G.L.A.M.M. Y.E.M.I.L. (otoño)

Capitulo 16. El ultimo mata dioses

Días antes…

—¿Dónde está…? Aquí—Ethan buscaba la caja dorada donde guardaba su daga plateada y su frasco rojo. Escuchaba unos pasos y se escondió rápidamente.

—¿Y seguro que está aquí? No creo que lo dejara aquí—Dijo Edith junto con Yuko.

—¿Y dónde está si no? En su habitación no lo hemos encontrado, y hemos buscado por toda la casa.

—Ya pero…

—Hola chicas—Dijo Daren subiendo por la cuerda.

—Daren, ¿qué haces aquí? Cuando Ilonka se entere de que has subido…

—Bajo esa regla nosotras tampoco deberíamos estar aquí, es su espacio privado.

—Bueno, está bien, ¿nos ayudas a buscar-lo? Lo que te dije ayer.

—De acuerdo—Los tres rebuscaron pero Daren encontró la caja dorada, Ethan los vigilaba atentamente detrás de un gran espejo. Al tocar esa caja Daren activó sus poderes de psicometría y lo vio todo, en general vio desde el momento en que tuvo que dejar a su hermana con sus tíos. —Em…—Lo vio al levantar la mirada. —Chicas.

—¿Qué pasa? ¿Lo has encontrado?

—No. ¿No sería más apropiado que estuviera en vuestra casa? Aquí no hay más que libros de meditación, papeles y lápices.

—Pues no lo entiendo, ¿dónde debe estar?

—Miraremos otra vez en casa a ver—Dijo Edith. Daren dejó la caja en el suelo mirándolo fijamente, solo le veía media cara porque la otra estaba tapada con el espejo. Y al dejarla bajó del árbol con Yuko y Edith.

Actualmente el 1 de noviembre del 2019.

—No sé cuanto más podre aguantar esto—Dijo mirando la daga plateada dentro de la caja, estaba sentado en el suelo con las piernas estiradas. —Esta vez no escuchó ningún ruido pero Daren entró en la torre del árbol.

—Si hubiera sido alguna de las chicas ya podrías haber echado a correr—Ethan se sorprendió no sabía cómo reaccionar. —Hablas ¿verdad? No serás algún ente diabólico ni nada ¿no?

—¿Por qué preguntas eso?

—Por la caja. Desde ese día que la toque no he parado de pensar en lo que vi, ¿realmente eres un mata dioses?

—¿Quién te ha dicho eso?

—La caja, te lo estoy diciendo. Tengo el poder de psicometría, cada cosa que toco puedo ver su historia, pero no entera porque requiere mucho poder—Dijo sentándose en frente suyo. —Tú también tienes poderes ¿verdad? Si eres un mata dioses debes de tenerlos.

—¿Sabes que son los mata dioses?

—Se poco, pero un día leí en un libro sobre mitos y leyendas que un mata dioses es una persona de descendencia muy peculiar que tenían un don, la daga plateada con la sangre de unicornio podía atravesar el corazón de un dios y matarlo para siempre sin tener la posibilidad de reencarnar ni renacer ¿es cierto?

—Vas por el buen camino. Yo soy el ultimo de mi familia, mata dioses solo son hombres y como tengo una hermana, ella no tiene ese poder.

—¿Qué pasa si lo hace un mortal normal? Lo de la daga y la sangre.

—No funciona, es como una daga normal, si la utiliza un humano normal hará el mismo daño como si fuera una daga normal, los dioses no morirán pero los humanos sí.

—Osea que tienes poderes al fin y al cabo, ocultos pero los tienes.

—Espero que nunca tenga que matar a ningún dios o diosa.

—No creo que exista ningún dios tan tonto o tonta como para retar a un mata dioses. Por cierto soy Daren.

—Yo soy Ethan.

—Un placer Ethan. Oye ¿escuchas eso? Parece un pitido ¿no? Es muy molesto.

—Es mi alarma, cuando le pasa algo a mi hermana siempre suena esta alarma, algo ha pasado y tengo que ayudarla, ha sido un placer conocerte a ti también pero me tengo que ir—Cogió su mochila con la caja dentro y bajó por la cuerda.

—Está bien, no te preocupes mata dioses…

Ethan corrió por el mismo camino que vino, entre los arboles seguía el sendero hasta llegar a la parte de detrás de una casa de madera, siguió su camino hasta llegar a un piso tocando las afueras de la ciudad Crisocola, subió al piso donde vivían sus tíos con su hermana y toco el timbre.

—Ethan ¿Qué haces aquí?—Preguntó su tía al abrir la puerta.

—¿Dónde está Sofía?—Preguntó entrando a la fuerza.

—No está aquí—Dijo su tío. Como siempre, él estaba fumando tan tranquilo, apoyado en la pared.

—¿Dónde está? ¿Que habéis hecho con ella?

—Si tanto te importaba ¿por qué no te la has llevado contigo?

—No podía hacerlo, sabéis perfectamente que no podía llevármela, ¿que habéis hecho?

—Molestaba mucho, todo el rato preguntando por ti, la hemos tenido que vender.

—¿Qué habéis hecho qué?

—Lo siento Ethan, pero no teníamos opción, no teníamos suficiente dinero y…



#26757 en Otros
#3602 en Aventura
#11352 en Thriller
#6382 en Misterio

En el texto hay: comedia, drama y aventuras, magia y misterio

Editado: 11.12.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.