Hoy en Rothenburg lo único que se hablaba era de una siniestra criatura que se encontraba en Ardennes, un bosque en donde ninguna persona en todos sus cabales se atrevería a entrar o estar merodeando.
Ese rumor estaba en la boca de todos los habitantes de Rothenburg, excepto en la de Grace Donnet, ya que, ella estaba tan sumida en sus propios pensamientos que no observo que alguien desde un callejón la observaba con unos ojos color amarillo brilloso. Ella solo estaba enfocada en llegar rápido a la universidad, en ese momento su lugar favorito.
Pov Grace
Hoy era otro día para nada interesante en Rothenburg, donde el panadero salía a vender su pan todo tieso, donde la diseñadora obliga a su nieta a limpiar la tienda, donde yo me encaminaba para ir al único lugar donde me siento feliz; la universidad. Te preguntaras ¿Por qué te sientes feliz en la universidad?, bueno ahí yo no tengo que recoger botellas vacías de alcohol, soportar el maltrato de mi padre o sentirme como una esclava. Siendo sincera hasta prefería vivir en la universidad que en una casa donde no me siento a gusto.
De tanto estar pensando en mi horrible vida no me percate que mi mejor amiga me estaba hablando y que ya estaba en la puerta de la universidad.
―¡GRACE TENGO RATO HABLANDOTE Y TÚ SOLO NO ME PRESTAS ATENCIÓN! ―me dijo… bueno me grito Emily casi cerca en el oído, dejándome completamente aturdida.
―Emily ya te había dicho que no me gritaras tan cerca del oído, sabes que lo odio ― le dije con cara seria ―. Y más cuando tu voz es muy chillona.
―Ya deja el drama Grace que ni te grite tan fuerte ― me lo dijo toda seria y luego empezaron sus odiosas y ruidosas carcajadas, se estaba riendo de mi tan alto que sentía las miradas de los estudiantes encima de nosotras
―Ya deja de reírte que todos nos están viendo Emily.
―Lo lamento mucho Gremy, es que tú cara de enojo da más risa que cualquier otra cosa ― siguió riéndose de mi hasta que tuvo que sostenerse la barriga.
Se preguntaran ¿Qué es eso de Gremy?, pues ese es nuestro apodo de cariño que elegimos desde que nos conocimos en preparatoria, Emily y yo siempre hemos sido muy unidas y no podrán creer que nuestro cumpleaños cae en la misma fecha, o sea el 09 de Octubre. Emily es una morena de ojos verdes claros y con algunos lunares en la cara. A veces dicen que ella y yo somos casi iguales, hasta dicen que parecemos hermanas por nuestro pequeño parecido.
―Si ya está bien, ríete de mi si quieres pero ya tenemos que ir a nuestras clases Gremy ―le dije sujetándola del brazo para entrar a la universidad.
Mientras caminaba con Emily sentía como si me estuvieran viendo muy fijamente, así que pensé que era cualquier otro estudiante, entonces gire y me fije que no había nadie más por los pasillos. Le iba a comentar a Emily pero ella también se había marchado a su clase seguro cuando voltee a ver quién me miraba.
Iba a seguir otra vez mi camino cuando sentí una especie de gruñido. Pero no me quise detener y continúe con mí camino, hasta que…
―Grace ―me detuve a escuchar mejor ― Grace ― esa voz estaba diciendo mi nombre, me gire para saber quién lo decía pero no había nadie en los pasillos.
― ¿Hay alguien ahí? ― pregunte con voz clara.
Nadie me respondió y en ese momento empecé a sentir un poco de miedo y quise seguir mi camino pero algo me empujo tan fuerte que me arrojo a los casilleros y me lleve un gran golpe en la cabeza. Podía sentir que en cualquier momento me iba a desmayar pero pude observar una gran figura de un hombre inclinarse y verme a los ojos mientras me acariciaba el cabello.
Y antes de caer inconsciente alcancé a escuchar algo que me dejo perpleja.
―Al fin serás mía y jamás te apartaras de mi lado.
Hasta el próximo capítulo