En "Hijos De La Desgracia: El Camino De Celestino", presenciamos la continuación de la obra precursora, "Hijos De La Desgracia: Preludio", la cual cumplió el noble papel de llave inaugural para la epopeya que se despliega ante nosotros. En esta narración, nuevamente nos sumergimos en el arte de la metanarrativa, de la mano de la talentosa "Fabia, Pluma Rutilante". Es ella quien, en esta ocasión, desgrana las peripecias de Celestino, quien, tras cuatro largos años de riguroso adiestramiento bajo la tutela de Laureano y los demás miembros de la distinguida guardia real, finalmente se sumerge de lleno en la trama. En este punto, la historia se desvela y la subtrama principal sigue su desarrollo, centrada en el florecimiento del reino de Khirintorin.