-¡Te vez bien, Kaname! -mire mi atuendo en el espejo, un sencillo traje de color negro con una rosa roja en el pecho.
-¿No deberías de estar lista? Pronto llegaran los invitados -pregunte, Hikari sonrió de manera leve.
-Estoy emocionada, ahora podre salir con Kaname sin ningún problema -los padres de Hikari decidieron utilizar su fiesta de cumpleaños para presentarme a la sociedad como uno de sus hijos, sin duda les había tomado aprecio y ellos se tomaron la libertad de adoptarme legalmente hace algunos días, ahora llevaba el apellido Leonheart junto a mi nombre-. Iré a cambiarme, no bajes sin mí -me señalo con su dedo mientras se dirigía a su habitación.
-Hoy seras oficialmente un Leonheart, Kaname-sama -sonrió levemente Arthur, a pesar que no nos lleváramos muy bien, eramos amigos-. En cierta manera te tengo envidia, poder bailar con la señorita.
-Deberías de pedir permiso para hacerlo tú también -propuse con una sonrisa, Arthur se sonrojo de furia.
-Que te den Kaname -fue todo lo que dijo después de golpear mi hombro y salir de la habitación.
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Los invitados comenzaron a ingresar a la gran mansión, los vestidos y trajes de gala se hacían presentes, poco a poco el gran salón se comenzaba a llenar, la música se hizo presente, el baile había comenzado.
-Zero-sama, Yuuki-sama, es un honor el tenerlos aquí -les saludo un hombre de cabello negro y ojos azules, el cual saludo a una pareja, la mujer era de un cabello castaño lacio y largo, con ojos café oscuro, mientras que el hombre era de cabello plata y ojos amatistas.
-Muchas gracias por invitarnos, Fugaku-sama, es un honor estar aquí -respondió la castaña, el hombre sonrió complacido.
-Imagino que este debe de ser el hijo de ustedes -menciono notando al chico de cabello plata y ojos amatistas detrás de ellos, muy parecido a su padre.
-Ah! Si, decidimos presentarlo a la sociedad el día de hoy -menciono con una sonrisa la castaña.
-Mucho gusto, Kiryuu Ren -extendió su mano la cual fue aceptada por Fugaku.
-Fugaku Leonheart -sonrió levemente-. Nosotros también hoy presentaremos a nuestros hijos, la menor cumplirá los diecisiete años, mientras que el mayor dentro de poco cumplirá la mayoría de edad.
-Cariño es hora -llamo su atención una mujer de cabello blanco y ojos dorados-. Disculpen la interrupción Yuuki-sama, Zero-sama -la pareja alzo la mano en señal de restarle importancia.
-¿Qué te parece? -pregunto el pelinegro mientras caminaba al lado de su esposa, la cual lo vio interrogante-. De Ren-san, hijo de Yuuki-sama y Zero-sama, seria un buen partido para nuestra hija.
-Eso no lo dudo, pero sabes que Hikari quiere a Kaname.
-Hikari no sabe lo que es amar, y no dudo que sea unida a Kaname, pero él ahora es nuestro hijo y no se vería bien ante los demás -la esposa asintió dándole la razón para después subir un poco las escaleras-. Su atención, por favor -la música se detuvo y los presentes volvieron a ver a la pareja-. Primero quiero agradecerles el haber venido a este baile -comenzó a hablar-. Segundo, este baile fue a honor de mis hijos, los cuales están pronto a cumplir años, y mi esposa y yo hemos decidido el presentarlos ante ustedes el día de hoy -los aplausos se hicieron presentes-. Les presento a mi princesa Hikari Leonheart y mi orgullo Kaname Leonheart -la pareja de Zero y Yuuki se volvieron a ver confusos al escuchar ese nombre, unos jóvenes comenzaron a bajar las escaleras.
-Kaname-onnisama -susurro la castaña sorprendida al ver al chico bajar con la peli blanca.
-¿Cómo es posible? -pregunto el joven peli plata detrás de ellos.
-Tenemos tres años de no saber nada sobre él, tal parece que los Leonheart lo adoptaron -menciono Zero pensativo, la pareja de jóvenes bajaron para después caminar al centro de la pista y comenzar a bailar una tonada-. Tras el despertar, Kaname debió de haber perdido todos sus recuerdos.
-Si mi hermana estuviera aquí no se que es lo que haría -la pareja miro en dirección de un pelirrojo y una rubia, los cuales asintieron levemente.
-Ren, se que no te pediría esto, pero desearía que nos consigas algo de información -menciono Zero al momento que le puso una mano en su hombro.
-Sí, padre.
-Debemos saber si es el verdadero Kaname-onnisama.
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-¿Estas nerviosa? -le pregunte a Hikari, ella estaba sosteniendo mi brazo con algo de fuerza.
-P-Para nada -trato de sonar segura.
-Les presentó a mi princesa Leonheart Hikari y mi orgullo Leonheart Kaname -empuje levemente a Hikari para ambos comenzar a bajar las escaleras bajo la vista de todos los demás.
Hikari y yo llegamos al centro de la pista para comenzar a bailar una pieza, los demás nos miraban con una sonrisa, los susurros no se hicieron esperar, la pieza se término y varias parejas se unieron al baile inmediatamente empezó otra, mientras que Hikari y yo nos acercábamos a sus padres.
-Estuviste perfecta, mi princesa -le abrazo Shigure.
-Tampoco lo hiciste mal, Kaname -menciono Fugaku al momento que palmeaba mi hombro-. Los dos tesoros.
-Gracias, Fugaku, Shigure -respondí con una reverencia, Shigure me abrazo.
-Ya deberías de decirnos papá y mamá -propuso con una sonrisa, sin duda Hikari había salido a su madre.
-Disculpen -llamaron nuestra atención, un peliplata de ojos amatistas se acerco a nosotros-. Me gustaría bailar esta pieza con Hikari-sama -extendió su mano ante la peli blanca, la cual me volvió a ver.