"El equipo se reúne nuevamente. Tienen una segunda misión y conocen a quienes serán los nuevos H. D."
Ya habían pasado los treinta días y el grupo volvió a reunirse justo durante la apertura oficial, un acto que se realizaba todos los años en la primera quincena de enero donde en el gran salón de conferencias hablaba el S1 “cabeza de la organización”. Un hombre de 54 años, noruego, estatura media, bien parecido con bigote y pequeños lentes, pelo ceniza y ojos celestes. A su lado, en silencio estaba S2, un hombre más alto y corpulento que su líder, de país desconocido, apenas dos años mayor que S1 y de piel un poco más oscura, con menos canas y más cabello y una prominente barba negra.
S1, dio la bienvenida a los nuevos aspirantes y a todo el personal, dictó las normas que todos debían seguir, "como no discriminar a nadie por su religión o color, sexo, dar la vida ya no por su país si no por el bien de la humanidad, cuidar la limpieza, etc". Mientras tanto Julie saludo a Alex.
—Ya era hora ¿dónde estabas? y ahora también eres actriz o qué —Mirándola soberbiamente esperando una respuesta.
—Hola, por empezar, llegué temprano, fui a saludar a mis viejos amigos y a dar la bienvenida a los nuevos reclutas y advertirles que no hablaran durante el discurso, que por cierto, es más largo de lo que recordaba, pero a qué te refieres con lo de actriz.
—Tu poder de deducción ya no es el mismo, lo digo porque tienes un estilo de la villana de una telenovela barata, aunque te queda bien el pelo largo y con bucles.
—Ey, yo no dije nada hace un mes cuando tenías tu cabello con ese alaciado que ya llevaba más de 7 meses sin retocarse, que bueno que te lo sacaste, me gusta más así, el rojo intenso te sienta bien, bueno era tu color de nacimiento, y adoro el corte bob con rizos.—Mirándola de arriba abajo— aunque creo que exageraste con tu vestimenta, algo ostentosa para mi gusto.
—Mira quien lo dice, gracias y si cambié mi estilo simple, por algo un poco más vistoso.
—Más de pasarela diría yo, es imposible perderte de vista querida, ahora calla que quiero escuchar el gran discurso. Y te doy un consejo, los colores más cálidos favorecen tus ojos verdes querida.
—Lo tendré en cuenta, Alex, sabes que no soy de maquillarme, solo que quise probar como me quedaban los colores fríos y bien oscuros.
—Será mejor que nos callemos están mirando raro, luego te dire unos trucos de maquillaje.
Pasó una hora hasta que todo el equipo se volvió a reunir, allí hablaron con S. 2, “el segundo al mando”, sobre una nueva tarea. Se trataba de otra misión de rescate; uno de sus miembros había sido secuestrado junto con aspirantes por una banda terrorista en Alemania. Según dijo Hayato,"un tipo joven, apenas mas alto que Álex, claramente asiático, de pelo negro y largo hasta los hombros pero siempre lo llevaba recogido, vestido con su traje H.D., en su espalda tenía al parecer dos tonfas. Era miembro de uno de los equipos de refuerzo y antiguo conocido de Alex", solo él pudo escapar y relató lo sucedido.
—Los aspirantes querían despedirse de los bellos paisajes de Alemania, por ello, antes de tomar el avión hacia la central, nos adentramos al bosque negro. Estábamos en la zona turística aunque ahora esa parte estaba cerrada por unos incidentes, que desconocíamos. De repente fuimos sorprendidos por estos terroristas, éramos 20 pero dos murieron, pude escapar gracias a Kiba y a los demás aspirantes. Al parecer los secuestradores creían que éramos militares o algún grupo de operaciones que habríamos descubierto su ubicación ya que uno de ellos dijo en inglés “cómo nos descubrieron”. Estoy realmente preocupado...
"Kiba", era el hermano mayor de Hayato, su verdadero nombre era Ryu, ambos eran muy apegados, siempre estaban juntos, se ayudaban mutuamente. Aunque a veces también se hacían bromas pesadas entre ellos, eran como un par de niños que merodeaban en la central. Ryu era el más serio, también, más alto y fornido, de cara risueña y risa contagiosa, a diferencia de su hermano, él solía tener el pelo sumamente corto, solo le colgaba una fina y larga trenza africana que nacía desde su nuca.
—No te preocupes, tu hermano y los demas estaran bien.—dijo Hikaru, con voz firme y protectora, dándole palmadas en la espalda a su amigo.
—Gracias, si... se que estaran bien.
En ese momento Max, tenía entre sus manos unas cajas que colocó sobre la mesa y dijo:
—Está bien, tranquilo, los vamos a salvar. Nuestra misión como verán, es rescatar a Kiba y los aspirantes. Se encuentran en el interior de la selva negra. Pero antes de ir, les daré un regalo, nuevos uniformes; son parecidos a los anteriores pero como nos explicara Luciano tienen cosas novedosas.
Luciano era un tipo rubio, de pelo alborotado, ojos verdes ocultos por sus lentes cuadrados, con marco semi grueso; alto, delgado pero atlético, vestido con ropa deportiva. Un hombre apuesto y llamativo, un rostro que no se olvida. Lanzó una gran sonrisa de satisfacción, dijo:
—Bien como ya dijo Max tienen casi el mismo formato que los anteriores, —mostrando los nuevos trajes, sacados de su empaque—, son negros y con sus respectivos colores distintivos según el rango, pero, pero, estos pueden soportar grandes extremos de temperatura; aún más que los anteriores, además de resistir mucho mejor los cambios de presión; les servirá si quieren nadar un poco, filtran mejor el aire; como los anteriores, vienen con un cinturón con compartimientos y lugar para hasta dos armas y municiones, son anti balas; además tienen refuerzo en las extremidades móviles, de una aleación metálica principalmente reforzadas en rodillas, ante brazo y codo, el cubrecabezas es más cómodo tiene con un refuerzo extra.
Editado: 16.10.2019