando con esto que la pareja real de Arendelle se sonrojara levemente.

Elsa: Sabes, me gusta mucho.

Sasuke: ¿Qué te gusta?.

Preguntó un poco extrañado al notar como su amada esposa correspondía al fuerte abrazo.