Secuestrada por un ciclón

Hasta ahora e relatado solo la parte mas alegre y agradable de nuestro viaje, ahora, que ya conocemos como son las cosas a bordo del Jolly Rogers, es mi deber relatar los acontecimientos que trastornaron nuestra travesía.

La llegada a nunca jamas fue de lo mas tranquila, y como era nuestro plan, ahí nos reabastecimos, y tan pronto como retomamos el vuelo, nos fuimos en directo hacia el noreste, con Elsa y con Jack turnándose para proveernos de viento, y acelerando el paso. Entre jornadas Diego comenzó a cumplir su promesa, e instruyo a Lisbeth con la espada, descubriendo en el proceso que la niña tenia mucha ira reprimida, y que la misma parecía haber comenzado a acumularse en el momento de la muerte de Tony, algo que podría resultar peligroso si dominaba el arte de la esgrima, pero que a la vez podría cambiar fácilmente si se le enseñaba a usarla con conciencia, siendo esto el objetivo en el cual el maestro se concentraría. También se hacia evidente que aquella reunión entre James y Elsa había hecho mella entre los dos, que si bien seguían discutiendo de vez en cuando, al menos ya se toleraban un poco mas, lo que nos llevo a entender que aun había algo entre ellos, y que el tiempo, siempre de caprichoso, se encargaría de hacerlo renacer. También se comenzó a hacer evidente que cupido ya tenia a otros flechados a bordo, pues entre Silk y Jhony no costaba mucho pasar de las miradas indiscretas, a los besos, mientras que Erik se entregaba casi por completo a cubrir de atenciones a Merida, que con su carácter tan difícil e independiente lograba sacarlo de quicio, frustrarlo por completo, y finalmente… regalarle una mirada, o una caricia en el lado dañado de su rostro, ese en el que usaba la mascara, o una cálida sonrisa que acababa por confundirlo y esperanzarlo al mismo tiempo. ¡¿Por qué no podía simplemente ser directa y ya?!, ¿Qué placer le causaba a esa princesa rebelde el jugar así con el?.

Hippo en cambio comenzaba a mostrar la típica añoranza del que se a alegado mucho del ser amado. No hablaba de quien se trataba con exactitud, solo decía cuando le sacaban el tema: “la deje en casa, y en cuanto devolvamos a Lisbeth a su hogar, me voy directamente a donde ella”. Jack no parecía mostrar ni la mas mínima importancia a estos asuntos, excepto por la ira que se dibujaba en su rostro cada vez que Merida mostraba algo de afecto por Erik, pero siempre negaba estos sentimientos, alegando que a el lo estaba esperando otra clase de reina, un hada, para ser precisos, que era según sus palabras adicta al trabajo, y que fue gracias a esta devoción de ella que el la conoció, pero por tratarse de este personaje, cabe el abrirse a la idea de que solo estuviese fanfarroneando, en un intento por subirse la moral. Para Peter aquellos eran asuntos sin importancia, que ni le atraían ni le importaban, hasta que le recordaban que en nunca jamas lo estaba esperando Tigrilla, con lo cual el niño se iba volando en sus pensamientos, con una cara de tonto, y sin mucha atención en lo que estaba haciendo en el momento. Diego también tenia su mente fija en un solo rostro, que lo esperaba en casa, al igual que a Hippo, y en cuanto a Spider-man… bueno, el simplemente presumía de tener a muchas esperando por el, e intentaba conquistar a las tres mas o menos de su misma edad que se encontraban a bordo, pero recibiendo en cambio cada bofetada… y encontrando cada problema con los demás pretendientes, que si los describiera, esto seria mas bien una historia sobre estudiantes universitarios. ¡La idea de colgarlo de su propia telaraña se volvía cada vez mas atractiva!, y no faltaban voluntarios, hasta Chimuelo comenzaba a acariciar en su mente la idea lanzarlo por la borda. Lisbeth solamente los observaba a todos, y se reía del asunto, preguntándose que tanto había tenido que ver su hermano en vida sobre estas circunstancias.

44943. era de esperarse, aquel misterio en torno a su hermano se volvía cada vez mas intrigante, por no decir que interesante. Fundador de un circulo de amistades, que parecía mas bien una especie de logia o club de aventureros, cupido extraoficial, confidente, navegante… ¿Qué había hecho en realidad su hermano cuando se perdía en estas historias con sus lecturas?, ¿y sin importar que hubiese sido, esto tendría algo que ver con su triste desenlace?. Todo aquello estaba a punto de ser revelado.

Era una mañana tranquila, sin mayores complicaciones, y todos se encontraban de buen humor a bordo, cuando el cielo se nublo, y con ello, el viento comenzó a soplar, y a rugir con la furia de los rallos. Una tormenta eléctrica se estaba desencadenando, y según parecía, el jolly Rogers se encontraba justo en su epicentro. “¡Todos a sus puestos!”, grito james al ver como el temporal se ponía en nuestra contra, y sin perder tiempo, le obedecimos, pero apenas si logramos dar un paso antes de los salvajes vientos comenzaran a azotarnos, y a arrancar las velas del Jolly Rogers, solo logramos cubrir el polvillo a tiempo, lo demás…. simplemente se estaba desmoronando frente a nosotros, y cada vez que lográbamos remontarnos sobre la tormenta, esta parecía seguirnos de cerca, como quisiera solo tenernos atrapados, y torturarnos como lo hace un gato con su presa antes de decirse a darle el golpe final. En vano Elsa y Jack intentaron utilizar sus poderes para aplacarla, pero cada vez que lograban disminuir el peligro, esta resurgía con mas fuerza, dejando en claro de que había alguien mas en escena, y que estaba luchando contra nosotros. Las sospechas se vieron confirmadas cuando en medio de aquel ciclón, se logro distinguir una figura femenina, de piel oscura, y cabellos blancos, con los ojos luminosos, y vistiendo un traje negro que poco cubría su cuerpo, pero del cual resaltaba una ceudo capa que parecía ser lo que la mantenía en el aire en aquel momento.