Capítulo catorce.
El viernes es mi día favorito de la semana, pues creo que como ha todo el mundo. Me gusta llegar temprano a mi casa y tener un pequeño descanso de este manicomio que hace llamar colegio.
Mi vista esta puesta en el reloj de madera que se encuentra en la mesa del profesor de biología, una de las materias donde peor calificación tengo, por lo cual me siento en la mesa frente al profesor.
En mi mente escucho el tictac del reloj al igual que los segundos que faltan para que toque el timbre y pueda salir de este horrendo lugar.
—Pueden salir antes hoy, recuerden que si preguntan en que clase estaban...
—Estabamos en religión - murmuran todos.
El profesor de biología asiente con la cabeza y comienza a recoger sus cosas del escritorio.
Guardo mi lápiz y cuaderno en mi mochila y salgo de la sala de clases, quiero dormir, me siento exhausta, quiero olvidarme de todo y solo dormir hasta mañana.
—Hola bella durmiente.
Jaxon llega a mi lado y bufo.
—Adiós.
Comienzo a caminar más rápido y me alejo de él, pero me sostiene el brazo.
—¡Ey! - me grita - no es mi culpa que tu chico asiático sea lento y no te haya besado, yo solo fui a buscar a mi mejor amiga, no merezco pagar los platos rotos de lo que sucedió.
Hago una mueca de desagrado, el tiene razón, el no tiene la culpa de que Matthew se haya ido furioso.
—Lo lamento.
—No te perdono.
Abro la boca sorprendida.
—¿Que? - preguntó.
—Te perdonarme con una condición. - me cruso de brazos y le presto atención - que me acompañes esta noche a una junta en casa de Effy.
Frunzo los labios.
Effy ya no me cae mal, ahora me agrada, ella es todo lo contrario a lo tenia pensado, pero también estoy muy exhausta y solo quiero dormir.
—Estoy cansada Jaxon, necesito dormir, no ir a una junta.
Mi mejor amigo me sonríe y me toma de las mejillas.
—Por eso tendrás toda la tarde para dormir, pasaremos por ti a las 2100.
Jaxon me da un beso en la comisura de los labios y se va.
¿QUE FUE ESO?
niego con la cabeza frenéticamente y comienzo a caminar con lentitud en estado de shock, Jaxon casi me besa.
Que asco, es como mi hermano.
Salgo del colegio y fulmino a Aiden con la mirada, este al verme me sonríe y se me acerca, ¿Que Mierda?
—¿Rose, verdad? - ¿me está hablando?
Me voy a desmayar.
—S...i
Alzo una ceja y niego con la cabeza, no puedo estar nerviosa por que el se me acerque, si es lindo, demaciado lindo, tiene unos ojos verde preciosos, y en el centro son de un color parado impresionante, sus labios gruesos pero no es exceso, esa nariz definida, su cabello castaño y sedoso que dan ganas de tocarlo y dejar mis manos ahí hasta que me canse...
—nos vemos ahí, entonces.
Dejo de mirar el cabello de Aiden y lo miro nuevamente a los ojos ¿que dijo?
—Adiós, no me falles.
Abro los ojos asombrada ¿que me dijo?
Toco con nerviosismo mi cara, no se que me dijo, estaba muy consentida admirando su cabello como para escucharlo.
—¡Ahh! - grito frustrada y comienzo a caminar hacia la parada de buses.
Soy una estúpida, ¿como le pude hablar? El habla mal de las mujeres, se mete con muchas y después habla mal de ellas y lo peor es que ni siquiera preste atención a lo que me dijo, por dios, ¿que me dijo?
Estupido Aisén, estúpido chico lindo.
Me asusto al escuchar el sonido de una bocina, miro a la calle y sonrió, pero rápido lo cambió a una mueca.
—¿Estas bien? - pregunta Matt desde un auto color negro.
—Eso creo - murmuró y dejo de caminar.
Matt estaciona el auto y se baja, apoyando e en este, camino hacia el.
—¿Que haces por acá? - pregunto.
—Tenía ganas de verte.
Sonrió ante sus palabras, el sol llega justo a sus ojos color café, por lo cual se ven un poco más claro, es hermoso, mucho más que Aiden.
—¿Eso es bueno o malo?
Cruzo mis dedos y achino mis ojos.
—Eso - toma mis manos y juega con ellas - depende de como tu lo veas.
—¿Como tu quieres que lo vea?
Matt suelta una carcajada.
—¿Porque haces tantas preguntas?
—Porque soy curiosa, quizás.
Matt niega con la cabeza y me mira fijamente, yo hago lo mismo.
Para mi la belleza de Aisén no se compara con la belleza de Matt, Aiden es el prototipo de chico americano, muy cliché y asqueroso, pero Matt, Matt es mucho mejor en todos los sentidos.
—¿Que vas a hacer hoy en la tarde? - pregunta acercandose a mi.
Alzó la vista para mirarlo a los ojos.
—Jaxon me invito a una junta donde Effy, ¿la conoces? - hago una mueca - digo, todo el mundo la conoce.
—¿Es alta y de lindos ojos? - pregunta.
Sonrió como puedo.
Tengo celos.
—Sip.
Matt sonríe.
—La conocí, es muy simpática - agacha mi rostro y sus labios quedan muy cerca de los míos, quiero besarlo - nos vemos.
Matt se aleja y entra al auto color negro, baja la ventana y me guiña un ojo, para posteriormente arrancar a gran velocidad.
¿que me esta sucediendo?
Muerdo mi labio y cierro mis ojos, sin lugar a dudas me gusta Matt, me gusta mucho más de lo pensaba y no llevo de conocerlo ni un solo mes, ¿es eso posible?.
***
Miro mi rostro en el espejo y alzó una ceja, algo me falta, no soy una experta en maquillaje pero siento que algo me falta. Mis ojos se ven mucho más grande debido a la máscara de pestaña, mis labios están de un color rosa palo, mi piel se ve un poco más lisa de lo que es gracias a una bb cream, pero algo me falta.
Me veo muy pálida.
—¡Harper! - le grito a mi hermana y en cuention de segundo esta se encuentra golpeando mi puerta - pase.
Harper entra a mi cuarto con una bolsa en la cabeza.
—¿Necesitas algo? - pregunta.