Una Fiesta, un Juego y un Beso
Un mes después…
Después de que trabajáramos juntos hace ya un mes, lo evito a más no poder, lo ignoro, me hago que no lo veo, me voy de donde este, todo, porque me siento todavía muy herida.
Gema ha escuchado que Yina y el no son nada, que él solo quiere que sean amigos, pero Yina no se rinde, eso lo escucho en el baño, cuando ella hablaba con sus amigas, por un lado, me alegro y por otro me pregunto ¿Por qué no son novios? Ella es muy guapa, bueno él tendrá sus razones.
Hace unos días Gema me dijo para que fuéramos a una fiesta de Marcos, es su cumpleaños, imagino que Charlie ira con Yina, por esa razón no quiero ir, pero mi amiga insistió tanto hasta que ganó y ahora estamos de camino para la fiesta, con unos vestidos muy coquetos, el de Gema es crema con corte V entallado a su cintura, muy sofisticado, ella está segura que Marcos la hará su novia.
Yo en cambio tengo un vestido verde esmeralda, de mangas largas y falda suelta, me encanta, tenemos los mismos tacones de aguja, siempre tratamos de tener algo igual cuando vestimos.
Llegamos en limusina como divas, gracias a los gustos de mi padre, salimos y el mismo Marcos nos recibe en la puerta.
— Buenas noches chicas —dice tímido—están hermosas —nos dice, pero solo está mirando a Gema que ya está sonrojada.
— Felicidades Marcos — le decimos al unísono.
Me acerco lo abrazo y le entrego su regalo, Gema lo abraza, me doy cuenta que el cierra los ojos cuando lo hace, es un momento muy tierno.
— Vengan, sean bienvenidas, somos pocos, espero que disfruten — nos invita a entrar.
Entramos a su casa, una gran mansión, parecida a un castillo, él es hijo de un gran empresario conocido y su madre una actriz de Hollywood.
Es verdad somos pocos, es un ambiente tranquilo y acogedor, gracias a Dios que conozco a la mayoría, busco disimuladamente a Charlie y lo encuentro en una esquina ¿solo?, está muy sexy apoyado con vaso en la mano, me está viendo que vergüenza, me saludo y yo tímida se lo devuelvo, hoy no tengo ganas de ignorarlo y mas que no veo a Yina por ningún lado, al parecer no vino con ella, perfecto.
Pasamos unas horas bebiendo y bailando, Gema pegada Marcos. Uno de los invitados propone un juego el cual todos aceptamos encantados.
Es el juego de la botella modificado, al que le caiga tiene que elegir verdad o reto, nadie se escapara.
Unos tuvieron que tomarse unos chupitos, otros tirarse a la piscina con todo y ropa, Gema tuvo que besar a Marcos ya que como lo veían juntos y ella pidió reto, así les toco a todos lo que parecían pareja, me toca a mí, pediré reto porque si digo verdad quien sabe que pregunta me hagan.
— Bueno, Karlie, te retamos a que beses a Charlie, tienen rato tirándose miraditas—como les dije a todo el que parecía pareja.
— ¡¡¡¡Ohhhhhhh!!!! —todos gritaron.
— Ok, lo haré — si me rechaza será mi perdición y la burla hasta que termine el año.
Me encamino hacia él, me mira con una sonrisa ladeada, se ve tremendamente sexy, este será mi primer beso, espero hacerlo bien, además será un piquito no puede ser difícil ¿verdad?
— ¿Estás segura Karlie? —me dice bajito para que solo lo escuchemos los dos.
— Muy segura
Me acerco, coloco mis manos en su mejilla y lo voy atrayendo hacia mí para besarlo, sus labios son perfectos, los nuestros se acoplan perfectamente, es dulce, siento que coloca sus manos en mi cintura, me pega más a él y el beso se intensifica mas, me insiste a que habrá mi boca para profundizarlo y yo solo me dejo llevar, me siento en las nubes ahora mismo, no quiero parar, quiero que me bese siempre y no solo esta vez, se aparta lentamente y siento ya su perdida, cuando está a escasos centímetros me dice:
— Me gustas mucho Karlie — siento que me derrito y vuelve a besarme con más intensidad, todos aplauden.
— Tú también me gustas mucho Charlie.
Un comienzo de algo hermoso, mi primer amor.
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Editado: 11.09.2022