—Siento algo extraño con esos dos...-dice S
—Siento algo extraño con esos dos...-dice Sebas mientras come su manzana.
—Sí, ya entendimos, no le den más vueltas al asunto —digo mientras tomo mi leche que está fría, tal y como me gusta.
—Hola, chicos. —miro a la persona de la voz y es Jhonatan sonriéndonos con una bandeja de comida y Víctor a su lado— ¿podemos sentarnos aquí con ustedes? —sonríe y su amigo también. Miro al típico grupo de niños bonitos que hay en nuestra aula y los están mirando mal. Vi que estaban dispuestos a hablarles en cuanto llegaron al aula. Y es que sí son bastantes guapos, para que decir que no.
—¿Por qué no se hacen con ellos? Estarían mejor que con nosotros. —digo tranquilamente esperando a que se vayan.
—No son nuestro estilo, somos más bien... —Jhonatan se sienta a mi lado, bastante cerca y no me gusta— Tímidos. —me alejo un poco acercándome a Will.
—Sí... —dice Will con recelo y ayudándome a cambiar de puesto con él lentamente— No parece. —termino de tomar mi leche y me levanto dispuesta a botarla, pero Víctor me la quita y la lleva por mí lo cual me parece muy extraño de su parte, me siento lentamente y miro a Sebas confundida. Sebas aclara su garganta y nos mira ignorando a esos 2.
—Chicos era para informarles que me quedaré en entrenamiento de fútbol, no podre acompañarlos. —dice mientras sigue comiendo su manzana. Will se atraganta con su sándwich y yo lo ayudo como puedo. Mira a Sebas con temor.
—Tengo reunión en la biblioteca a la salida... —dice apenas mejora y ambos me miran a mí y yo quedo en blanco. Fui yo la que decidió no meterme a nada no porque no me gustara sino porque no me siento lo suficientemente buena para entrar a un grupo.
—Puedo irme sola, no pasa nada —digo con una sonrisa.
—¿Estás segura? Puedo decir que me enferme o algo —dice Will preocupado y yo me niego, no voy a dejar que deje lo que más le gusta por mí, a la final le gusta mucho leer y debatir sobre cosas.
—Puedo acompañarla si gustan —escucho hablar a Jhonatan con una sonrisa— siempre me voy a mi casa solo y no me pesará acompañarla, es mejor eso a que vaya sola. —Will y Sebas se miran preocupados y yo ya me enojo.
—No me traten como si fuera niña pequeña, puedo ir sola. —digo enojada, suena la campana y yo me levanto de la mesa para ir a botar todos los residuos de mi bandeja para luego irme al salón.
Horas después...
Suena la campana diciéndonos que se acabó, me encuentro con los chicos para despedirme.
—¿Segura quieres ir sola? —pregunta Will abrazándome.
—Ni que me fueran a matar y se están comportando como si nunca nos volviéramos a ver, dejen la paranoia. —sonrió y ruedo los ojos, abrazo a cada uno y me dirijo a la entrada dispuesta a irme, pero un grito me detiene. Me volteo y veo a Jhonatan corriendo hasta estar a mi lado— ¿En serio? Dije que me iba a ir sola. ¿Tan poca fe me tienen? —digo molesta.
—No, no, no. No fueron tus amigos, al contrario, dijeron que no querían que estuviéramos cerca de ti. —dice con una sonrisa.
—¿Entonces...? —pregunto curiosa.
—Quiero acompañarte, no pueden prohibirme nada. —dice levantando los hombros dándole poca importancia— tú eres la que me puede decir si quieres o no mi compañía o la de Víctor, no ellos. —lo miro y no veo nada malo, no parece violador o asesino, aunque bien dicen que las apariencias engañan, pero le daré la oportunidad de que me acompañe.
—Bien, puedes acompañarme. Pero si intentas algo conmigo tengo el valor suficiente para golpearte donde más duele. —lo miro de arriba abajo y él levanta sus manos.
—Tengo mi conciencia limpia, no voy a hacer nada.
—Bien... —empiezo a caminar y él me sigue totalmente callado y dándome mi espacio.
Caminamos un rato en silencio hasta que se me ocurrió una pregunta que me provoco gran curiosidad.
—Una pregunta... —Miro a Jhonatan y él pone su atención en mí— ¿Nos hemos visto antes? Te me haces muy conocido, pero no sé de donde...
—Léa... Es increíble que no recuerdes... —dice serio y yo me confundo.
—¿Cómo me llamaste? —él al parecer se percata de lo que dijo entra en pánico.
—Perdón, fue mi error, me confundí, estaba pensando en voz alta sobre una amiga —me sonríe— sinceramente no sé si nos hemos visto antes, tal vez un déjà vu o algo, pero no recuerdo haberte visto. —me sonríe para brindarme tranquilidad, pero solo hace que me confunda.— ¿esta es tu casa no? —volteo a ver y quedo más confundida aún— Mejor me voy, nos vemos luego, chao, cuídate. —sonríe y se va rápidamente dejándome totalmente confundida. ¿De dónde salieron estos chicos?
Entro a mi casa confundida, saludo a todos normalmente y subo a mi habitación, lo primero que pienso es escribir en mi diario, lo saco de su escondite y me tumbo en mi cama para empezar a escribir de manera tranquila.
DIARIO
Paso algo superextraño hace un momento, la próxima vez que esos dos me dejen sola creo que sí es mejor quedarme sola. El chico nuevo me llamó creo que fue Léa o no sé ni siquiera si estaba comunicándose conmigo o prestándome atención, Víctor y él son muy raros, desde que llegaron no paran de... no estoy segura si me buscan o no sé, pero actúan muy raro conmigo y a los chicos eso no les gusta. Pero Jhonatan no parece mal chico, en realidad es dulce y atento aunque me asustó que supiera cuál era mi casa cuando nunca se la había mostrado... También que Léa (quien quiera que sea) no recuerda no sé qué, es raro pero dulce.
Mañana apenas entre le preguntaré como supo donde estaba mi casa, ahora que lo pienso. ¿Por qué los chicos amenazaron a Víctor y a Jhonatan de que no se acercaran a mí, sé que no tenemos buena vibra de ellos, pero la primera impresión no lo es todo, tal vez solo quieren ser nuestros amigos? No parecen que fueran casa nova, se hubieran ido tras alguna de las chicas lindas de la clase. Bueno, mañana regañaré a Will y a Sebas por eso, no deben ir amenazando por ahí como si el mundo les perteneciera a ellos.