La historia de Rosalie Williams

CAPITULO 5

  Rosalie

   Hoy me levante con ganas de hacerle una pequeña broma a mi querido hermano, por lo que le deje un mensaje de que lo vería en la piscina para hablar de algo importante, tenia planeado lanzarlo a la pisana.

    -Rosa, ¿Qué paso? ¿De que quieres hablar?- me dijo acercándose a mi.

    -Es que me levante con ganas de hacer algo y quería tu ayuda para eso- le dije inocentemente.

    -¿Que es lo que quieres hacer?- dijo extrañado porque le pido ayuda.

    -Acércate, ven- el vino hasta mi y yo le señale en la pisana, el se quedo mirando allí donde yo le señalaba.

    -No veo....

     No terminó de hablar ya que lo arroje al agua y me eche a reír como loca, cuando lo vi mirarme enojado salí corriendo hacia la casa, no quería que me lanzara a la piscina con el, quería vivir y por eso salí corriendo, fui escaleras arriba y me escondí en mi cuarto.

 

      Yo estaba muy tranquila caminando por la escuela, era una persona feliz, a pesar del pequeño incidente que tube con mi hermano al lanzarlo a la piscina sabiendo de que el se enojaría, me gusto mucho estar a solas ese día con el, papa estaba trabajando fuera, esta con el papa del mejor amigo de mi hermano, aun no conozco a ese chico, solo se que mi hermano tiene una amistad con el, y me siento muy feliz de que mi hermano tenga a alguien con quien compartir al igual que yo, que tengo a Betty, quien esta loca por mi hermano.

       Un día como todos estaba en el centro comercial esperando a Betty, las dos iríamos a comprar ropa para el verano, para ir a la playa y para cuando hagamos pijamadas en mi casa o en la de ella, siempre comprábamos ropa y la mitad de la ropa de cada una se iba a la casa de la otra.

      No me había dado cuenta de que alguien se había sentado a mi lado hasta que llego una señora muy elegante y estirada a nuestro lado y le dio un beso a ese señor, como dije, no me había dado cuenta de ello, yo seguía en mi celular pasando el tiempo viendo fotos en las que mi hermano y yo nos divertíamos de niñas y ahora que somos adolecentes,  siempre peleamos para terminar en la misma habitación durmiendo juntos, y siempre le ayudo con la tarea para que no repruebe y pueda estar con los deportistas como el quiere.

         En la escuela y fuera de ella, mi hermano y yo somos muy unidos, siempre me defiende y le demuestra a los demás que el me quiere sin importar la opinion de ellos, ya le había pedido que me presentara a su mejor amigo, pero me dijo que no porque es un  idiota y no quiere a su mejor amigo como cuñado, lo gracioso es que yo no quiero novios, mi hermano y mi padre son los únicos hombres a los que quiero a mi lado, ellos son mi vida, no les permito verme destrozada, como ellos lo están por lo de mama, pero aun asi ellos salieron adelante.

        -Oh, Rosalie- dijo alguien sacándome de mis pensamientos- Que bueno que te veo, espero que te valla bien con el juicio que tendrán tus padres por la custodia tuya y de tu hermano- yo la mire como si le hubiera salido otra cabeza, mi padre no haría tal cosa, ya que ellos nos dieron a elegir con quien queríamos quedarnos.

        -Perdóneme, pero no se de lo que usted me esta hablando- le dije lo mas educadamente posible, ella puso una sonrisa que da miedo.

       -Pues, tu mama no te quiere y tampoco a tu hermano, y le estorban a tu papa, asi que creo que se irán fuera del país junto a sus otros hermanos- esa señora me estaba dando miedo- Por eso están peleando la custodia, tu papa los quiere enviar con su abuela, pero tu mama los quiere enviar a Europa para ya no verlos mas.

       -No se quien sea usted, pero no tiene derecho de hablar así de mis padres- esa señora ya me estaba  cansando, no soy de faltarle al respeto a los adultos, pero tampoco me pueden provocar porque fácilmente mando al diablo a todo el mundo.

       -¿No me crees?- dijo con cara de incredulidad fingida- Yo tengo pruebas de lo que te digo es verdad- dijo y me mostro un audio donde mis padres hablaban sobre enviarnos a mi hermano y a mi lejos de ellos, porque ya no nos querían como antes y decían que nosotros teníamos la culpa de su separación.

      Como siempre no le di a demostrar lo mucho que eso me afectaba a nadie, Betty se había dado cuenta de que algo andaba mal con migo pero no dijo nada, compramos todo lo que teníamos que comprar. Para cuando llegue a casa mi padre estaba hablando por teléfono con alguien, se que era mama ya que siempre hablaba con ella a la misma hora y siempre discutían por lo  mismo. Yo me fui directo para mi habitación y me encerré en esta con llave.

      Dentro de mi cuarto me la pase día y noche, mi padre no se preocupaba y eso empeoraba mi situación, mi hermano era el único que se daba cuenta de que ya no iba a la escuela, ya no comía, no salía de mi cuarto y se que eso le preocupaba, ya que para entrar a mi cuarto usaba la copia de la llave que tenia de mi puerta y siempre me encontraba de la misma manera, siempre me encontraba llorando, el es mi todo pero ya no vale la pena, siento culpa en mi Corazon, siento que mi vida no tiene sentido y que todo se fue a la mierda.



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En el texto hay: manicomio, primer amor, perdida

Editado: 09.09.2023

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