Capítulo 1

   Me encuentro sentada bajo un gran roble.

   Tengo una vista de un gran prado; donde se encuentran muchas familias niños, niñas, adultos, padres, entre muchas personas.

   El día esta soleado; estoy bajo este triste árbol, en mi mano se encuentra un block de dibujo, muchas veces en mi tiempo libre salgo de mi casa y vengo a este prado a admirar a las familias siendo... siendo felices.

Muchas veces pensé, en que sería tener una familia que te adora, que por mas de la veces que te caigas o hagas algo "mal" ellos te apoyen...

   Siempre pienso en lo mismo al pararme en este parque, que aunque es pequeño posee una gran imagen aquellas personas que saben apreciarlo, por ejemplo yo, que aun parada, acostada o sentada en una rama de este viejo roble,  se puede mirar muchas familias...

   Familias... Familias felices, con cada integrante que la posee, con una madre, un padre, sus hijos e hijas, hasta su mascota. Puedo decir que esta imagen siempre me causa una gran inspiración, mirar todos estas personas y plasmarlas en cualquier material, pintar las rasgos de una pequeñas en brazos de su abuelo, de su madre o padre o cualquier cosa, también puedo escribir todos esto o en algunas ocasiones leer un simple libro.

   En estos momentos dibujar es algo que quiero hacer, sin dudar plasmo toda esa belleza.
 

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   Pudieron a ver pasado mas de una 1 hora, cuando una esta en su zona de confort pierde la noción de este, de no ser por el ruido de pisadas en el césped jamas hubiera levantado la vista de mi cuaderno.

   Frente a mi se encontraba, unos tenis negros que tal vez en su tiempo fuera mas brillantes y limpios, mi vista fue pasando de sus pies a su rostro, pero por aquellas luz del sol que daba en mi dirección no pude ver nada mas que su figura, la figura de chico.
 

   Aquella figura se quedo un tiempo parado frente a mi, sin decir nada por unos minutos, cuando vi que no tenia intención de hablar, baje mi vista para seguir con lo mio.
 

  Pasaron otros segundo tal vez, cuando el chico por fin decidió decir algo, esa voz tan... ¿profunda?... Tan cautivadora. Con tan solo unas palabras puede cautivar a cualquier persona del genero femenino o masculino según sus gustos, aunque no haya dicho mucho...
 

   Simples palabras para un solo objetivo, si tal vez una simple chica se emocioné por algo tan... Tonto.
 

   -¿Puedo sentarme?
 

   Si, tonto tan solo pregunto eso. Con un simple asentimiento de cabeza le dije que si.
 

   El chico simplemente se limito a sentarse a unos metros de mi, aun así sentado no pude ver su rostro, pero podría apreciar un bello cuerpo fuerte, un fascinante  cabello castaño que le falta un pequeño de corte, aun largo era lo que llamaba la atención, por lo menos en caso.
 

...
 

   Ignorándolo después de tratar de mirar su rostro, pasaron 2 horas, el sol ya se ocultaba a lo lejos, tal vez sea muy tarde pero considerando que mi casa siempre esta sola no hay problema si llego sola, acompañada o en cualquier condición.
 

   Pensando en tantas cosas no me di cuenta que el chico se había parado mirando la gran imagen del atardecer, eso colores hermosos anaranjada, pasando al amarillo y pequeños toques rosas con blanco, una de las maravillosa del mundo.
 

   Aquel chico.. Suena raro decirle así, pero tal vez jamas lo vuelva a ver pero aun así no olvidaré, él contempló un rato la vista y se fue, sin mirar atrás.
 

   Tal vez eso me dejo mal, puesto que quería saber como era, a lo mejor es solo por saber pero una pequeña parte de mi quería saber su nombre...
 

   Mirando por donde se fue me quede unos minutos, conforme fue cayendo el sol me fui parando y caminando a mi casa, en aquella oscuridad... puede ser malo ir sola.
 

   Pero que mas da, al final nadie llorar en mi muerte o se presentaran ante mi tumba, ni llevara flore y mucho menos limpiara mi desorden en este mundo.
 

   Caminar en la oscuridad bajo la luz de la luna es algo relajante, se pueden ver las pequeñas luces brillantes en el cielo, esas cositas pequeñas que con su luz ilumina algunas partes y tampoco no hay que olvidar el centro de todo, la luna. Es belleza que solo la ven aquellas personas que no saben que hacer, personas que se desvela pensado en mil y un cosas...
 

   Caminar y caminar es lo único que mi mente piensa.
 

   Llegar a mi... ¿casa?, fue interesante después de un largo día divagando con mis pensamientos. Subí a mi cuarto, para posteriormente acostarme en la cama y dejar a mi mente descansar, aunque claramente este no quería, solo pensaba en ese chico y si tal vez algún día lo volveré a ver.
 

...
 

  Desperté por el ruido que provenía de la plata baja de la casa, lo cual es raro ya que soy la única que pisa esta casa, por lo menos por estas fechas ya que.. se pude decir 'mi familia' siempre esta de vacaciones.
 

  Bajo las escaleras sosteniendo a mi fiel amigo bate, bajar las escalares es un reta ya que son viejas y en cada pisada se escucha el crujido de cada una. Al llegar a bajo miro por todos lados pero no encontré a nada, cuando pensé que era mi imaginación, de pronto se escucha mas ruido proveniente de la cocina, camino sosteniendo con firmeza el bate aun con las manos sudando, puede que aun que me pase algo a nadie le importara, pero aun así no moriré sin dar lucha ante aquellos que quieran hacerme daño.