Entrenando en secreto

La familia del señor Ernesto tapia fueron al bosque que está detrás su casa. Estaban disfrutando de su rica comida, después de un rato escucharon ruido muy extraño, uno de los niños fue a mirar por curiosidad y apareció un monstruo que iba atacar al niño. Don Ernesto siempre iba armado y lo atacó y le dijo a su esposa que escapara con los niños muy rápido para que no lastimara a nadie. La mujer tomó a sus hijos y corrió al pueblo para pedir ayuda. Le dijo el alcalde que su marido estaba siendo atacado por un monstruo y necesita ayuda. El alcalde dijo a los aldeanos que necesitaba su ayuda. Tomen las armas para poder ayudar al señor Ernesto que está en peligro. Los que quieren venir vengan y los demás estén alertaba por si acaso. Cuando llegaron era demasiado tarde ya era un cubo de cristal. Todos estaban muy tristes porque habían llegado muy tarde para ayudar, no podían hacer nada, pero sabían que tenían que esperar un mes para que él pudiera salir de esa cosa. Su esposa y sus hijos no dejaban de llorar, tuvieron que regresar al pueblo, no podían hacer nada más que esperar que él saliera. Cuando llegaron al pueblo los aldeanos estaban muy triste por lo que le pasó a don Ernesto. Canari se había enterado de que su tío había sido atacado por los rumores que escuchó, ya que nadie le decía nada, tenía que averiguar la cosa por ella misma, porque sus padres no les importaba lo que ella hacía y la dejaron a un lado. Ellos solamente se dedicaba a entrenar a sus otros hijos todos los días sin descanso. Mis padres quería que ellos fueran los mejores magos del pueblo y más. A veces los miraba sin que ellos me vieran mientras entrenaban. Si hubiese nacido con el don de la magia sería fantástico, yo entrenaría con ellos sería emocionante, por fin mis padres estarían felices y seriamos una familia feliz, pero no es así. Mi familia me trataban como si fuera una visita y mis hermanos a veces me hablaban, pero solo para pedirme que hiciera algo para ellos, nada más, porque no tengo poder como mis hermanos, yo era tranquila, no molestaba a nadie, no como los hijos del vecino que eran muy malos y sus amigos tan bien y sí siempre me molestaban a mí o a los animales y si yo me defendí y los golpeaba, mis padres me castigaban. Yo siempre fui una niña buena para que mis padres se sintieron orgullosos, al menos de eso a veces yo los golpeaba solamente en defensa propia. Los golpeaba tantas veces, pero seguían molestando, pero un día un niño me defendía de los niños que me estaban molestos. Él dijo que su abuelo le dijo que debe defender a las personas de la gente mala. Me sorprendió cuando dijo eso y los niños salieron corriendo, yo únicamente me reía Ja, ja, ja. Él preguntó por qué ellos te molestaban. Eso no lo sé, yo aquí les caigo mal a todos a pesar de que no les hice nada malo. Me sentía tan feliz de que alguien le diera su merecido a esos niños. Me preguntó cómo estaba, yo le dije que bien. Le agradecí por ayudarme y me despedí y Él también hizo lo mismo y se fue. Al día siguiente fui jugar lejos del pueblo para que no molesten esos tontos niños para poder entrenar tranquila con una rama como si fuera una espada de verdad. Después de una hora escuché un ruido fue a ver que era estaba un poco asustada, pensé que era un monstruo o esos tontos niños, solo era el niño que me había ayudado, el otro día me dio un susto cuando apareció. Él me dijo qué estás haciendo en ese lugar. Entrenando, ya que no puedo usar magia, al menos puedo usar una espada de mentira y tú qué haces aquí._ Estaba paseando y encontré este sitio, es muy bonito._ Cómo te llamas, no sé si te había visto antes, eso creo. Él me dijo que se llamaba Max y que ese un par de días vino a vivir aquí._ Tú cómo te llamas no sé si te vi antes._ Yo soy Canari un gusto en conocerte._ A tú eres la que habla la gente que no tiene magia, pero eso no tiene nada que ver que te traten mal solamente porque no puedes usar magia._ Yo me pregunto lo mismo, pero da igual juguemos que somos aventureros todo el día. Cuando estaba anocheciendo él despidió de mí, tenía que volver a casa o sus abuelos se enojarían luego de una hora, yo hice lo mismo antes que se fuera, le dije que nos veríamos otro día. Está bien, los veremos mañana el mismo lugar. Cuando llegue solo fui a dormir, estaba muy cansada por entrenar y divertirme todo el día. Después de ese día yo y Max entrenamos todos los días, siempre en el mismo lugar. En la mañana desperté, me cambie la ropa y desayuné, hice mis deberes y después fui corriendo a mi escondite que está detrás de la cascada, ahí estaba Max practicando con su bastón mágico, yo me escondí y lo quería asustar, pero la que se asusta fui yo Max solamente serio Ja, ja, ja. Vamos a entrenar y deja de reírte._ Está bien Canari y lo siento mucho. Entrenamos toda la tarde, descansamos un poco para comer la comida que yo había traído, él trajo unas galletas que estaban muy deliciosas y algo más. Mi abuela es la mejor haciendo galletas y otros más._ Tienes mucha razón Max estas galletas son lo más rico que he probado._ Oye Canari tú vives con tus padres o vive sola._ Yo vivo con mis padres y mis dos hermanos, pero es como si yo estuviera viviendo sola, Como no tengo magia, no entrenó con ellos, bueno y tú vives con alguien. Yo con mis abuelos porque estoy muy enojado con mis padres, por eso me vine a vivir aquí con ellos._ Por qué estás enojado con tus padres, hiciste algo malo y te castigaron y por eso te fuiste de ahí._ Es por porque yo quería ser un aventurero no un guardia del palacio._ Yo también quiero ser una aventurera, por eso, entreno para ser muy fuerte y salir de viaje y tener muchas aventuras._ Vas a tener que entrenar mucho para hacer eso. Pasaron varias semanas entrenando, pero yo estaba un poco distraída, estaba preocupado por mi tío, quería ver si ya había salido de ahí y no sabía cómo averiguarlo porque nadie me decía nada. Se me ocurre una idea, le pediría a Max que lo averigüe cuando lo vea mañana en el escondite.